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Esta vez desperté temprano, me despedí de mamá antes de que se fuera al trabajo, hice el desayuno, llevé a Leo a la escuela y iba a temprano a clases.

Todo iba bien, pero sabía que no duraría mucho.

Caminaba tranquilamente por los pasillos de la universidad, hasta que vi el grupito de Kai sentados en unos bancos justo por donde iba a pasar, estos me miraron y una persona en específico sonrió al verme, Kai se levantó apagando su cigarro y sus amigos lo siguieron, yo comencé a caminar en dirección contraria, caminaba buscando un lugar donde esconderme, estos me perseguían lentamente hasta que me atraparon en una de las escaleras.

-Uff...tenias razón..la hija de la sirvienta si estudia aquí.- dijo Kai al frente de mi.

-Yo sabía que había visto esa cara en algún lado.- dijo el chico divertido

-¿Que haces estudiando aquí? Pensé que querías seguir los pasos de tu madre..ser una sirvienta.-dijo Kai empujándome

-Déjenme en paz.-dije

-¿En paz? Los muertos de hambre como tu no merecen eso. Debes ser tratada como la sirvienta que eres.-dijo Kai y los demás asintieron

En menos de un segundo sentí como dos chicos me agarraban de los brazos.

-¡Suéltenme!- grité, habían muchos estudiantes pasando por ahí, algunos filmaban y otros solo veían.

-¡Miren! Creo que la sirvienta no alcanzo a darse una ducha..tranquila. Yo te ayudo.- dijo Kai lanzándome encima el balde de agua sucia del conserje.

Todo mi cuerpo se mojó por esa asquerosa agua, todos miraban y soltaban una carcajada, sabía que saldría en las redes sociales haciendo el ridículo.

-¡Hay que llevarla a su clase de limpieza!- gritó uno de los chicos

Los dos chicos que me tomaban de los brazos me llevaron hacia el salón del conserje y me lanzaron ahí encerrándome.

Caí al suelo lastimando mis rodillas, me levanté rápidamente antes de que se cerrara la puerta pero ya estaba cerrada con llave

-¡Déjenme salir!- grité golpeando la puerta con mis manos.

Solo escuchaba la risa de todos.

Pasaron 20 minutos y escuché como abrían la puerta.

Dejando ver a una Rosé preocupada y al conserje con las llaves en la mano.

-Lisa..- susurró Rosé abalanzándose sobre mi en un abrazo.

-Dios mío.- dijo Rosé abrazándome con fuerza.
...................

Después de dar algunas clases pude salir de la universidad, caminaba por las oscuras calles con una notable tristeza.

Rosé se había ofrecido a llevarme a casa, pero terminé dándole una mala respuesta por mi enojo.

Sentí unas gotas caer en mi hombro y alcé mi mirada hacia el cielo.

-Maldición.-dije y comenzó a llover fuertemente.

Corrí hacia una pequeña tienda quedándome afuera para que no me mojara tanto.

Me abrazaba a mi misma por el frío, las calles estaban muy oscuras y solitarias.

Escuché como la campanilla de la puerta de la tienda sonaba indicando que alguien salía de esta.

Volteé mi mirada y me fijé en las personas que salían.

Pude reconocer a Jennie y a lo que supuse que era su hermana menor.

Jennie es una de las chicas más populares de la universidad, de lo que sé, es novia de Kai, es muy inteligente y talentosa. Todavía me pregunto por qué es novia de ese idiota.

Jennie me miró al igual que su hermana menor, Jennie traía en su mano una bolsa con las compras y en la otra sostenía la mano de su hermana.

-Nini..un vagabundo..-dijo la niña viéndome

-Em..disculpa..-dijo Jennie mirándome

Parecía un vagabundo...

-¿Lisa verdad?- preguntó Jennie y yo sentí

-Nini..papá dice que no hables con gente rara..- dijo la niña jalando la chaqueta de Jennie

-Ella no es gente rara. La conozco.- dijo Jennie mirándome

-¿Necesitas un aventón?- preguntó

-Yo..no...yo..estoy..bien.- dije abrazándome por el frío.

-Estas muriendo de frio, si te quedas aquí hasta que deje de llover te dará algo.- dijo Jennie

-No creo que llueva por tanto tiempo..-dije y justo cayó un rayo haciéndome saltar del susto.

-Mmm, es una tormenta.- dijo Jennie divertida

-Está bien.-dije y Jennie abrió su auto dejándome pasar rápidamente.

-Por donde vives Lisa?- preguntó Jennie conduciendo

-En el sur.- dije

-Mmm, no podemos ir por ahí, las calles están inundadas.- dijo mirándome por el retrovisor.

-Está bien..yo..puedo seguir caminando.- dije y Jennie soltó una carcajada

-Deja de ser tan orgullosa. Vamos a mi casa.- dijo Jennie

-¿¡Qué?!-Grité abriendo mis ojos

-No voy a dejar que camines con esta tormenta.- dijo sin mirarme

-Pero..yo..no puedo quedarme en tu casa..-dije

-Tranquila Lisa..no vas a mudarte a mi casa, es solo por hoy.- dijo divertida

Al parecer ya habíamos llegado, era una casa muy grande y blanca, Jennie estacionó el auto y sacó un paraguas para bajar a su hermana primero y después vino por mi.

-Quítate los zapatos Lisa.-dijo Jennie y yo me quité los zapatos y los dejé afuera.

Entré a la gran casa, era demasiado linda, tenía muchos cuadros caros y era muy elegante.

-Hey.-dijo Jennie al verme con la boca abierta

-¡Uh! Lo siento..es muy linda tu casa.- dije sonrojada

-No es mía, es de mis padres. Solo voy a a considerar algo de mi propiedad cuando yo lo haya comprado con mi propio dinero.- dijo secándose el cabello con una toalla.

-Mis padres no están.. así que..puedes quedarte en la habitación de invitados..Ella, ve a ducharte te espero para la cena.- dijo Jennie y la niña fue hacia su habitación

-Muchas gracias Jennie.. pero no pienso quedarme a dormir.. cuando deje de llov-

-Escucha Lisa. Como dije antes, no voy a dejar que te vayas sola ni con esa tormenta hacia tu casa, que por cierto queda demasiado lejos de donde estamos. Así que, sube las escaleras y dúchate.- interrumpió

-Pero-

-Pero nada Lisa! Ya te dije, no voy a repetirlo. Vamos.-dijo tomando mi mano y arrastrándome a una habitación.

-Jennie, en serio.. esto es demasiado..-dije

-Cállate. Y entra al baño. Te puedes enfermar- dijo mirándome desafiante.

-Jennie. En serio gracias. Pero no puedo quedarme.-dije y eso hizo explotar a Jennie.

-No quieres entrar por las buenas, está bien. Veamos por las malas Lisa.-dijo empujándome hacia el baño.

-¡Jennie!- grité cuando esta me tenía acorralada en la ducha.

-Dúchate. Y te espero abajo, te dejaré ropa en mi cama.- dijo mirándome fijamente y yo asentí sonrojada por la cercanía.

Esta chica es imparable.



Burning / JenlisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora