Un total desastre 1/2

781 87 81
                                    

Un nuevo lunes se hizo presente en París, y las rutinas diarias volvieron a ser presente.

Marinette iba de un lado a otro en su habitación desesperadamente buscando su más sagrada mochila escolar.

¡Cómo se le ocurre llegar un viernes por la tarde tan alegremente y tirar sus pertenencias quién sabe a dónde!

Fué ése mismísimo día cuando ella y su rubiecito tuvieron su mágica cita, y encontraron a la vez a la cosita más hermosa de todo el mundo.

Anvorgesito y tikki la miraban silenciosamente, era tan divertido observarla correr cómo si su vida dependiera de ella.

-¡Marinette! ¡Mi yerno ya llegó por tí!

Y ése era el grito de su adorada madre, informándole que ya había llegado adrien para ir juntos hacía sus clases.

-¡Oh por todos los dioses de la moda! ¿¡Dónde está ésa condenada mochila!?

Grito exaspera, rogándole al mismo techo cómo de costumbre.

Alguien caminaba por las escaleras dirigidas hacía la habitación de la azabache, y al detener sus pasos, un rubio asomó la cabeza por la escotilla.

-¿Todo bien princesa? -pregunto curioso agreste con preocupación-

Marinette simplemente se deja caer es su sofá-cama y cubrió su cara con sus manos.

La azabache negó.

Ni dora la exploradora perdía su mochila y ella si.

El chico al entender lo que sucedió, con burla dejó ver su mano izquierda agarrando una mochila color rosa con lunares.

-Tus padres me dijeron que te la diera, ya que la última vez viniste tan emocionada que ni te diste cuenta que tiraste la mochila dentro del horno de la panadería.

Se adentró a la habitación mientras se sentaba a un lado de su amada riéndose por su adorable torpeza.

Gracias al cielo que no se hizo cenizas y sus padres la notarán.

-No te rías, soy un total desastre.. -se quejó la azabache incorporándose-

Su amado hizo un puchero y la abrazo con fuerza.

-Me encantan tus desastres, son hermosos.

Comentó mientras le daba un tierno beso en su frente.

Nunca la haría sentir mal, ella no era un desastre, era su hermoso desastre.

-Apártate rubia teñida, yo también necesita darle amor a mi princesa.

Plagg apartó con su pequeña manita al serio rubio que abrazaba a la azabache.

Ahora la pequeña criatura de la destrucción estaba en los brazos de marinette contemplando sus caricias, y la azabache sus ronroneos.

Anvorgesito al volver a contemplar la escena de la azabache, y está vez también de plagg, dió un salto y se posó en las piernas de la franco-china también queriendo caricias.

El gatito negro al ver sus intenciones malignas, intentó apartarlo también como lo hizo con su portador.

-Atrás pulgas, ella es MÍA.

Dicho y hecho, el felino se bajó de las piernas de su dueña y se sentó en el suelo mirando al responsable de su enojó, moviendo su cola de un lado a otro.

Si algo era que no le gustaba a anvorgesito lo cuál la azabache no sabía, era que lo desafiara, le quitará la atención, arrebatarle lo que más quiere y ama, e hiciera enojar y también que su oponente se creyese mejor que todos a su alrededor.

Lo aprendió de su tía chloe.

-¡Mira la hora nada más! vamos a llegar tarde a clases princesa.

Rápidamente el rubio la separó de su kwami.

No es que él también estuviese celoso, pero enserio, faltaban solamente 10 minutos para las clases de miss bustier.

-Tikki y Plagga; ustedes desde ahora se quedarán y cuidarán de anvorgesito mientras que yo y adrien estemos en clases.

Habló la azabache revisando que todo lo necesario estuviese en su mochila y saliera de la habitación acompañada del rubio.

Los dos seres mágicos miraron disimuladamente al gato, el cuál se lamía la pata con total serenidad.

.

.

.

Horas más tarde.

-¡Anvorgesito, mamá marinette ya llegó!

La azabache emocionada y con preocupación subía las escaleras seguida de un adrien con cara de pocos amigos.

-Y papá adrien también..

Se quejó el rubio.

"¡Cataclismo!" es lo que escucharon los dos al mismo tiempo ya al estar cerca del encuentro.

¿¡Acaso ésa era la voz de plagg invocando su poder!?

Los dos al estar ya presentes en la escena, quedaron con la boca.

-¡¡Meoww!!

Ése era el maullido de suplica del pequeño inocente felino siento víctima de plagg y tikki.

La kwami rosa tenía amarrado al felino naranja impidiendo que esté escapará, mientras que el kwami negro acercaba su manita con la energía oscura hacía anvorgesito.

Continuará...

¿Qué habrá pasando entré plagg, tikki y anvorgesito?

Atentos para la próxima actualización QwQ

¡Nos vemos a la próxima! 💕

Inocencia Felina © [Corrigiendo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora