El regreso de Myrddin Emrys

Capítulo 7: Owl Post y el gran error de Marge

10 de julio.

Harry Potter estaba bastante irritado. Sus parientes habían sido los habituales y desagradables cuando llegó a casa. Como de costumbre, el viaje a casa había sido tenso. Bueno, cuando se trataba de su tía y su tío. Su primo, por otro lado, simplemente rellenó su cara grande y gorda todo el tiempo. Harry podría jurar que podía escuchar a su primo engordar. Para empeorar las cosas, su tío gordo le había informado que la tía Marge lo visitaría después de su cumpleaños.

Cojones.

Al menos este año le habían permitido mantener su baúl en su habitación, así como permitir que Hedwig saliera por la noche.

Dobby lo había visitado el día después de su llegada al Número Cuatro. Tomó algo de trabajo, pero Dobby finalmente acordó dos Galeones y un día libre al mes.

"Cualquier más haría a Dobby una desgracia." había proclamado el pequeño elfo.

"No tengo nada que hacer aquí". dijo Harry al elfo hiperactivo. "Ninguno de los dos puede usar la magia sin que yo me meta en problemas."

"¡No se preocupe Maestro Harry Potter, señor!" dijo Dobby. "El director Dumbydore le pregunta a Dobby si Dobby necesita trabajo. Dobby le dice que voy a trabajar para el maestro Harry Potter, señor, y él dice que, dado que la magia no se puede usar en la casa del muggle malo, puedo trabajar en Hogwarts hasta su Maestro vuelve a la escuela para servirle personalmente ".

Así que se había decidido que Dobby atendería las necesidades del Castillo durante el verano. Harry solo deseaba que se le permitiera quedarse en el castillo, o incluso en Hogsmeade durante el verano, en lugar de este infierno en el que estaba viviendo ahora.

Dos días después de haber llegado a su celda en "Durzkaban", como lo llamaban los gemelos Fred y George, había recibido una carta de Daphne. Era una carta larga que hablaba de la vida cotidiana en Greengrass Manor. Escribió sobre todo y nada en absoluto. Harry sonrió todo el tiempo. Cuando le respondió, le preguntó si había alguna manera de llegar al Callejón Diagon sin tener que tomar el metro o usar la red flu.

Ella le habló de algo llamado "El autobús noctámbulo", el transporte para la bruja o el mago varados. Ella dijo que todo lo que tenía que hacer era pararse al costado de la calle, sostener su varita y aparecería.

Tres noches más tarde, después de que los animales del zoológico que llamó a sus parientes se durmieran, se escabulló lo más silenciosamente que pudo del Número Cuatro, bajo su capa de invisibilidad, y se dirigió lo más rápido posible hacia Magnolia Crescent.

"Bueno, aquí va nada." dijo mientras sacaba su varita y la levantaba en el aire. Se sintió bastante tonto por un momento hasta que un fuerte golpe lo sobresaltó y cayó hacia atrás. Justo en su trasero.

"Genial ..." murmuró como un gran autobús de tres pisos, en el púrpura más violento que jamás había visto. Las letras doradas sobre el parabrisas deletreaban "El autobús noctámbulo".

Cuando el autobús se detuvo justo en frente, Harry pudo ver al conductor, vestido con un uniforme púrpura, apoyado casualmente contra la barandilla de la entrada. Sin mirar hacia arriba, leyó en un papel:

"Bienvenido al autobús noctámbulo, transporte de emergencia para la bruja o el mago varados. Solo saca tu varita, sube a bordo y podemos llevarte a donde quieras ir. Mi nombre es Stan Shunpike, tu conductor es Ern, y Seré su conductor esta noche ".

Cuando terminó, dobló el guión que había estado leyendo y miró hacia arriba. Había estado momentáneamente confundido hasta que miró hacia abajo y vio a Harry en el suelo.