Sus ojos verdes

Mentiras y verdades

Al despertar un dolor insoportable en su cabeza la hizo volver a cerrar sus ojos, se llevó su mano a la cabeza para tratar de curarse cuando la misma acción le dolió mucho más. Tocó su abdomen y se fijó en las vendas que la cubrían, estaban manchadas con un poco de sangre.

-Al fin despiertas pelo de chicle-entro Karin al cuarto con una bandeja con comida-. Llevamos dos días en esta estúpida aldea por tu culpa.

Dejo la bandeja alado de la cama, acomodo algunas cosas y después la miro fijamente. No sé molestó en ocultar su enojo contra ella, Sakura no sabía si estaba enojada con ella por ser el lastre del equipo o porque Sasuke le presta mucho más atención. No lo sabía y de seguro que ni ella tampoco.

-¿Dónde estamos?-su garganta se encontraba seca y rasposa. Tomo el vaso de agua que trajo Karin.

-Es una aldea sin importancia en el país del fuego-contesto. En estos dos días que llevaba inconsciente pensaba en todas las cosas horribles que planeaba decirle una vez que despertara y aprovechando que Sasuke no se encontraba en el hotel-. Si no te quisieras hacer el héroe a cada rato no estarías allí.

Sakura no la escuchaba pero su molesta voz chillona le taladraba la cabeza.

-Lo siento Karin no tengo ánimos de discutir-fue lo único que dijo para después acostarse-. Gracias por curarme pero puedo hacerlo sola apartir de aquí.

La peliroja se mostró sorprendida e incluso humillada por su comportamiento. Estaba buscando pelear con una inválida, hasta para ella hacer eso es caer tan bajo. En cambio, Sakura la trato de la manera más madura posible y le agradeció por ayudarla; en su amarga experiencia nadie le había agredecido cuando les salvaba la vida siempre era un deber como subordinado, pero, Sakura no lo vio así.

Estiró la manga de su blusa mostrando varias cicatrices de mordidas, se acercó a la cama y extendió el brazo hacia ella dando una clara señal de que la mordiera.

-Perdon Karin pero no haré eso-contesto sorprendida. Hace un rato la peliroja se comportaba como gato boca arriba y ahora buscaba por restablecer su chakra.

-Hazlo sino pasaremos otros dos días más en esta estúpida aldea por tu culpa-contesto. Volteó su rostro apenada, la mirada de Sakura parecía traspasar le el alma y aquellos ojos verdes tampoco ayudaban en nada.

-Lo siento- dijo antes de morder la con fuerza. Sentía como su charka se restablecía en su máximo poder y pudo así curar la herida de su abdomen- Gracias.

Karin se limpio la sangre de su brazo.

-Sí... Si como sea. Hay ropa limpia en aquel armario y la puerta de allí es el baño. Iré avisarle a los demás que ya estás despierta- salió de la habitación.

Sakura sonrió con gratitud una vez que se encontró sola en la habitación. Poco a poco se fue levantando de la cama, camino hacia el baño donde abrió la llave del agua caliente. Mientras la tina se llenaba aprovecho para verse en el espejo y noto un insignificante detalle.

-No puede ser...-susurro. Comenzó a tocarse la cara y el cabello-. No... No... Esto no está pasando.

Su cabello había vuelto a la normalidad y lo peor de todo es que Karin le acaba de ver el rostro al no usar su máscara.
Tenía una ligera esperanza de que solo ella la hubiera visto estos dos días, evitando que los hombres entrarán a la habitación.

-Sasuke-su nombre apareció en su cabeza.

-Achu-estornudo.

-Salud Sasuke-sama- respondió Juugo.

-Hmp.

Estaban los tres en el vestíbulo sin nada que hacer, se suponía que Sakumi iba a despertar hace dos días pero al parecer sus heridas fueron más graves de lo imaginado.
Sasuke miraba serio algún punto del hotel, después de enterarse de la verdad le pidió a su equipo mantenerla vigilada y a Karin que era la que más cerca podía estar de Sakura (refiriéndose cuando la estaba curando) que no le dijera nada sobre su extraño color de cabello.
Quería saber hasta dónde llegaría la mentira de su compañera.

-Ya desperto-iba bajando Karin las escaleras-. Se está bañando.

Sasuke asintió con la cabeza.
Esperaron otra media hora más cuando vieron a Sakura bajar con su cabello color negro y su clásica máscara, eso lo puso de mal humor cosa que se notó.

-Listo chicos-hizo un saludo con los dedos.

-Me alegro que se encuentre bien Sakura-san.

-Muchas gracias Juugo-podia sentir la intensa mirada del Uchihas en ella.

-Hmp... Andando.

Habían perdido muchos días en encontrar el paradero de Itachi que ya ni sabían por dónde comenzar. Sasuke invoco varias serpientes y las disperso por todo el país del fuego, Suigetsu también comenzó a contactar con sus amigos contrabandistas por si alguien había visto a Itachi.

En cambio Sakura pensaba en si Sasuke descubrió o no su identidad, no le ha vuelto hablar ni siquiera volteado a ver, la situación la tenía tensa pues debería apresurar todo con convencerlo.

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Acabo de publicar mi nueva novela: Amnesia por amor. 100% Itasaku se las recomiendo!!

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