un tiempo

890 50 0
                                    

Jughead estaba inclinado hacia mi
desde su asiento de copiloto, colando
sus manos por entre las voluminosas
telas de mi ropa de invierno, acariciando delicadamente mi cuerpo.

Dejé escapar un suspiro, estremeciéndome al sentir sus manos
vagar por debajo de la blusa hasta
encontrar mis senos y darle un apretón cariñoso a mis pezones erectos debido al frío.

Llevé mi boca a sus labios suaves
y cálidos y lo besé con premura,
aferrándome a sus hombros. Mi cuerpo había comenzado a entrar en calor poco a poco y ahora había una ligera presión en mi entrepierna. Apreté los muslos y me incliné un poco, sólo para profundizar más el beso.

Después de un rato sus labios dejaron
mi boca para bajar a mi vientre, dónde hiocieron contacto directo con la línea de piel desnuda que dejaba entrever mi blusa de seda.

Gemí, y un vaho de aire caliente se
escapó por entre mis labios.

-No me la quites, hace frío... - dije
cuando vi sus intenciones de sacarme
la blusa - además estamamos muy
expuestos.

- Pero mami... - replicó, y se llevó
una mano a la entrepierna, donde su
erección marcada se apretaba contra
sus pantalones..

Mire a nuestro alrededor. El
estacionamiento estaba vacío y ya era
muy entrada la noche, así que decidi
tener piedad de nuestros cuerpos, que
ya estaban demasiado excitados como
para parar. Y porque, sinceramente, yo misma no quería parar.

Me incliné hacia él y volvía a atrapar
sus labios en un beso. Sus manos
fueron automáticamente a mi cintura
y la aferró con ansias, mientras que
yo exploraba bajo su camisa haciendo
contacto con su cuerpo cálido.

- Está bien bebé, hagámoslo rápido-
concedí..

Mientras me dedicaba a rendir cuenta
a su cuello, le desabroché el pantalón
y saqué su miembro erecto y caliente.
Lo escuché suspirar cuando mi mano
comenzó a moverse hacia arriba
y abajo, masturbándolo, hasta que
escuché sus gemidos suavecitos y
dulces salir de su boca.

Hice un poco hacia atrás su asiento y
mientras él ponía sus ojos ansiososo
de deseo sobre mi yo me trepé sobre
él, aún con la ropa puesta. La falda
que había llevado ese día a la oficina
hacía las cosas mucho más fáciles. Me
moví encima de él en un cadente ir
y venir, rozando su miembro erecto
con mi intimidad aún cubierta por la
fina tela de la ropa interior, hasta que
ya no había rastro de frío en nuestros
cuerpos y nos apremiaba más contacto.

Su mirada de cachorrito suplicaba por
más mientras se movía debajo de mi
necesitado.

Sus manos se aferraron mi cintura con fuerza mientras yo hacía a un lado mi ropa interior y comenzaba a descender sobre su miembro poco a poco. Mi cuerpo se estremeció al contacto y lo miré directamente.

Amaba verlo a los ojos mientras se
hundía en mi y contemplar el punto
exacto en el que su mirada se volvía
liquida y parecía arder mientras sus
labios rojizos temblaban. Por alguna
razón, en esta ocasión aquella mirada
era tan intensa y sobrecogedora que se senti que podía devorar mi alma.

-Cheryl ...-gimoteo.

Volví a subir y esta vez bajé con
rápidez, un par de lágrimas se
escaparon de mis ojos por el golpe de
placer. Gemi y apreté los párpados
mientras él se aferraba con más fuerza a mi.

- Mami...-lo escuché hablarme, entre
suspiros - abre los ojos mami, quiero
verte.

Cuando regresé la vista a él, volví a
encontrarme con esa mirada liquida y
ardiente, y me perdí en ella. Y así, sin
romper el contacto visual, comencé a
montarlo con ritmo ascendente.

𝑩𝒂𝒃𝒚 𝑩𝒐𝒚 //ChugheadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora