Narra Danielle
-Mamá?? MAMÁ!!!
-Danielle, escóndete ahora y dile a tu hermano que te proteja!!!
No me podía mover, estaba paralizada por la escena y más después de aquel estruendo que hizo derramar la sangre de mi mamá, estaba en pánico.
-MAMÁ!!!!
Me desperté de golpe sobresaltada, otra vez la misma pesadilla.
Me encogí y comencé a llorar tratando de que no se me escuchase.
En ese momento, escuché la puerta abrirse.
-Danielle, puedo pasar?? Hija, estás bien??- Dijo mi padre sentándose al borde de la cama.
Me incorporé como pude y abracé fuertemente a mi padre mientras lloraba desconsoladamente.
-Tranquila, ya ha pasado todo- Trataba de consolarme mi padre.
-Extraño mucho a mamá, fue horrible- Murmuré entre sollozos.
-Yo también la extraño, hija mía, la extraño muchísimo- Murmuró mi padre mientras una lágrima le recorría la mejilla.
-Ven, vamos a desayunar que es tarde y así se te pasa el mal rato- Dijo mi padre tratando de secarse la lágrima y de no seguir llorando.
Miré mi reloj, las 05:30 de la madrugada.
-Papá, son las 05:30 de la madrugada- Dije palmeándome la frente.
-Por eso, hay que prepararse ya para ir a Comisaría, hoy te vienes conmigo al trabajo- Respondió mi padre y, acto seguido, salió de mi habitación para que me cambiase.
Decidí optar por un look sencillo, una camisa blanca simple con unos vaqueros negros y unas Vans y mi cabello suelto.
Cuando hube terminado de prepararme, fui a desayunar rápidamente.
Cuando llegamos a Comisaría, me serví un café para mantenerme despierta.
-Buenos días, señorita- Saludó Volkov mientras me tomaba mi café.
-Buenas- Respondí sin prestarle mucha atención.
Cuando me terminé el café, subí al despacho de mi padre y me senté en uno de los sillones.
-Papá- Llamé mientras leía un libro.
-Dime- Respondió mi padre mientras ordenaba unos papeles.
-Yo podría hacer las pruebas para ser policía??- Pregunté cerrando mi libro y mirándole.
En ese momento, se atragantó con el café y, cuando consiguió recuperar el aire, me miró y me respondió:
-Cómo??!! Nonono, cómo que policía??
-Qué tiene??
-Pero...
-Papá, yo quiero ser policía, estoy preparada, no pienses que soy una chica indefensa solo porque aparento serlo, por dentro soy fría y muy fuerte y con objetivos claros, como un escorpión.
Mi padre me miró en silencio y, a continuación, encendió su radio y dijo:
-Volkov, prepara a los alumnos; Danielle va a pasar las pruebas para policía.
Acto seguido, apagó su radio y, tras girarse hacia mi, me dijo:
-Baja a recepción y habla con Volkov, yo bajo ahora, no me decepciones.
Asentí como respuesta y, a continuación, salí del despacho.
Mientras bajaba las escaleras, pensaba en mi objetivo.
Uno de mis objetivos era proteger la ciudad, eso es obvio; pero mi principal objetivo era vengar a mi madre, conseguir justicia por ella, matar a la persona que la mató.
-Buenas, señorita; en cuanto baje Conway podemos ir a hacer las pruebas con el resto de los alumnos.
-Está bien- Respondí sin prestarle mucha atención.
Un minuto después, mi padre bajó y los 3 nos dirigimos a los patrullas para ir hacia la playa, donde nos esperaban el resto de alumnos para comenzar el entrenamiento.
-Bien nenas, vais a correr hasta el final de la playa donde os estaremos esperando Volkov y yo, os quiero corriendo sin parar, entendido mariconettis??- Dijo mi padre.
-SÍ, SEÑOR!!- Exclamamos todos firmes y, cuando mi padre y Volkov se hubieron ido con el todoterreno, todos comenzamos a correr.
El recorrido fue arduo, pues correr en la playa no era tarea fácil.
Tras un buen rato corriendo, conseguí llegar al final.
-Qué tal la carrera??- Dijo mi padre mientras yo me apoyaba contra el todoterreno toda sudada tratando de recuperar el aliento.
-Cállate- Murmuré entre dientes.
Cuando terminaron de llegar los alumnos que faltaban, mi padre nos puso a hacer flexiones y abdominales y mil pruebas físicas más.
Tras horas de duro martirio, al fin había acabado el entrenamiento y nos podíamos retirar a descansar.
Tras recuperar el aire, me dirigí al patrulla y mi padre me dejó en casa para que descansara.
Tras darme una larga ducha, me vestí con una camiseta simple blanca, unos pantalones verdes oscuros y mis Vans y me amarré el cabello en una coleta y salí a dar un paseo para conocer la ciudad.
Justo cuando estaba cruzando la calle, un coche casi me atropella.
-APARTA!!- Gritó el conductor, cuya cara me sonaba de algo pero no caía de qué.
-Pero si casi me atropellas, pedazo de anormal!!! Aver si miras por donde vas!!!- Respondí yo totalmente enojada y, a continuación, seguí mi camino.
Iba tan distraída en mis pensamientos que, sin querer, me choqué con un chico que pasaba por ahí.
-Perdona, no fue mi intención- Me disculpé avergonzada.
-No, tranquila, no pasa nada- Respondió amablemente el chico- Me llamo Armando, y tú??
-Danielle, encantada- Contesté de manera amable
-Encantado, Danielle.
Bueno, me tengo que ir; nos vemos- Se despidió el chico.
-Nos vemos- Respondí a modo de despedida.
Tras dar un largo paseo, decidí volverme a casa y, tras almorzar, me puse el pijama y me tumbé en el sofá a ver películas.
Debí quedarme dormida pues, cuando me desperté, mi padre acababa de llegar del trabajo.
-Tú no salías de trabajar hasta la noche??- Pregunté extrañada y medio adormilada.
-Es que ya es de noche- Respondió mi padre confuso- Llevas durmiendo toda la tarde??
-Teniendo en cuenta que la televisión se apagó sola por el modo de ahorro, la verdad es que sí que llevo durmiendo toda la tarde jajaj- Respondí entre risas- Me voy a dormir a mi cuarto, buenas noches- Añadí levantándome del sofá y yéndome para mi cuarto.
-Descansa, que mañana entrenamos en el norte a las 11:00 am!!- Exclamó mi padre mientras yo cerraba la puerta de mi cuarto.
Madre mía, la que me espera mañana, vaya que si debo descansar.
