Un Amor De Verano: Tulioque Editando

capitulo cuatro

Capítulo cuatro: Los problema se acrecentan.

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Ese día había tomado la primera hora de vuelo en avión que lo llevaría a su destino. El viaje trascurrió demasiado Tranquilo,   estar sobre el cielo claro, las nubes puras de creativas formas artísticas, la tranquilidad de las personas silenciosas en aquel viaje.

Bodoque era un aventurero apasionado y a la vez descuidado, o más bien, demasiado sencillo. Se las arreglo de tal manera de llevar solo una mochila con sus pertenencias más esenciales. Ya que tampoco tenía demasiado, porque constantemente con las apuestas las perdía.

Una vez llegó a su lugar de destino, ¡lo primero que hizo nuestro queridísimo reportero estrella...

Se metió a un bar. Me lleva la ching-

Bodoque salió con múltiples rasguño, algunos hematomas, y con un ojo morado que al menos podía entre abrir. El juego en estos tiempos se estaba volviendo cada vez más agresivo y peligrosos, aparentemente.

—Como cambian los tiempos—
Murmuro.

¡Ahora era más entretenido y adrenalínico! Ahora apostar ya no eran solo bienes materiales, ahora era tu vida y si perdías con algún mal tipo, podías perder hasta la vida.

Bodoque no era un suicida o algo por el estilo, pero amaba sentir la adrenalina, la incertidumbre, de hechos que lo hacían dudar de si mismo. Era adrenalina pura, tan adictiva que no podía despegarse de ella y necesitaba cada ves más, como una droga llevándote a la muerte.

El juego, las apuestas, el mundo del vicio,era así, un mundo en el que juegas sobre probabilidades, probabilidades que podían llevarte a un éxito descomunal o a un aplastante fracaso, un hueco eterno y profundo del que salir, era todo una travesía.

Pero dentro de todo, bodoque no se lanzó directamente a los juegos y a su tentador vicio,
También aprovecho de gastarse el dinero en salir a caminar, a comer alguna cosa, y ver las artesanías de la zona. Cosa que el reportero admiraba demasiado por la belleza que llegaban a crear sus artesanos solo con sus manos. Le fascinaba.

Algo que una vez el reportero colorín se había dedicado en algún momento de su vida cuando era joven, ingenuo y apasionado. Pero por cosas del destino, dejo...

"El recuerdo era amargo"

Una recuerdo, una memoria y un trauma.
Que más adelante este narrador les contará,
pero como ya contamos con un
Flashback,  que es el actual,
dejaré como pendiente para su tranquilidad.

Lamentablemente lo de mantenerse alejado de las apuestas a bodoque no le duró mucho. Pues ya esa noche estaba apostando nuevamente, el sudor le caía por las cienes, sus ojos claros y desorbitados mirando con éxtasis como el dado caia.
Había sido una victoria por su parte y bodoque alzó los brazos triunfante. Agarró lo que había ganado y se reía, burlándose de los que habían perdido en aquella partida.

Era una bendicion y una maldición, lo mucho que el juego llegaba a hacer sentir que tocaba el cielo. Teniendo tanto, de lo que en toda su vida nunca había podido obtener. Bodoque era carenciado, y su realidad limitada le había arrastrado a caer en manos de un círculo vicioso, en el que llegaba a sentirse alguien importante en la vida.

Y esa mis a ceguera, arrastro a bodoque a un lugar aparentemente de mala hostia a jugar con tipos de facciones rudas, algunas demacradas de físicos corpulentos. La vida dura estaba Marcada en sus rostros.