Nostalgia

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No podía describir los sentimientos encontrados que tuvo al momento de entrar al barrio Uchiha lleno de vida, habían niños corriendo por las calles, las señoras compraban en los mercados y estaba la policía caminando con tranquilidad saludando a sus familiares. 
Mientras que Sakura miraba todo con asombro, Obito caminaba normal hasta que llegaron a su casa un agradable olor a comida los recibió.

-Estoy en casa mamá-grito Obito desde la entrada quitándose sus sandalias-. Invite a alguien espero no te moleste.

-Perdón por la intromisión- susurro Sakura imitando al menor.

Se puso las pantuflas para estar en la casa y siguió a Obito hasta la sala donde se asomo una señora de cabello y ojos negros que la miro con sorpresa.

-Mamá ella es mi ex maestra Sakumi-sensei- presento el joven.

-Buenas tardes señora- Sakura hizo una leve reverencia-. Perdón por llegar sin avisar a su casa. Espero no incomodarla.

-Obito me ha hablado mucho de ti cariño- sonrió la señora con un agradable sonrisa-. Siéntate ya mero esta la comida y los primos no tarden en llegar ¿Por qué no le muestras la casa Obito?

El joven asintió con la cabeza feliz porque su madre acepto a su maestra en la casa, en cambio, Sakura estaba echa un manojo de nervios. La única casa Uchiha a la que había entrado fue a la de su compañero Sasuke hace muchos años cuando eran Gennin, parecía ser que todas las casas se parecían o la nostalgia le hacia ver eso.

-Es muy grande tu casa Obito-chan- estaba maravillada por el enorme patio que tenían en su casa, en el centro estaba un enorme árbol brindándoles sombra a la casa. 

Se comenzó a escuchar mucho ruido proveniente de la sala y el grito de la madre de Obito avisándole que sus primos habían llegado, el joven sujeto la mano de Sakura que se puso nerviosa al conocer nuevos Uchihas ¿Les caería bien? ¿Todos son serios? ¿Todos querían matarla? Al llegar a la sala todas sus preguntas fueron evaporadas al reconocer a la mujer que estaba allí saludando a la mama de Obito mientras se acariciaba su vientre de casi 7 meses, aun lado de ella se encontraba un niño de 8 años que miraba la casa con seriedad hasta que los vio llegar.

-Itachi- su corazón se detuvo al igual que sus pasos. Aquel niño era su maestro, seguía conservando la misma expresión de seriedad.

Sus manos comenzaron a sudar y las ganas de llorar eran evidentes, el calor que sentía solo con verlo se esparció por su cuerpo. 

-Obito que grande estas- saludo Mikoto a su sobrino-. Itachi saluda a tu primo.

El menor se movió de forma automática a estrechar su mano con el mayor que lo miraba con una enorme sonrisa.

-Tía Mikoto quiero presentarme a mi ex maestra Sakumi- sensei.

Todos voltearon a verla haciéndola sentir diminuta por tantos ojos color negros viéndola, la mirada de Itachi a pesar de ser un niño seguía siendo de análisis total.
Se acerco a las mujeres con una sonrisa forzada mientras se presentaba, ellas terminaron encantadas debido a lo muy bien que hablaba Obito de lo increíble que era y la vez que salvo a su equipo de morir aplastados, el pequeño Itachi no prestaba tanta atención a lo que decía su primo sino que su vista seguía fija en aquella desconocida que al verla un sentimiento extraño lo domino.

-Soy Itachi Uchiha- tuvo la necesidad de presentarse ante ella sin explicación alguna.

Sakura estuvo al pendiente de su reacción aun cuando hablaba con las señoras, al escucharlo decir su nombre no pudo evitar sonreír, se puso a la altura del pequeño para también presentarse. Los ojos negros del niño como del adulto la hacían sentir indefensa, como si con mirarla pudiera leer sus pensamientos.

"No hay nadie que pueda detenerme ni siquiera ese estúpido prodigio Uchiha jajaja."

