La Piedra de la Vida

Capitulo 1

Hoy, doce de diciembre de 2019, voy a empezar mi trabajo como nueva profesora de Historia, ya que el antiguo profesor tuvo que dejar el colegio por una amenaza y no había otro que lo sustituyera.

El director, Juan Ignacio Carrera me ha dicho que el primer día me acompañarán en una visita por todo el colegio para no perderme tan fácilmente y conocer los límites.

Al llegar me atiende un guardia.

- Pase por aquí por favor, ahora vendrá su guía y le explicarán todo lo relacionado con su nuevo trabajo.

Paso a la sala de espera pero me detengo al escuchar uno fuertes gritos. No pensé que serían tan agresivos, ¿qué habrá pasado?. Después de cinco largos minutos sale Don Juan Ignacio Carreras , el director, del lugar de donde provenían las voces, acompañado de un señor bastante alterado en comparación con el director.

- Buenos días señora García, siento la tardanza. Le voy a explicar los límites del colegio, pase por aquí, por favor.- dice el director mientras su acompañante se aleja por el pasillo.

Sigo al señor director y pasamos por el bosque, allí me explica que el acceso nocturno a este está completamente prohibido ya que en los últimos 30 años ha habido tres muertos y dos desaparecidos. Después pasamos al interior del castillo, donde también está prohibido pasar por los pasillos de noche, pues los niños afirman que cuando salen, tienen visiones.

-Bueno señora García espero que le haya gustado la visita. La llevaré a su nueva habitación.

-Gracias señor y puede llamarme Vanessa.

Al entrar en la habitación me parece bastante bonita y acorde con la decoración del castillo, pues sigue un estilo clásico muy parecido al resto del colegio ya que tiene un armario de madera cuidadosamente tallado y un espejo del estilo de Blancanieves al lado de una ventana con marco a juego, pero lo que sí me deja descolocada es el pequeño paquete que hay a los pies de la cama con dosel, algo extraño ya que todavía nadie me conoce.

Al abrirlo, la ventana cruje de golpe y entra una criatura extraña y de estatura pequeña acompañada de un olor fétido.Ni si quiera me da tiempo a ver el contenido.

-Un gusto verte Vanessa.- susurra una voz penetrante por toda la habitación.

-¿Quién eres?- pregunto atemorizada.

-Mi nombre es Hibbo, si eso es a lo que te refieres. ¿Te gustó mi regalo? Espero que seas capaz de comprender su significado.

-¿De qué me conoces?- cuestiono sin inmutarme por la pregunta anterior.

-De todo; no sólo yo te conozco, todos nosotros-dice misteriosamente.

-¿Cómo que todos, hay más como tú?-pregunto extrañada.

-La verdad es que me parece descortés que pases por alto la pregunta que te hice:¿te gustó mi regalo?- repite y es cuando recuerdo el pequeño paquete en mis rodillas a medio abrir. La especie de elfo pequeño me anima a sacar una carta escondida debajo de una llave con forma de hoja que hay dentro del paquete. Esta dice así:

Querida Vanessa :

Supongo que no sabrás quién soy, pero yo sí y cuando leas esto ya comprenderás a qué me refiero. Coge la llave y guárdala como si tu vida dependiera de ella.

Hibbo te ayudará.

Buena suerte.

Tras leer la carta Hibbo me muestra una mueca siniestra que pretendía ser una sonrisa  divertida:

-Vivo en el tercer torreón; ve allí cuando amanezca y te lo explicaré todo.

Entonces asiento aún confundida y Hibbo desaparece con un sonoro puff, dejándome sola en la habitación.