—Avalessa. —la regaña Kyster apartándola de mí.
Ella frunce el ceño y le da un golpe a su hermano en el hombro.
—No me llames por mi nombre completo si no lo sabes pronunciar, imbécil. —le da otro golpe, Kyster solo rueda los ojos.
—¿Por qué dijiste eso? —no puedo evitar preguntar.
Fue tan acertada.
Ella se encoge de hombros y mira hacia las personas que caminan por el centro comercial.
—Tus ojos demuestran desesperación por sentir algo, además de dolor. —ella fija su vista en una pareja— ¿Buscas desde hace mucho algo más por sentir? No lo sé —se fija en mis ojos—, pero pareciera ser que sí.
Estoy por volver a preguntarle algo, pero parece que ella despierta de un trance, su hermano lo nota y suspira.
—¿Estás bien? —le pregunta, ella asiente lentamente.
—Sí, solo me duele un poco la cabeza. —se lleva una mano a la frente y suspira con molestia— Debí quedarme en casa. ¿Por qué papá quería que viniera?
—¿Quizás porque tienes 15 años y no sales de casa además de ir a casa de France o Daniel o a estudiar? —ella bufa y se cruza de brazos.
—¿Debería hacer algo más? —le pregunta alzando una ceja.
—¡Por supuesto que...! —se detiene a sí mismo y se toma el puente de la nariz con los dedos, como si estuviera pidiendo paciencia— Alessa, por favor.
—Bien. —ella rueda los ojos y vuelve a fijar su vista en mí— ¿Qué iban a hacer?
Me encojo de hombros.
—Quizás caminar y luego comprar unas cosas para el regreso a clases. —ella parece murmurar algo.
—Alessa. —le regaña Kyster.
—Cállate. Tú...
—Los dos son los hermanos más disparejos que he visto hasta ahora. —los interrumpo antes de que sigan peleando.
Me pongo en medio de los dos y los abrazo por el cuello.
—Empecemos a caminar. Sin quejas.
—Pero...
—Cállate Kyster. —le digo logrando que sienta los hombros de Ava moverse por la risa.
—Al parecer no soy la única que te lo dice, hermano mayor.
—Cállate, babosa.
—Idiota.
—Miedosa.
—Fastidioso.
—Parásito.
—Mal...
—Basta, los dos. —los interrumpo antes de que sigan discutiendo.
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Lo que me llevaré (LQSMSLL #0.5)
Teen FictionSé que no debería, pero el dolor, la angustia y el sufrimiento ya son insoportables. A estas alturas, no me importa nada. Solo una cosa. Una cosa que me perseguirá y que quizás no me deje descansar en paz. Y es lo único de lo que me permitiría arr...
