Criatura

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Era muy raro que un ángel de arrepintiera de sus acciones cuando se tratada de ayudar a otros, aun cuando era a un de sus enemigos hereditarios, pero en ese momento mientras la criatura entre sus brazos lloraba como si quisiera adelantar el fin de los tiempos, mientras que él hacia lo inhumano para mantenerse en calma en medio de jardín de la familia Dowling, maldecía a Crowley una y otra vez con su pensamiento.

Y es que el pequeño Warlock de tan solo dos meses de edad era muy apegado a su nanny Asthoreth, pero al ver al demonio tan cansado Aziraphale sugirió cuidarlo unos momentos para que descansara apropiadamente, finalmente detener el Armagedón era tarea de ambos.

- Vamos si es el anticristo. - había dicho el ángel. - pero sigue siendo un bebé y yo un ángel de Dios, puedo encargarme sin problemas de él una hora o dos. - afirmo con una amable sonrisa, mientras extendía sus brazos.

- No es que no confíe en ti, pero... - allí la serpiente del Edén se mordió el labio inferior, realmente se le veía agotado. - Solo 15 minutos. – sentencio, pasándole aun durmiente Warlock. - si necesitas algo me despiertas. - advirtió.

- Ve a descansar. - alentó un confiado a Aziraphale.

Pensando que nunca había visto a Crowley así de cansado antes ¿Cómo era posible que cuidar un bebé le cansara más que el incentivar a la humanidad a pecar? No le tomo mucha importancia en ese momento y por un rato todo fue paz y tranquilidad en el jardín de los Dowling... por una hora.

Treinta minutos después de intentar calmar al bebé, asegurándole que su nanny estaría con ellos pronto mientras era mecido por un muy angustiado ángel. Aziraphale se encontraba rogándole al Todo poderoso que le diera paciencia o bien que despertara a Crowley quien estaba en una merecida siesta soñando con cierto jardinero realizando actividades lujuriosas.

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Nota de la autora: A los niños en mi país también se les dice criaturas, sobre todo si llegan tristes o heridos.  

Los días de aquellos ineffablesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora