El día en que aquel rey había caído muchas personas pudieron respirar de forma tranquila, él había cometido pecados los cuales para nadie fueron bonitos.
—Se le condena a diez años de prisión por homicidio, contrabando, trata y el comercio de productos ilícitos. ¡Se levanta la sección!
Aquella condena no había sido justa, él merecía mucho más pero todo el mundo sabía que todos se vendían, Myke era un hombre temperamental que había encontrado a una chica que le había tomado más lástima que aprecio pero eso se convirtió en algo más.
Elizabeth terminó su carrera y se volvió alguien grande mientras que el hombre que llegó a amar estaba tras unas rejas, esperaba a un hombre el cual sólo conocía armas, droga y poder. Myke se enamoró de cada detalle de Elizabeth al pasar los años en aquella prisión.
Ella celebraba su cumpleaños.
Ella iba cada semana.
Ella le sonreía.
Ella se preocupaba por él.
Ella se guardaba sólo para él.
Ambos se amaban.La buena conducta de él lo ayudó, a ella le sorprendió aquello, ¿Myke buena conducta? ¿luego de todo eso?
Aquel día era justamente el de él salir y ella estaba más que emocionada, él no se había rendido en prisión, su guardia había bajado y sólo por una mujer. Aquella mujer a la que siempre llamó suya y débil, Elizabeth McGraham se convirtió en todo para él, no vivía por nada más que ella.
El cuerpo de ella estaba de pie frente a la prisión y al sus oídos escuchar el sonar de la puerta la emoción fue notoria, quiso gritar de felicidad. Llevaba un traje pues junto a unos tacones, pelo suelto y sus lentes.
Hasta que lo vió, hasta que él la vió, el cuerpo de ella se movió por si solo y llegó hasta el de él. Lo abrazó fuerte, como si fuese la última vez.
—No te merezco Lizzie —Habló en su odio, ella lo lo merecía pero ella quería ser para él.
Sus ojos chocaron y una sonrisa se dibujó por sus labios.
—Te hé esperado por mucho tiempo, ¿nos vamos? —Él asintió sin nada que decir sólo admirando a la mujer que se había preocupado por él aún estando tratando mal a su persona. Sólo dos o tres besos, sin sexo. Así la ganó así ella lo ganó.
Sus manos se entrelazaron, ambos iban a un nuevo destino, juntos. Sin pasado, a un nuevo país, se iban lejos para amarse, ¿que podría salir mal?
•⚡️•
Gracias por haber llegado hasta aquí, esta historia desde el principio tuvo un propósito.
Las personas que dañan a otras es porque están vacíos, el amor viene cuando lo desea y el sexo no lo es todo. Los crímenes se pagan y no todo es arte rosa, hay muchas personas que son artes oscuros.
ESTÁS LEYENDO
No me sueltes.©
Teen FictionUna persona vacía que sólo busca poder y que lo obtuvo a un alto precio. Una persona que está alejada de su familia buscando ser alguien porque donde estaba nunca lo iba a lograr ser. Una mala actitud, un carácter horrible. Una actitud sumisa que se...