Capítulo cuarenta y cinco.

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Antes que nada quiero dedicar este capítulo a mi team favorito #TeamLaPijaDeMatt y para que sean nos pueden seguir en Twitter @MagconArgGirls @xLaPijaDeMattx

Matthew.

Le expliqué a Emma todo lo que había sucedido y cuál fue la razón por la que me fui. Ella me escuchaba atentamente cada palabra. No había notado lo hermosa que lucía en aquel vestido de bodas y su diminuta tiara en el cabello. 

—No puedo creerlo..—Hizo una mueca.—Enserio, lo siento Matt yo no sabía esa parte del a historia—

—No te disculpes, lo que importa es que aquí estás y aquí estoy—Acaricié su mejilla.

—Lo dejé plantado a Elian y él.. es bueno—

—Ven conmigo, yo lo solucionaré—Me levanté del césped y estiré mi mano.

—¿Qué?—Emma frunció el ceño.

—Vamos ¿confías en mí?—Le sonreí.

—Está bien—Emma tomó mi mano con una sonrisa y caminamos. A medida que nos acercábamos al altar y a donde se encontraba la gente, ella presionaba su mano con fuerza. Estaba nerviosa, la conocía perfectamente y sabía eso. Todas las miradas se posaron en nosotros y ella solo agachó la cabeza.

—No—Negué haciendo que la volviera a levantar.—No tienes nada de qué avergonzarte—

—¡¿Emma?!—La señora Crawford miró enfadada desde una punta. Yo solo esbocé una sonrisa y tomé un micrófono mientras caminaba de la mano de Emma.

—Explicaciones, por favor—Pidió el Señor Salvatore.

—Hola a todos, lamento la espera y lamento decirles que no no se celebrará ningún casamiento.—Dije con una sonrisa. Se empezaron a oír quejas de los invitados y murmuros entre sí.

—¿Qué estás haciendo Espinosa?—Murmuró Elian.

—Creo que el sabe lo que hace—El padre de Emma me guiñó el ojo divertido e hizo que Elian se sentara. 

—La gente dice que no debemos estar juntos y que somos muy jóvenes para entender el "Para siempre" pero yo digo que no saben qué es lo que dicen.—Miré a la madre de Emma, para regresar mi mirada a los invitados.—Pero este amor se está volviendo cada vez más fuerte y no puedo esperar más, sólo quiero decirle al mundo que ella es mi chica.—Tomé la mano de Emma que sonreía.—Ustedes no saben las cosas que nosotros hacemos, ustedes no saben que yo la amo, pero apuesto que si lo supieran estarían celosos de nosotros. Ustedes no saben de las noches que pasamos despiertos, ustedes no saben qué es esperado por un montón de tiempo encontrar a un amor que se sienta así de bien, ustedes no saben nada de nosotros. Con sólo verla sonreír, vuelvo a creer en mi mismo. Todo esto sigue volviéndose mejor a cada minuto. Ustedes no saben cuán especial es ella y no saben qué es lo que le ha echo a mi corazón. Pueden decir todo lo que quieran, pero en realidad no saben nada de nosotros.—Miré a Emma quien estaba llorando con una sonrisa.

—Te amo muchísimo, realmente lo hago. Perdón por todas las veces que te lastimé, perdón por esa noche y por irme tan enojada cuando no tenías la culpa.—Me abrazó con fuerza e hizo lo mismo. La gente empezó a aplaudir, incluso Elian. 

—¿Me prestas el anillo que te regalé?—Murmuré en su oído. Emma asintió.

—Aquí tienes—Me lo entregó sin protestar.

Emma

Matt tomó el anillo y se arrodilló mientras apoyaba unos de sus brazos en su pierna izquierda. Me miró con una sonrisa desde lo bajo, mientras todos miraban emocionados esperando a que el hablará. Tomó unas de mis manos mientras sostenía el anillo en la otra.

