“Querida yo:”
Y así yace el borrador de octubre de 2019 que no ha sido ni siquiera editado hasta hoy, que es 2022.
Tres años me ha tomado hablarme a mí misma. Tres años para decirle que la estoy cuidando con todo el amor, pero que duele muchísimo quererse.
Tres años me ha tomado, pero pronto te escribiré, pequeña. Ya verás.
(julio 9, 2022)