2 - Tu voz

701 66 4
                                        

Nuestros amigos se reunieron en un karaoke, así que finalmente nos dirigimos la palabra.

Me dijiste tu nombre y mi corazón tembló.

"Soy Chittaphon, pero puedes llamarme Ten".

Me gustaría oírte decir mi nombre con tu preciosa voz.

O, ahora que te escucho cantar, preferirías que dieras un concierto, solo para mí.

~

—Vamos, debes venir...

—Debo terminar unos trabajos para la universidad.

—Estuviste toda la semana trabajando, mereces un descanso de unas horas.

Yuta seguía insistiendo, pero no me sentía con mucho ánimo para estar con gente.

—¿Irán muchas personas?

—Nos reuniremos con los chicos que conocimos en el cumpleaños de Taeyong.

Asentí, entendiendo al instante la situación. Mi corazón comenzó a latir con fuerza, pero no debería verme tan emocionado.

—De acuerdo, me convenciste.

—Genial, pasaré por ti a la tarde.

Mi amigo se alejó sonriendo y me dirigí a mi siguiente clase.



Llegamos al karaoke antes de que lograra poner mis pensamientos en orden y relajar mis nervios.

—Al parecer, ya pidieron una habitación. Ven.

Yuta me arrastró con él, sin notar que estaba por desmayarme.

Al entrar, había menos personas de las que debería. Aunque éramos la mayoría, quedaban varios asientos libres.

—¿Y el resto? —Yuta preguntó en voz alta mis pensamientos.

—En primer lugar: ¡Hola!, ¿cómo están? —dijo Taeyong, fingiendo una sonrisa— Y ahora sí, te contesto. Están llegando, pero la persona que te interesa ya está aquí.

Taeyong señaló al otro lado de la habitación y un escalofrío recorrió mi espalda.

Ahí te encontré, con esos hermosos ojos que se habían aparecido en mis sueños la última semana. ¿Acaso Taeyong sabía algo?

No, se había dirigido a Yuta cuando habló. ¿Él también tenía los ojos en ti?

Con una enorme sonrisa, Yuta tomó mi muñeca y me arrastró hacia donde estabas.

Mis piernas temblaban cada vez más al acercarme a ti. Pero noté que hablabas amigablemente con otro chico.

Y al parecer, él era el interés de Yuta. Mi amigo me abandonó y se sentó junto a tu amigo, acaparando toda su atención.

Tu mirada se dirigió al frente, y me observaste. Golpeaste el asiento a tu lado, invitándome a sentarme ahí. Obedecí como si no tuviera otra opción. Aunque si la tuviera, seguiría aceptando sentarme a tu lado.

—La otra noche no tuvimos ocasión de presentarnos. Soy Chittaphon, pero puedes llamarme Ten. —Me extendiste tu mano que, sin dudarlo, tomé.

—Johnny.

—Un placer conocerte.

Sonreí, con mi corazón golpeando mi pecho. Me gustaría oírte decir mi nombre con tu preciosa voz.

Sicheng, que según me informó Yuta era el nombre de tu amigo, te invitó al frente de la habitación para cantar algo juntos.

Él no cantaba para nada mal, pero solo podía concentrarme en ti. Será exagerado, pero no creí que escucharía en mi vida una voz tan preciosa como la tuya.

Sería un sueño que cantaras solo para mí. Escucharte tararear mientras te duchas o te concentras en dibujar, algo que me dijiste que amabas hacer.

Y descubriendo lo talentoso que eres, estoy seguro de que tus dibujos serían igual de increíbles.

Mi Tentación (#1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora