Capitulo7 - La Huida -

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Despertó sintiendo la cálida y suave manta que le cubría dando un vistazo rápido a la habitación.

Sonrió estirándose al levantarse de la cama, caminando feliz fuera de la habitación viendo al mayor en la cocina haciendo el desayuno.

Había estado pensando toda la noche, era más que obvio que debían irse de la cuidad, un tiempo al menos hasta que la situación se calmara un poco pero para eso necesitaban varias cosas sobre todo un auto para transportarse, siendo época de invierno debía comprar cambios para Bruce cosa que no había podido hacer por el sorpresivo encuentro con el mayordomo y reunir comida para el camino pero en ese momento no sabía hacia donde debían ir; nunca había tenido que irse de Gotham y mucho menos había salido de la cuidad por placer o cosa parecida, a decir verdad lo más lejos que había llegado era la mansión Wayne que se encontraba en los confines de la cuidad.

Así que por eso se había encontrado reflexionando durante la noche, pensando en a donde debían ir y que tan factible era aquello.

-Buenos días Arthur - escucho la voz del niño a su lado haciéndole voltear dado que en realidad no se había percatado de su presencia

-Buenos días Bruce - saludo de vuelta dándole una sonrisa - justo a tiempo para el desayuno - continúo dándole un plato para después acariciar la cabeza del menor que sonrió felizmente dirigiéndose a la barra

Le sirvió una vez que se sentó, apagando la estufa haciendo lo mismo y entonces se dio cuenta que por más planes que hiciera debía preguntar al niño porque una cosa era estar con él pero otra muy diferente era irse con él a otro lugar, así que debía tener una charla muy seria con el pequeño antes de hacer planes.

el desayuno paso normalmente aunque el niño noto que a diferencia de las charlas que solía sostener animadamente en las mañanas con el mayor mientras estaban en la mesa, esta vez Arthur se encontraba callado, con expresión moderadamente sombría y bastante distraído, sabía que no le estaba escuchando realmente.

Terminado el desayuno y habiendo ayudado al mayor a limpiar la cocina se dedicó a verle desde la sala dado que era claro que algo preocupaba a su hermano, después de todo Arthur no solía murmurar para sí y mucho menos pasearse distraídamente de un lado a otro.

El mayor suspiro cansado, darle tantas vueltas al asunto no le llevaría a nada, era inevitable hablar con el niño sobre aquello así que decidió no retrasar la espera.

Le sentó en el sillón individual suspirando nervioso ante la mirada expectante y algo confundida del menor.

- ¿Pasa algo Arthur? - preguntó Bruce pensando que tal vez había dicho o hecho algo que no había sido bueno

-Bruce debemos hablar - contesto sentándose en el sillón más largo suspirando de nuevo esta vez un poco cansado - recuerdas que ayer tu mayordomo nos vio

-no podría olvidarlo - contesto juntando las manos nervioso - casi nos alcanza

-lo sé, bueno no sé si fue él o tal vez lo oficiales, pero ahora tienes un cartel de búsqueda - comento notando como el niño cambiaba de su expresión nerviosa a una un poco alterada

- ¿me están buscando? - pregunto alarmado

-al parecer no solo a ti, también hay un cartel con mi nombre - reveló apretando un poco su muñeca algo que solía hacer cuando estaba nervioso

-Arthur si nos buscan es probable que nos encuentren - dijo con tono nervioso el pequeño

-tardaran un poco, muchos de los oficiales están ocupados tratando de controlar las manifestaciones y saqueos esporádicos, pero lo harán eventualmente – menciono resignado - por eso debemos hablar, no me gustaría obligarte a hacer nada y si no te apetece podemos hacer otro plan, pero...

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