Día 2. Tarde de películas

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Observo a su pequeño pichón encogerse sobre su lugar, sonrió divertido. Sabia que su chico era miedoso y se asustaba muy fácil, pero de no ser porque el día después era su cumpleaños, que el rubio no hubiera aceptado su propuesta de ver películas de terror juntos.

Aprovecho el momento de rodear con su brazo por sobre los hombros de Zenitsu y atraerlo un poco más hacia él, el menor no dudo un segundo en aferrarse a su novio, sin embargo, a pesar del miedo no despegaba la vista del televisor.

A Tengen le estaba resultando un poco aburrida la película, pero había sido idea suya. Combinaba con la víspera de Halloween ya que nació el mismo día, al día siguiente estaba prevista una gran fiesta extravagante, pero deseaba pasar tiempo a solas con su novio, más bien quería que la película terminara y ellos continuaran con algo "diferente" en su habitación, o ahí mismo en la sala ¿Por qué no?

El lugar estaba a oscuras, solo se veía la luz que proyectaba el televisor junto a las escenas de suspenso de la película, pronto el ambiente de la película cambio dando aviso a la llegada de una escena mas aterradora. El grito y brinco que dio Zenitsu en su lugar eran la prueba de ello.

Tengen trataba de contener su risa, acaricio sus dorados cabellos para reconfortarlo un poco.

—Quédate aquí, tengo que ir al baño— con un poco de dificultad, logro separarse del rubio que se negaba a soltarse de él.

— ¡No me dejes aquí solo! —le retuvo de la camisa, mirándolo con lagrimas en los ojos.

—Cariño, solo voy a estar a unos tres metros de aquí— revolviendo su cabello —Puedes seguir viendo la película mientras tanto.

— ¡Pero tengo miedo! ¡Mejor la quitamos!

—Oh no, es víspera de mi cumpleaños y vamos a terminarla, ya casi termina ¿ves? —el rubio giro para ver la escena actual— Solo falta que el asesino la descuartice.

Aquello logro el efecto contrario, se abrazo otra vez a él.

—Es una película horrible— chilló.

—Realmente quiero ir al baño ¿acaso quieres acompañarme y ver lo que hago?

—No seas vulgar— lo miro con fastidio.

—Entonces suéltame— y así, a regañadientes, el albino salió de ahí dejando solo por unos minutos a Zenitsu.

El rubio pensó en ponerle pausa a la película mientras lo esperaba, pero en ese caso se quedaría frente al televisor con alguna escena estática, mientras estaba a oscuras y en completo silencio. No se atrevía a acercarse al interruptor de luz, la zona era completamente oscura y su teléfono se encontraba en la habitación de Tengen cargándose, tampoco quería ir ahí, no podía ver nada sin luz adicional.

No le quedo otra opción mas que ver lo que continuaba en la pantalla. Abrazo sus rodillas, hecho completamente un ovillo tembloroso y lloroso.

En la pantalla se veían los pies del asesino, caminando lentamente hacia su siguiente víctima, la escena cambiaba rápidamente a la chica que miraba a todos lados asustada sin saber bien de qué lado saldría el atacante. La habitación donde estaba se torno oscura, los pasos silenciosos continuaron, acercándose a la espalda de la mujer, esta giró su cuerpo sintiendo la presencia de alguien. En ese momento la luz volvió y frente a ella estaba ese rostro desfigurado a punto de matarla.

— ¡Boo! —Tengen regreso por detrás, picando los costados del rubio mientras emitía un sonido para asustarlo.

El grito de Zenitsu fácilmente pudo escucharse hasta el edificio vecino. Sabia que estaba mal asustarlo, pero no podía evitarlo, a veces era un poco malo con él. aprovecho de encender de nuevo las luces.

— ¡Maldito imbécil! ¡¿Por qué me asustas así?! —seguía temblando del miedo, tirado en el suelo a donde rodo por el brinco que dio.

—Lo siento— controlando sus risas —No pude evitar aprovechar la oportunidad.

Zenitsu le miro molesto, se levanto y fue a la habitación por sus cosas y salir de ahí.

—Espera ¿A dónde vas?

— ¡Me voy! —completamente indignado.

—Son las 12 am ¿Cómo piensas volver? —le cuestiono, no le iba a dejar irse tan noche.

—No sé, ya me las arreglaré— casi a punto de llegar a la puerta para colocarse sus zapatos, las luces se apagaron —Tengen, esto ya no es divertido.

—Yo no hice nada, estoy en medio de la sala— incluso el televisor se apagó repentinamente.

Zenitsu trago saliva nervioso, su mente ya empezaba a jugar sucio contra él pensando en que algún asesino saldría de repente de algún lugar que estuviese escondido. Su piel se erizo y contuvo su voz cuando sintió que alguien le abrazaba por la espalda.

—Zenitsu, mi pichoncito— era su novio quien lo había atrapado — ¿podrías perdonarme? Prometo no volver a hacerte una broma así.

El rubio lo pensó un momento, antes de girarse y abrazarse al otro cual koala. Uzui lo llevo entre brazos hasta la habitación, con cuidado de no chocar en el camino contra algún mueble. Al parecer, la luz se había ido en todo el edificio.

Ambos se recostaron aun abrazados, sin mediar palabras, el ambiente entre ambos era tranquilo, Zenitsu parecía estar más calmado ahora.

—Tengen...

— ¿Sí?

—Feliz cumpleaños— le molestaba que no hubiera luz para poder apreciar mejor el rostro de su chico, hizo el agarre mas fuerte, sintiendo la calidez del cuerpo del otro.

—Gracias, pichoncito— subió la mano para acariciar su rostro y acercarse un poco para besarle —Ahora, quiero mi regalo.

— ¿Regalo? ¿No puedes esperar a la fiesta?

—No hablo de ese regalo— Zenitsu esa noche fue la presa de otro tipo de personaje de terror. 




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Mas que tarde, lo hice noche de películas xD Tengen es un maldito~ 

Día 2 listo, nos leemos mañana~ 

~UZEN WEEK 2020~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora