Tate no goblin

El primer encuentro...

" has venido tres días seguidos a venderme éstos restos de monstruos pero tu vendes medicinas ¿ Cómo los consigues ? " - pregunto un hombre algo obeso a la persona frente suyo, quien en los últimos días le compro los materiales para crear sus mercancías.

" El hijo de un familiar se convirtió en un caballero novato y como entrenamiento tiene que matar a vários de éstos y luego me preguntó si conocía a alguien que los comprará. " - le explicó desinteresado y tomando la pequeña bolsa con dinero.

" Pues dile que le deseó suerte " - le dijo el regordete hombre colocando dos monedas de plata más - " a propósito, tengo que decirte que está será mi última comprá, ya que ahora mismo estoy lleno de material así que no necesitó más "

Asintiendo ante el informe el proveedor se retiró sin decir nada más que gracias.

Caminando por las calles el anciano comenzó a pensar sobre todo lo que había sucedido estos tres días.

La primera venta de ítems recibo unas decentes 17 monedas de plata, recuerdo que ese día incluso le recomendé la posada que solía frecuentar cuando me escondía de mi esposa, no era un mal lugar, te daban una habitación con una cama, un pequeño mueble y el desayuno incluído por solo una plata.

Al día siguiente el escudo regreso por la tarde con más restos de monstruos y con un olor a orina por alguna razón que no pienso preguntar, preguntándole a la pequeña niña de nombre rapthalia supe que en efecto se habían hospedado en ese lugar pero que había tenido una pesadilla a mitad de la noche y tuvo que dormir con compañía desperdiciando una moneda en una habitación.

Además de la pequeña anécdota de que el cocinero del lugar había tomado a su amo como alumno e intento enseñarle el arte de como cocinar, terminando con el siendo golpeado irónicamente con un cucharon de madera múltiples veces por hacer tan mala cómida.

Cómo sea, ese día logré vender los ítems en unas 30 monedas debido a que está vez me habían traído más, según dijieron era por su subida de nivel y que ahora eran un poco más fáciles de matar y además de 14 más por las dos ñ pieles de los globos conejos que eran utilizadas para ropas de invierno.

Tal vez de lo más destacable que le contaron ayer fue que el tipo descubrió un tipo de escudo de hoja o algo así que le permitía hacer medicinas y que compro varias de mis plantas medicinales para comenzar a practicar.

Al principio no pensaba ayudarle ya que no era algo que me importaba mucho ya que el tarde o temprano descubriría como hacerlas, pero basto con solo verlo intentarlo dos veces para generarme tan tremenda rabia por la aberración de medicina que estaba haciendo, que no logré soportar seguir viendo la pobre mezcla en el mortero.

Estuve un buen rato enseñándole varias cosas, y cada vez que se equivocaba yo lo golpeaba con un cucharón de madera, pero se equivocaba constantemente solo con lo básico, desde usar las hojas correctas y que procedimientos usar para hacerlas más eficientes he incluso memorizar el orden en que se tenían que hacer las cosas.

Claro podía entender que fallara constantemente ya que acababa de entrar en este mundo de crear medicinas, de hecho, yo también fui así en su momento cuando inicie con la instrucción de mis padres.

Tardamos varias horas para conseguir que ese héroe de pacotilla logrará hacer correctamente al menos una misera medicina menor... Pero al menos ya había hecho una.

Una medicina menor que la regalo a su esclava que se veía enferma, aunque estos esfuerzos fueron en vano ya que terminó derramando su contenido por la amargura de esta, que recuerdos, recuerdo cuando hizo lo mismo mi madre pero después me explico que cuanta mayor sea la calidad de la medicina, el sabor amargo desaparecería he incluso tomaría sabores dulces.