General's Fiery Farmwife

51: El plan de Li Tao

Tan pronto como terminaron de hablar, escucharon ruido en la puerta.

Qin Ya salió de inmediato y descubrió que era exactamente de quien estaban hablando hace un momento: Li Chenggu. Había estado fuera durante casi una semana y ahora finalmente regresó a casa.

En su espalda había un animal que Qin Ya nunca había visto antes. No había nada más que ese animal.

"¿Por qué tardaste tanto esta vez?"

Li Chenggu puso las cosas en la leñera en la esquina del patio. Qin Ya estaba preocupado y le preguntó. Mientras tanto, ella le trajo un poco de agua para que pudiera lavarse la cara.

Li Chenggu, que no había estado en casa durante mucho tiempo, se sintió conmovida por ella dado que estaba preocupada por él.

"Hace demasiado frío. Muchos animales están listos para esconderse durante el invierno. He estado agachado durante varios días, pero no hay nada que pueda cazar ..."

Li Chenggu tomó la palangana y se lavó la cara. Después de lavarse la tierra, su rostro se puso rubicundo.

"Si no encontraste ninguna presa, deberías haber vuelto a casa. No tendremos que preocuparnos por la comida y la ropa antes de la primavera".

Cuando terminó de lavarse la cara, Qin Ya le entregó la toalla para que se limpiara la cara. Cogió la palangana y salió a vaciar el agua.

Cuando regresó, encontró a Li Chenggu de pie en el patio y mirándola con un par de atractivos ojos rasgados.

"¿Qué pasa?"

Qin Ya pensó que tenía algo sobre ella.

"No, no te he visto en tanto tiempo. Te extraño."

Li Chenggu explicó.

Qin Ya quedó atónito en el acto. Esas palabras no parecían ser como las que le diría Li Chenggu.

Siempre había sido frío y no hablaba mucho. La mayor parte del tiempo, era Qin Ya quien hablaba mientras escuchaba. No hablaba a menos que fuera necesario, nunca mencionaba decir algo dulce.

Qin Ya inconscientemente se acercó y tocó su frente. Ella murmuró para sí misma: "¿Cogiste un resfriado o tuviste fiebre porque has estado fuera durante mucho tiempo?"

"Puff ..." Li Chenggu se echó a reír.

Suavemente le quitó la mano y dijo con una sonrisa: "¿Qué estás pensando de mí? No soy Xin'er".

"..."

Qin Ya también sonrió incómodamente. Aunque estaba acostumbrada a vivir con Li Chenggu en estos días, no había mucho comportamiento íntimo entre ellos. Además, siempre estaban sucediendo cosas en estos días. La comunicación entre ellos fue regular y normal.

Ella todavía no se adaptó a tal intimidad.

También podría ser que ella había estado cuidando a Xin'er durante mucho tiempo, lo que la hizo olvidar que, después de todo, era ama de casa y necesitaba el cuidado y el amor de un hombre.