storge • n.h [book i]

iv

Estamos recostados en su cama viendo Two and a Half Men pero en realidad ninguno le está prestando atención. Niall se está enviando mensajes con alguien por WhatsApp y yo estoy vagando por el inicio de Twitter. Lanzo el celular a un costado y tomo el control remoto. Hago zapping pero no hay nada bueno para ver. Es frustrante cuando pasa esto. Miro a Niall pero está muy ocupado con su celular. Quiero que me hable. Gruño y busco mi morral con la mirada. Me bajo y me acerco hacia la puerta. Tomo el libro de ciencias y los útiles necesarios. No hay nada mejor que hacer así que lo único que queda es hacer mi tarea. No odio ciencias pero tampoco la amo. Apoyo mi espalda contra el borde de la cama y cruzo mis piernas como indio. Leo las preguntas y comienzo a leer el libro.

– ¿Qué haces? –la voz de Niall me saca de mis pensamientos.

–Tarea de ciencias –suspiro y aparto el libro dejándolo sobre el suelo.

–Ah la niña prodigio –dice Niall y suelto una risa.

Levanto mi vista y nuestras miradas se cruzan. Su cabeza cuelga por el borde de la cama y está observándome. Sus mejillas están sonrojadas, aunque eso no es nada nuevo. Su cabello está algo despeinado y no puedo evitar estirar mi mano para volver a peinarlo. Me sonríe y enseguida le devuelvo el gesto con otra sonrisa.  Cuando me doy cuenta de lo que estoy haciendo, me pongo rápidamente de pie.

–Me aburro –le digo. Estoy nerviosa y las palmas de mis manos están sudando. Me limpio el sudor de mis manos en mis pantalones y tomo asiento sobre la cama.

–Oh yo sé de algo que siempre te quita el aburrimiento –Niall me mira pícaro y no entiendo lo que quiere decir. Comienzo a reír cuando esta sobre mí haciéndome cosquillas.

–Ya basta –digo entre risas–. Por favor –ruego pero una risa se escapa de mis labios.

Tengo un dolor de panza horrible así que entre risas le ruego que me deje una vez más. –Ya, ya. Me duele la panza. –le digo y suelto una risa. Suspiro aliviada.

–Idiota –murmuro divertida y me mira levantando una de sus cejas.

– ¿Quieres más? –me pregunta desafiante pero tiene una sonrisa en su rostro.

– ¡No! –grito cuando está por acercarse.

Ríe y se tira de espaldas en la cama. Peino mi cabello en una coleta con una gomita que antes adornaba mi muñeca. Me tiro de espaldas, imitando la acción de Niall, y cierro mis ojos para luego soltar un suspiro.

– ¿Abby? –Niall me llama y giro mi cabeza.

– ¿Si? –le pregunto.

– Tengo que hacer esto antes de que me mate la ansiedad.