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Zhengguo agradecía tener mucha paciencia, de lo contrario, la linda omega con cabello rojizo, en ese momento ya no lo tendría.

—¿Hay algún problema?— preguntó llamando la atención de los presentes.

Apenas había llegado y las omegas frente a él parecían hechar chispas. La omega peliroja dejó de hacer lo que hacía y miró al beta con escepticismo, pues aunque su rostro lucía ridículo por las redondas gafas y las pequeñas pecas que poseía, no negaba que el traje que llevaba puesto hacía relucir su figura.

—Esta mujer desea ver al alfa Park, pero se niega a utilizar el supresor de aroma que le he entregado— dijo Lisa intentado excusarse.

—Me niego a creer que el supresor de aroma sea algo obligatorio, es ridículo, ¿por qué debería esconder mi maravilloso aroma?, estoy segura que se trata de pura envidia por parte de esta omega, su aroma simple debe de avergonzarle— dijo con veneno en la voz.

Lisa sin poder evitarlo, soltó un ligero gruñido, no iba a permitir que una omega mimada le tratase así.

Antes de que todo se saliera de control, Zheng decidió intervenir.

—Señorita Yi Eun Soo, ¿cierto?— la omega asintió. —Permítame presentarme, soy Tian Zhengguo, asistente personal del alfa Park, lamento informarle que si no utiliza el supresor, no podrá recibirle—. La peliroja le miró incrédula y antes de decir algo, el beta siguió. —La señorita Lalisa solo estaba cumpliendo con las ordenes del señor Park, por lo que le pido cortésmente, se abstenga de hacer ese tipo de comentarios despectivos hacia ella.

Lisa sonrió y miró a su amigo, emitiendo un muy bajo "gracias". Eun por su parte le miró ofendida, ¿cómo se atrevía a tratarle de esa manera?, No sabía que estaba hablando con la futura señora Park. Al menos en la fantasía que su loca mente había creado.

—Mira, no me importa quien eres, yo soy alguien muy importante, así que deberías aprender a tratarme como tal, además, el alfa Park y yo seremos socios pronto, por lo que es necesario que sepa quién soy, incluyendo mi aroma— utilizó su último recurso, esperando que el beta se apartará y le dejaste continuar con su camino.

—Señorita Yi, usted y todos lo que estamos aquí presentes sabemos que si se trata de hacer negocios, el aroma es lo último que importa, por lo que le pido que se ahorre esas excusas y atienda las indicaciones, por favor— dijo esta vez el beta, sin rodeos y con un fino hilo de paciencia.

La omega se sintió avergonzada al ver cómo las personas que se encontraban presenciando todo, comenzaban a murmurar y apretó los dientes con enojo.

Zhengguo no era ingenuo, sabía porque la omega se aferraba a la idea de lucir su aroma frente al alfa.

No negaba que era un aroma llamativo, incluso se sintió algo celoso en su interior, manzanas verdes y caramelo era lo que desprendía del cuerpo de la chica, cualquier alfa caería con ese aroma, claro, exceptuando a su jefe.

El aroma exquisito se volvió algo amargo, Zheng evitó hacer una mueca al percibirlo, pero Lisa hizo una cara de total desagrado. La pelirroja se dirigió al beta con un gruñido, esperando que el chico reaccionase intimidado, más sin embargo, la mirada desafiante que éste poseía le hizo enojar aun más. Antes de poder hacer algo, el ascensor se abrió.

—Señor Park— dijo el castaño, haciendo una leve reverencia. Todos los presentes que habían dejado de trabajar para ver la escena, se alarmaron al ver a su jefe en ese lugar y copiaron rápidamente la acción del beta.

La pelirroja dirigió su mirada al hombre y sintió su omega chillar, era realmente más apuesto que en las fotos. Cabello rubio grisáceo y hermosos ojos color miel, junto a unos labios exquisitos, sin olvidar su cuerpo que lucía realmente bien bajo ese traje negro. Su aroma fue lo que más llamó su atención, era a bosque, siendo una mezcla de pino, lluvia y frutos.

Amor y Aromas | [JIKOOK]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora