〖10cm ✧ Hoshiumi Kōrai〗

ᶜᵃᵖⁱᵗᵘˡᵒ¹⁶

𝑯𝒆 𝒆𝒔𝒕𝒂𝒅𝒐 𝒆𝒔𝒑𝒆𝒓𝒂𝒏𝒅𝒐 𝒄𝒓𝒖𝒛𝒂𝒓 𝒆𝒔𝒕𝒐𝒔 10𝒄𝒎 𝒒𝒖𝒆 𝒏𝒐𝒔 𝒔𝒆𝒑𝒂𝒓𝒂𝒏

𝑷𝒂𝒓𝒂 𝒑𝒐𝒅𝒆𝒓 𝒓𝒆𝒊𝒓 𝒋𝒖𝒏𝒕𝒐 𝒂 𝒕𝒊 𝒆𝒏 𝒆𝒍 𝒇𝒖𝒕𝒖𝒓𝒐

T/n lo sabía, debía ser sincera, sabía que era su oportunidad, aquella oportunidad que tanto esperó.

La oportunidad de redimirse y arreglar sus errores pasados... Quería hacerlo, ella sabía perfectamente como ansiaba reír nuevamente junto a Hoshiumi.

Lo vio mirándola expectante y tomó aire profundamente, era el momento, maldición, debía dejar de ser una cobarde por una vez en su vida, ya no era momento de preocuparse, sólo debía soltar todo aquello que la atormentaba desde la graduación.

— La verdad es que yo... Yo me arrepiento de tantas cosas, Kōrai. — Admitió. — Desde la graduación me he estado arrepintiendo como no tienes idea, cada viernes lo pienso "¿Hice bien en irme?" "¿Por qué lo dejé así?" "Él debe odiarme... Fui tan cruel". — Empezó a soltar todo lo que le carcomía por dentro bajo la mirada atenta del albino. — Pero a pesar de eso, yo siempre he estado esperando, a pesar de que no teníamos contactos, a pesar de que te dejé de esa forma tan cruel en la graduación... — Cerró sus ojos con fuerza.

— No te culpes, yo ya superé eso, no me duele. — Aseguró sonriéndole intentando calmarla.

— Pero yo... ¡He estado esperando cruzar estos 10cm que nos separan! — Gritó abriendo sus ojos de golpe mostrando lo acuosos que se encontraban.

— T/n...

— Yo siempre... Siempre ¡Siempre he querido remediar eso para poder reír junto a ti en el futuro, Kōrai! — Admitió temblorosa. — Puedo entender que no me aceptes... Esperé demasiado y hasta el día de hoy te evité, pero... Ese es mi mayor deseo y es egoísta querer volver a tu vida después de todo, pero aún así yo en verdad quiero acortar esta distancia.

Ella bajó la mirada con temor y el deportista mantuvo silencio, eso la estaba matando, los pensamientos negativos inundaron su mente, capaz pensaba que era patética, capaz ahora ella sería a la que dejarían con el corazón en mano, él solo se iría en silencio y ella se quedaría allí; destrozada.

Pero no podía culparle si hacía eso, ella ya lo había hecho una vez y estaba más que segura que merecía cualquier rechazo por parte del contrario.

— Creo... Que es tarde ¿No? — Soltó una risa vacía. — P-Perdón por eso, Kōrai.

Antes de poder dar un paso más unos fuertes brazos la rodearon mientras escuchaba unas carcajadas llenas de felicidad, sorprendida miró al albino que la miraba con las mejillas enrojecidas y sus orbes brillando con intensidad.

Estaba por abrir la boca cuando él extendió su mano y le pegó con su dedo índice en la frente levemente, confundida le miró y notó esta vez su ceño fruncido junto con una mirada regañante.

— ¿Acaso eres idiota? ¿No oíste cuando hace nada te grité que te amo? ¡No es tarde, al contrario, es el mejor momento! — Aseguró y ella le miró con los ojos llorosos.

Hoshiumi sin duda debía ser un ángel, algo que tal vez ella no merecía, pero... Le quería.

— Kōrai... — Le devolvió el abrazo escondiendo su rostro en el hombro del contrario.

Después de tantos años podía sentir su calor corporal, su calidez... Después de tanto se volvía a sentir protegida y querida, al sentir como el chico acariciaba su cabellera con suavidad se mordió el labio, sabía que en cualquier momento rompería en llanto de la felicidad.

— No te preocupes, haré realidad tu deseo... ¡Reiremos de aquí en adelante y prometo que llenaré tus días de felicidad! — Aseguró decidido. — Porque ya no quiero seguir evitando esto, después de tanto solo quiero estar a tu lado y que nos pertenezcamos mutuamente ¿Estás bien con eso, T/n?

Su voz sonaba tan cálida que el corazón de la mujer se estremecía, apretó más el agarre mientras su cuerpo temblaba y las lágrimas recorrían sus mejillas, el sonrojo en su rostro era evidente, pero ¿Qué más podía hacer? Era tan feliz en esos instantes.

Solo podía pensar ¿Cuánto había esperado por oír aquello? ¿Cuántas veces se había imaginado esa escena? Seguramente centenares de veces, pero era real... Él era real.

— Sí... Por favor, hazlo. — Respondió con la voz rota.

Hoshiumi la alejó levemente y agarró sus mejillas viendo el desastre que era la fémina, inevitablemente sonrió negando mientras secaba sus lágrimas.

— Te convertiste en una llorona, T/n. — Al oír como él se burlaba ella frunció el ceño y le miró ofendida.

— ¿Q-Qué esperabas? Estoy muy feliz, Kōrai.

En vez de responderle burlonamente vio como este sonreía ampliamente mientras cerraba sus ojos y juntaba sus frentes.

— ¿En serio? ¡Estoy seguro que yo estoy mucho más feliz que tú!

La risa algo infantil del albino se extendió por la calle mientras que T/n le miraba con calidez, de verdad... Amaba a Hoshiumi Kōrai.