—No te pediré casamiento.. aún somos muy jóvenes para eso—Dijo divertido y yo solo reí.—Pero me gustaría preguntarte.. Emma Crawford ¿te gustaría ser mi novia e intentarlo, una vez más? dicen que la tercera es la vencida—

—¿Si me gustaría? Por dios Mat ¡Me encantaría!—Me acerqué a él para besar sus labios mientras lo rodeaba con sus brazos y el me afirmaba por la cintura. Matt posee la sonrisa más hermosa que en mi vida había besado. Cuando nos besamos se me olvida del mundo y solo existimos él y yo.

—Te he estado extrañando, te lo aseguro—Murmuró sobre mis labios con una sonrisa.

—Yo también y demasiado—Escondí mi rostro en su cuello mientras deposita corto y tiernos besos sobre este, provocando que Matt riera.

Las horas pasaron y ahora yo me encontraba en mi casa de San Francisco haciendo mis maletas para volver a Virginia junto con Matt lejos de mi madre. Aún no me puedo creer todo lo que hizo, ella sabía todo lo que significa él para mí.

—Hola Hermosa—Matt entró a la habitación con una sonrisa.

—Hola feo—Dije divertida mientras me sentaba sobre la maleta.

—Ya está oscureciendo, tendré que regresar a casa pero pasaré por ti en la mañana—Matt se acercó  observar el cielo desde la ventana.

—Quédate a dormir y recompensa todo este tiempo que estuviste lejos de mí—Le pedí.

—¿Sabes algo?—Matt se acercó lentamente a mi para quedar a muy pocos centímetros de mi. Acarició mi mejilla mientras me miraba los labios con una leve sonrisa, sin mostrar sus dientes.—Si pudiera bajarte una estrella del cielo, lo haría sin pensarlo dos veces porque te amo—

{LEAN ESCUCHANDO HELLO BEAUTIFUL-JONAS BROTHERS}

—No necesito ninguna estrella si te tengo a mi lado—Murmuré. Me acerqué a el para romper la corta distancia que había entre nosotros. Dejé caer la maleta al suelo mientras me acostaba sobre la cama. Los besos de Matt se entornaban dulces y tiernos, recorriendo desde mi boca hasta el lugar más remoto de mi cuerpo, explorando cada lugar en el que ya había estado pero no se cansaba de volver. Y nuestras bocas se encontraban solo por unos segundos antes de que el desaparezca nuevamente para bajar sus besos a mi cuello volviéndose más salvaje, pero sin perder la ternura. Mis manos jalaban de su cabello cada vez que el ingresaba en mí.

Nuestras miradas se conectaron una vez más. Deseaba estar en sus brazos para siempre. Si estaba segura de cuánto lo amaba. Aquella cama se volvió testigo de nuestras caricias, de nuestros besos, de nuestro amor.  Nos empezamos a mover expresándonos todo el amor, como ya anteriormente lo habíamos echo.. pero nada era más placentero, que el reencuentro. 

Matt se separó un poco de mí para mirarme con una sonrisa y no pude evitar que mi corazón se acelerara al notar como lo tenía sobre mí. Mis mejillas se ruborizaron pero no pude dejar de pensar en que la felicidad de Matt, también había llegado a sus ojos. 

Separó mis piernas unas vez más para ingresar nuevamente dentro de mí. Un gemido salió de mi boca y el solo esbozó una sonrisa satisfecho. Cada beso era como una línea cursiva y cada toque como una línea refinada. Tal vez él no era la persona perfecta, pero se encargaba de todo con él.. fuera perfecto. 

—Muchas personas se quitan la ropa y tienen relaciones cotidianamente, pero abrirle tu alma a alguien, dejarlo entrar en tu espíritu, pensamientos, miedos, esperanzas y sueños.. eso es realmente es hacer el amor y eso es lo que hago contigo—Murmuró mientras me sostenía en sus brazos para luego besar mi hombro. 

Sad Song {Matthew Espinosa}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora