One-shots | SpainRP/Streamers

🌟 Momonkunn 🌟

Pedido: @kaylatribbiani
Character: Hazel (Pelo castaño oscuro y ojos avellana, demasiado delgada)
1026 palabras
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POV MOMON

Apagué el ordenador mientras me recostaba en la silla con una amplia y sincera sonrisa, estuve un rato mirando a la nada mientras trataba de asimilar todo lo que había pasado, tras eso me levanté y salí de la habitación.

Había sido un día lleno de emociones, acababa de llegar a los 400k seguidores en Twitch y no pude evitar emocionarme. Estuve agradeciendo durante largos minutos todo el apoyo que se me había brindado, lo agradecí repetidas y contadas veces ya que, en el fondo, sentía que no me merecía aquello.

- Es que... no lo comprendo... no soy una persona carismática... - dije estando al frente de mi stream.

Estaba recibiendo una oleada inmensa de mensajes reconfortantes, el chat se había inundado de corazones morados, y por si fuera poco, Reborn trató  de animarme hasta finalmente conseguirlo.

"No podía haber escogido un amigo mejor..."

Después de esa tarde llena de emociones, decidí salir a dar un paseo e intentar poner en orden mis sentimientos.
Todo iba bien, caminaba con la cabeza gacha pensando en mis cosas hasta que me cruzo con una chica extremadamente delgada y de tez blanca, se podría decir que casi pálida, durante unos segundos me quedo observándola medio embobado, era realmente guapa en realidad... Todo comenzó cuando alcanzo a ver cómo aquella chica se desplomaba en el suelo, delante de mi.

Sin pensarlo dos veces, saco mi móvil del bolsillo trasero y marco al 112, unos pocos minutos después llegó la ambulancia dispuesta a llevarse a la misteriosa chica al hospital.

- Caballero, ¿Es usted pariente de la señorita? Si no, no puede subir.

- Ehh... si si, soy su hermano. - mentí rápidamente para poder acompañarla.

Los médicos me dieron paso y me monté en la parte trasera de la ambulancia junto con ella, quien se encontraba tumbada en la camilla con numerosos tubos conectados a su cuerpo, era increíble la velocidad que llevaban todos.

En cuestión de minutos nos encontrábamos en el hospital, noté como la luz volvía a llegar a mis ojos en cuanto las grandes puertas del vehículo fueron abiertas por uno de los médicos, el cual, inmediatamente sacó la camilla para proceder a meterla en el hospital.
A un ritmo acelerado, bajé y seguí a los EMS.

- Caballero a partir de aquí no puede pasar. - avisó uno de los médicos.

Me quedé parado ante aquellas puertas grises y gruesas, algunas lágrimas amenazaban con salir de mis ojos, si ya estaba emocionado de por sí, esto me dejó por los suelos. Tuve que esperar en una silla de ese pasillo, deseando con toda mi alma que la chica se recuperara lo antes posible, mientras tanto, me volví a sumergir en mis pensamientos...

Después de una media hora, estos pensamientos fueron interrumpidos por un alarmante pitido proveniente de la sala en la que habían metido a la chica.

- ¡Inserten 100g de morfina!

- ¡Hace falta llevarla a quirófano!

- ¡Esperen, esperen...!

Escuché las voces de los médicos interviniendo en la situación, alguna que otra lágrima se desplazó por mi mejilla al pensar que, si hubiera sido un poco más rápido, la chica no tendría porqué estar a punto de morir. De repente, noté como la alarma cesó y escuché como unos pasos se acercaban hacia mi, me levanté rápidamente de mi asiento.