La risa demente de Tobi resonó en su cabeza y la imagen de Itachi muerto le dieron muchas ganas de llorar, el niño se dio cuenta como Sakura se limpiaba aquellas lagrimas que luchaba por retener por eso ante la sorpresa de todos abrazo como pudo el cuello de la mayor que se quedo de piedra, segundos después correspondió el abrazo con cuidado de no lastimarlo.

-Itachi...-susurro con dolor. 

La cena transcurrió tan normal que ni Sakura pudo creerlo, durante la comida también se presento el padre de Obito y también el jefe de policía Fugaku que la reconoció inmediatamente. La joven pelirosa solo se mantenía callada viendo como Mikoto presumía que su segundo hijo seria un varón y que esperara a que se pareciera a ella como lo fue Itachi, estaba encantada con esa mujer y recordó los dulces que suele hacer cada vez que su primogénito sacaba los primeros lugares.

-Dinos Sakumi-san ¿De donde es?- pregunto la mamá de Obito.

Ya estaban sirviendo el postre que consistía en un pastel de vainilla y un poco de té verde. 

-Soy aquí de Konoha solo que por mucho tiempo estuve entrenando afuera, cuando regrese ya se me había asignado el equipo 7- le sonrió a Obito.

El único que noto ese gesto fue el pequeño Itachi que hizo un leve gesto de molestia así que continuo comiendo su no tan favorito postre.

-¿Cual es tu apellido?- pregunto Fugaku de manera seria. 

Fue una enorme sorpresa el ver aquella niña en la casa de su hermano y que resultara ser la ex maestra de Obito; en el cuartel, se esparció la historia de como un ninja de Konoha había salvado a un Uchiha junto con su equipo de ser aplastados. No supieron de quien se trataba aquel misterioso maestro ya que por más que lo buscaban no lo encontraban por la aldea; como jefe de la policía tuvo que investigar eso al tener como implicado a un Uchiha. 

Sakura al escuchar aquella pregunta casi escupe el té-. Yo... no tengo apellido- dijo después de toser un poco.

-¿No tienes apellido?- respondió de forma burlesca. Mikoto lo volteo a ver molesta por tal pregunta aun así la ignoro-. ¿No tienes padres señorita Sakumi?

No era tonta como para no darse cuenta de la forma que le estaban hablando y de cual era su intención: desmarcarla. En eso tenían en común el e Itachi que no se confiaban de alguien tan rápido.

-Soy huérfana. No conocí a mis padres- trato de sonar lo más seria posible para hacer creíble esa mentira.

Obito la miro sorprendido por no saber aquel dato "insignificante" de su maestra en cambio los demás se notaron un poco incomodos. Mikoto desvió la atención de manera perfecta hacia otro tema más feliz y era que pronto Itachi entraría a la academia ninja.

-¡Felicidades Itachi!- dijo la mamá de Obito. Sabia que su sobrino era todo un prodigio.

-Gracias tía- respondió de manera seria y respetuosa. 

-Si tienes problemas Itachi puedes pedirme ayuda a mi- Obito se llevo su dedo pulgar a su pecho de manera triunfante-. Fui entrenado por Sakumi-sensei y soy parte del equipo 7 el más increíble de Konoha.

Las madres rieron y los padres solo lo miraban con pena, Itachi solo estaba serio analizando lo antes dicho por su primo que seguía con una enorme sonrisa.

-Gracias Obito... en ese caso creo que te tomare la palabra- todos lo voltearon a ver sorprendidos incluso el joven de 16 años dejo de sonreír al no creer que lo tomara en serio-. Sakumi-san- la volteo a ver-. Por favor sea mi maestra. 

N/A

Ya por fin Sakura se encontró con Itachi❤️ lo mejor es que los papeles se han cambiado ahora le toca ser su maestra jajaja

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Próxima actualización: miércoles y viernes.

Sus ojos verdesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora