Parte dos.

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Me desperté una hora antes, seguía pensando en lo que pasó por la noche, pensé en Annie y le hablé por WhatsApp. Espero que no le haya pasado nada.

''Annie, tengo que contarte algo, contéstame por favor.''

Me quedé mirando el móvil hasta que espabilé, como me había despertado antes tomé una tostada con mermelada y zumo. Subí a mi habitación y me quedé escuchando música acostada en mi cama, antes de darme cuenta me había quedado dormida.

-Umh...vaya...me he quedado dormida- Me decía a mi misma estirandome- ¿Mamá?

No hubo respuesta, miré la hora y eran las 8:15. 

-¡MIERDA, NO ME DARÁ TIEMPO A LLEGAR!- Me levanté de un salto, rápidamente me puse una camisa de la bandera Inglesa y unos jeans negros, me peiné rápidamente y bajé las escaleras cogiendo mi mochila.- ¡CORRE NINA, JODER!

Salí corriendo hacia mi bicicleta cuando me tropezé con alguien. 

-¿Estás bien?- Escuché una voz masculina- Un momento...eres la chica de anoche

-Uhm...sí estoy bien...-Me quedé en pausa, ahora el chico tenía el pelo verde- Ah...gracias por salvarme...

-No es nada, no iba a dejar que te hicieran nada- Dijo con una sonrisa

-Oh...mierda...- Dije mirando la hora y darme cuenta que iban a cerrar pronto las puertas.

-¿Te pasa algo?

-No voy a llegar a tiempo a mi instituto...

-¿Te acerco?- Dijo riendo

No me fiaba mucho del chico ¿y si era una trampa y estaba compinchado con los hombres de ayer? No paraba de pensar mirando al suelo.

-¿Hola?- Dijo pasando su mano por mi cara. No me quedaba otra opción.

-E...Está bien...

Me hizo señales para que le siguiera hasta tu auto, abrió la puerta del copiloto y me senté, él pasó por delante y se sentó, arrancó el coche y me dijo a que instituto iba ''Al Aichhorn School''  le respondí mirando hacia mis pies. Miré al chico, era muy mono, sus ojos eran verdes y su pelo era algo emo y decolorado, tenía tatuajes y un piercing en la ceja.

-¿No me vas a preguntar primero como me llamo o seguirás mirando?- Dijo entre risas- Soy Michael. ¿Y tú?

-N...Nina...- Dije con las mejillas sonrojadas.- Aquí está mi instituto, por suerte no han cerrado.- Añadí una sonrisa.

-Ey, Nina. ¿Te las apañarás para irte?

-Claro, no hay problemas, gracias otra vez. Adiós.- Me despedí de Michael volviéndome, de verdad era muy mono.

Alguien me agarró del brazo. Luke. 

-¿Quién era?- Dijo Luke

-Es mono...- Admiraba Annie

-Calla.

-E..Es un chico que me salvó de los secuestradores que dijo Bill, Michael.

-¿Y te fías de él nada más conocerle?- Dijo confuso.

-Luke, luego hablamos, vayamos a clase.

Le conté a Annie lo que pasó mientras estábamos en clase de matemáticas. Me llamaron unas cuantas veces la atención, estaba pensando en Michael, no me lo sacaba de la cabeza. Al fin llegó la hora de descanso, fuimos donde nos poníamos siempre.

-Así que tienes nuevo novio ¿eh?- Se burlaba Bill pasando un brazo por mi hombro.

-¿Qué? ¡Claro que no!- Dije sonrojándome

-Déjate de bromas, Bill- Le decía Luke en un tono serio y lanzándole una mirada asesina.

-Eh, tranquilo, no me mates.

-Chicos parad, no empecéis.- Le regañaba Annie

-Pero si yo amo a Luke.- Bromeaba Bill acercándose hacia Luke haciendo gestos con la lengua, haciendo que nos riéramos.

Terminó la hora y volvimos a nuestras clases, otro aburrimiento, seguía pensando en Michael¿Por qué no me lo puedo sacar de la cabeza? Si no sé nada de él. También me preocupaba Luke, estaba muy inquieto. Al fin terminaron las clases

-¡Nina!- Gritaba Luke- ¿Vamos juntos a tu casa?

-Claro, no me he traído la bicicleta así que mejor que ir sola- Dije riéndo 

Estuvimos hablando y riéndo todo el camino. Al llegar a mi casa mis padres le preguntaron a Luke si quería quedarse a comer, el aceptó y como siempre le decían ''Estás más guapo sin el piercing'' me puse la mano en la cabeza, que vergüenza, pero Luke reía, mis padres odiaban los piercings y los tatuajes decían que eran mala influencia. Antes de que dijera nada le envíe un mensaje de texto diciendo.

''No digas nada sobre lo de Michael.''

-Tranquila, no lo diré.

Subimos a mi habitación a terminar los trabajos que teníamos que hacer. Pasaban las horas y bajamos a sentarnos en el césped. Hablamos y gastábamos bromas hasta que escuchamos una voz.

-¡Nina!- Era Michael. -Ups...vaya, el chico de esta mañana, soy Michael.

-Yo Luke.

-Nina, ¿te gustaría dar una vuelta para conocernos mejor y eso?- Dijo con una sonrisa

-Pero están mis padres y estoy con...-Luke me interrumpió.

-Si quieres diles que voy a dar una vuelta contigo y te traeré más tarde.- Dijo serio mirando a Michael.

-Mejor así.- Reía Michael

Advertí a mis padres y salí fuera con Michael, que supuestamente era Luke, el cuál ya no estaba. Michael encendió su auto y me monté a su lado. Y otra vez, no paraba de mirarle y este reía.

-Oye, ese chico, Luke, es un plasta.

-¿Qué dices? Es mi mejor amigo

-En tu instituto esperando en la entrada como un tonto y ahora contigo, ¿no te deja en paz o qué?

-Callate.- Michael rió de ese comentario

-Si quieres que me calle, deja de mirarme, así no puedo concentrarme- Añadió con una sonrisa

Me llevó a un bar, con unos tíos muy extraños, me dijo que no mordían algo que me causaba risa. Estuvimos hablando y me enteré que su apellido era Clifford, Gordon Clifford, era tres años mayor que yo, nunca había hablado con alguien (que no eran mis padres ni profesores) mayor de edad y muchos menos estar hablando tan normal con él. No consistió a decirme algo más. Fui al baño dejando mi bolso donde estaba Michael.

-Este sitio huele mal...-Me quejaba. Salí del baño y había un hombre que antes no había. Daba asco.

-Hola guapa.- Le ignoré e intenté abrir la puerta.- ¿Quieres jugar un poco?- Me dijo acercándose a mi, cuando yo me alejaba.

-No, déjame.

-Vamos no seas tonta...-Casi me tocaba cuando alguien entró. Michael.

-Te ha dicho que la dejes.

-No seas aguafiestas, ¿Quieres?.

Michael le advertió por segunda vez, antes de darle un puñetazo y me indicó que saliera. Al rato llegó Michael, diciendo que ya estaba todo bien. Es la segunda vez que me salva y yo ¿Que respondí? Un simple ''Gracias''  Nos fuimos del bar y me llevó a mi casa. Me despedí de él. Me di un baño y me puse el pijama, mis padres estaban acostados, intenté no hacer ruido e irme a mi habitación, cogí mi móvil y vi un mensaje de alguien desconocido.

''Buenas noches, pelirroja''

Era Michael. Yo solo reí.

Él es mi héroe. [Michael Clifford]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora