Llegamos a Australia a las 8 de la mañana del día siguiente. El asiento era muy incómodo por lo que dormir ahí no fue para nada lindo. Pero estaba con Michael y eso lo hacía perfecto.
-Señores pasajeros. -Se escuchó una voz de los parlantes- Hemos llegado a Sydney, Australia. Temperatura actual: 22 grados y una lluvia débil.
-¿Qué? -Mikey susurró
-Si, así es Australia. El tiempo bipolar. -Reí- Vamos.
Tomamos nuestros bolsos y bajamos del avión. Estuvimos unos 20 minutos buscando nuestras maletas hasta que por fin, estábamos listos. Llamé a mi madre y nos dijo que mi padre había ido a buscarnos. Okay, ahora a encontrar a mi papá.
-Estoy nervioso. -Mike confesó
-Aw. -Reí- No es tan malo. Son solo mis padres.
-Dije lo mismo con los míos. -sonrío él.
-Pero... -Me interrumpió
-Está bien, Luke. Ahora estamos lejos de ellos. Por dios, no lo puedo creer... Me escapé.
Su mano estrujaba la mía, estaba feliz y eso me hace a mí feliz.
A lo lejos pudimos observar un cartel que decía "LUKE HEMMINGS Y NOVIO" Mi padre lo sostenía.
-Ahí está. Vamos.
Caminamos hacia el. Al verlo, solté a Michael para abrazarlo.
-Hijo mío. Estás más delgado, ¿es eso posible?
-Hola papá. -Lo abracé con más fuerza para luego separarme- Este es Mikey.
-Hola. -Saludó Clifford, con una voz débil
-¡Que tal! -Mi padre, Andrew, lo atrajo hacia el para abrazarlo- Un gusto -dice abrazándolo.- Soy Andrew
Los 3 caminamos hacia el auto. Normalmente, yo me hubiera sentado en el asiento del copiloto, pero ahora me senté atrás junto con Mike.
-Oh veo que me has reemplazado. -Mi padre comenta al verme actuar. Reí
Como extrañaba mi ciudad natal. Los altos edificios aun seguían ahí, era algo parecido a NY pero algo tenía Australia que la hacía diferente y especial.
Michael miraba por la ventana, encantado con todo lo que veía. Mi casa era grande, de ladrillo. Estaba metida en un gran condominio de otras casas. No es por presumir, pero la nuestra era la más grande. Tenía una piscina, un gran patio en donde teníamos algunos animales, pero lo mejor era la sala de juegos.
-¿Esta es tu casa? -Mikey acariciaba mi mano y yo asentí
-¿Te gusta?
-¡Me encanta!
-¡Hogar, dulce hogar! -Mi padre se estaciona frente a la puerta- Vamos
Nos bajamos del vehiculo para caminar a la entrada. Luego de presentarle a mi familia, iría a hacerle un tour por el lugar.
-¡Lukey! -Mi madre exclama al verme parado en la puerta. Se abalanzó para abrazarme.- Dios mío, estás tan alto. -Se separa un segundo para estrujarme de nuevo- Y tan delgado
-Hola, mamá. Este es Mike, mi novio. -Ella soltó un chillido para abrazarlo a él también. Amaba como nos aceptaban
-Hola. -Ríe Mikey
-Mi nombre es Liz, un gusto. -Dice en sus brazos.- Entremos.
Mi madre nos explicó que podíamos elegir cualquier habitación que quisiéramos y que el desayuno estaría listo en 20 minutos. Tiempo suficiente para mostrarle el sitio a Mikey, pero antes de poder hacer algo, mi perro comenzó a ladrar.
-¡Molly! -exclamé abrazándola. Luego miré a Mike, que no decía nada- Es inofensiva, no te hará nada.
Ambos la acariciábamos hasta que recordé el tour.
-¡Vamos! -Tomé su mano para guiarlo al patio.
-¿Qué haremos?
-Te mostraré el lugar.
Caminamos por el pasto, conocimos a algunos patitos que andaban por ahí, luego fuimos a la piscina.
-Wow, tu casa es genial. -Ríe Mike
-Técnicamente, no es mía. -Reí con el.
Estábamos sentados en las sillas que hay al lado de la alberca cuando escuchamos el grito de mamá.
-Vamos, mi amor. -Me levanté y estiré mi mano para que la tomara, y lo hizo.
-Te quiero, Luke. -Dice sobre mis labios.
-Yo te amo, Mikey. -Besé tiernamente los suyos.
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Aaw, ya está por terminar la historia :s
-nadieimportante-
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Llámalo Destino. (Muke) ||SHORT STORY||
Fanfiction¿Quien pensaría que una equivocación iba a unirlos? ¿Quien pensaría que iban a la misma biblioteca todos los días? ¿Quien pensaría que sus mejores amigos se conocían? ¿Acaso estaba todo planeado? Yo lo Llamaría Destino. ¿Y tu?
