TÓXICO || CHRISTOPHER VÉLEZ

CAPÍTULO 11

X:¿Qué haces tan sola por aquí, preciosa? -dijo el hombre de piel morena cuando estaba a menos de un metro de ella-
X:No es lugar para una mujer como tú, bonita -dijo el otro hombre acercándose a ella-
__:Solo... Estaba yendo a mi casa -retrocedió un paso pero ellos se acercaron-
X: Podemos acompañarte -acarició su mejilla con su dedo pulgar-

Él tomó su muñeca y la retorció, haciendo que el hombre de piel morena, gima en voz baja. Movió su muñeca con brusquedad y luego la soltó.

X:¿Tú eres su novio? -rió y Christopher se puso frente a ellos-
C:Lo soy -sacó una pistola de su bolsillo- y si no se van ahora -le quitó el seguro al arma- juro que voy a matarlos -dijo con seriedad-

Ambos tensaron la mandíbula, retrocedieron unos pasos, dieron la vuelta y se fueron.
Él le puso el seguro a la pistola y la guardó.
Dió la vuelta y la miró a los ojos.

C:Te dije que yo te llevaría a casa, __.

La tomó de la muñeca con fuerza y ambos empezaron a caminar al auto de Christopher a paso rápido.

__: Christopher... Me duele... Suéltame.

Él siguió caminando y apretó más su agarre. Cuando llegaron al auto, él la soltó y quitó el seguro del carro.
Ambos subieron y esta vez, él no la miró, no la tocó y no puso música, solo condujo a una velocidad bastante alta.
Al llegar al edificio, él se estacionó y miró a través de su ventana después de quitar el seguro.
Estuvieron varios minutos en silencio hasta que ella desició romperlo.

__:¿Porqué tenías un arma? -lo miró-
C:Solo... Es protección ¿Si?
__:¿Porqué me seguiste?
C:Quería ver que llegues bien... Es todo.
__:¿Qué...
C:Mierda, - la miró- deja de hacer preguntas y solo agradece que te traje aquí, __. Si no te hubiese seguido, tal vez ahora estarías siendo abusada por esos dos imbéciles.

Ella desabrochó su cinturón y abrió la puerta. Se bajó, cerró la puerta y entró al edificio.

...

C:Te quiero en mi oficina en dos minutos -colgó el teléfono-

Ella soltó un suspiro, se levantó y salió de su oficina. Entró al elevador y subió hasta el último piso.
Fue hasta la oficina de Christopher y entró.
Él se acercó a ella y cerró la puerta.

C:No quiero que me vuelvas a desobedecer, ¿Está claro?