Si disfrutas del Jikook tanto como yo, seguro lo harás.
Pueden hacerme pedidos o sugerencias para capítulos próximos
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Jimin volvía a removerse entre sus frazadas, todo gracias al extraño malestar no le permitía conciliar el sueño, abrió sus ojos para observar al chico a su lado, su esposo, quién dormía profundamente, y no era de menos, Jungkook llegaba algo tarde del trabajo esa noche.
Con cuidado aparta la mano del mayor que sostenía su cadera y sale de la cama en busca de un poco de agua.
Se vió interrumpido gracias a unas incontrolables ganas de vomitar que le hicieron correr hacia el cuarto de baño, se desploma al nivel del retrete y se aferra con fuerza al borde, regresando lo poco que había logrado comer esa tarde.
Jungkook había tenido que preparar la cena esa noche, ya que al llegar a casa se encontró con que el rubio seguía sintiéndose sumamente mal, los mareos se iban, pero volvían al poco rato de haberlo hecho, el pelinegro se encontraba muy preocupado.
— Si continuas así iremos inmediatamente al hospital — Le advirtió una vez antes de darle un beso de buenas noches, Jimin seguía insistiendo en que no era nada de que preocuparse, insistía en que solo era algo que había comido en la barbacoa que preparo SeokJin unos días atrás.
Pero el rubio continúo así hasta después de dos semanas; vomitando todo lo poco que no le hacía disgusto con solo olerlo.
Un día se encontraba en casa de NamJoo y SeokJin, y case cae al sentir un leve mareo, lo preocupante era que justo en ese momento sostenía al primogénito de los Kim entre sus brazos.
Luego de que SeokJin le retirará a su hijo de los brazos y le extendiera un vaso con agua, no pudo seguir mordisqueando su labio inferior, tratando de reprimir lo que pensaba, finalmente dijo: — Creo que estás embarazado
Jimin sintió un leve cosquilleo en su interior, no había pensando en la posibilidad y menos en la idea de tener un bebé, Jungkook y él estaban tan ocupados siendo felices entre ellos, que ese tema lo habían tratado poco, a pesar de tener cuatro años de casados.
Ese mismo día al volver a casa corrió hacia su cuarto de baño, nuevamente vomitó lo poco que SeokJin había logrado que comiera, medito un poco mientras echaba una ojeada a su aspecto físico, sus ojos contaban con unas bolsas debajo de ellos y se miraba levemente pálido.
