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Genial, las cosas empeoraban para Taeyong con aquel tailandés alto y de complexión atlética que tenía de la mano a Ten mientras el más bajo sonreía encantado. Bufó al ver la excelente situación. Optó por dar su lado odioso.

Genial, Johnny ¿Por qué contrataste a este tipo? —Johnny sonrió y enarcó una ceja a su amigo. Negó lentamente a su molestia. Bambam miró al chico y le restó importancia. Parecía molesto, pero eso poco le importó, simplemente pasó de él y siguió mirando a Ten.

Creí que estabas en Tailandia. —dijo un Ten ignorante a la situación y a la mirada de odio de Taeyong a Bambam. El más alto se concentró en el chico.

Sí, lo estaba hace un mes atrás, volví a Seúl.

Taeyong lanzó una maldición antes de salir a grandes zancadas de la oficina de su amigo, más cabreado que nunca con John por no hacerle caso para despedir al tailandés alto. Azotó con fuerza la puerta, dando a demostrar su furia contra todos en esos momentos.

Ten vio a Taeyong salir de la oficina a paso airado. Miró por unos segundos la puerta por donde el chico había salido con prisa, con un ligero rayo de tristeza empañando sus ojos durante unos instantes. Luego simplemente lo volvió a ignorar y centrar en Bambam.

Amaba que el más alto hubiese regresado porque le encantaba la compañía de éste. Pero había algo que ya no estaba igual a cuando Bambam se fue. Ten lo sabía y quizás Bambam también lo sentía de ese modo.

Ten sonrió y dejó de lado su creciente confusión. La cual empezaba a darle dolor de cabeza.

Bambam; ya conoces a Doyoung. —señaló a su amigo, éste sonrió y abrazó al alto por unos segundos.— Él es Jungwoo, otro más de mis mejores amigos. Jungwoo, él es Bambam, mi ex. —el menor estrechó la mano del más alto y luego dio un pequeño abrazo rápido.

Doyoung salió de la oficina al ver pasar a Jaehyun. Despidiéndose de Bambam, aunque ya que no era necesario, lo vería todos los días desde ahora en adelante. Luego se fue siguiendo a su ocupado novio.

Bambam rió en voz alta, y abrazó a Ten por la cintura y a Jungwoo por encima de sus hombros. Aunque Bambam apenas conocía al chico, éste se veía triste y cansado. Aquello no pegaba con su rostro angelical.

Vamos chicos; salgamos y distraigamos nuestros cansados traseros.

Aquello hizo reír a Jungwoo por primera vez desde que piso el bar, Ten lo miró y Jungwoo asintió en respuesta. Quizás salir si le ayudaría mucho. Bambam tenía sentido del humor, le agradecía por eso. Rieron y se encaminaron fuera de la oficina.

Una parte de él esperaba poder salir del bar sin la penosa necesidad de toparse frente a frente con Taeyong o Yukhei. Sentía que si veía al moreno, no se contendría y correría a sus brazos. Jungwoo no estaba seguro si quería que eso sucediera o no, pero por ahora quería un poco de distancia.

Al pasar por el salón principal, se encontraron con Taeyong sentado en una silla alta del bar, con un vaso de vodka en su mano. Jaehyun estaba con Doyoung, hablando seriamente con Taeyong, sus amigos se veían estresados y tensos.

Ten desvió la mirada de Doyoung y Jaehyun, a Taeyong. Arrastró sus ojos por todo el cuerpo del mayor; estaba un poco más delgado que antes y su piel se veía un poco más pálida, Taeyong se veía diferente a como lo había conocido.

Jungwoo detuvo sus pasos, Bambam y Ten lo imitaron. Yukhei caminaba perdido en su teléfono, ignorando todo a su alrededor. Mirando la pantalla y el suelo, extendió una bolsa blanca aún sin despegar la mirada del teléfono.

lips to divide up│𝘁𝗮𝗲𝘁𝗲𝗻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora