8. (En)Tender.

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Perdón si me estoy demorando mucho, pero les juro no me olvido de esta historia jeje.

-No por mirarlas más crecerán más cariño- La voz de JiSung le habló desde atrás- Las plantamos hace un mes.

-¡Un mes es demasiado! - MinHo se quejó.

-Es poco, vamos dentro- Jisung lo tomó de la mano y los llevó a ambos dentro.

Habían pasado cinco meses desde que ellos habían decidido estar juntos y habían sido los más felices de su vida. La princesa y él pasaban sus días tranquilos, leyendo sobre plantas, escuchando los discos de Hanna Montana que JiSung había tenído en su auto cuando le robó su radio y también pasaban el tiempo solo tonteando.

Aveces su novio iba a casa de JeongIn y HyunJin solo para regresar maquillado, peinado y con las uñas pintadas.

Luego era una tortura para él quitarse el maquillaje pero valía la pena por lo lindo que estaba.

Ahora ellos tenían todo un jardín con diferentes frutas y verduras las cuales usaban para vivir además de las compras del mes.

-¿Hoy vamos al pueblo? ¿Tienes ganas? - Le preguntó a JiSung.

-Está bien, el día está lindo- Dijo mirando el sol por la ventana.

JiSung ya había salido con él de casa, la primera vez MinHo tuvo un miedo horrible de que Jisung tratase de escaparse de él y correr a su antigua vida.

Pero no fue así.

Siempre iban de la mano, si tenían mucho calor se soltaban y jamás JiSung se fue de su lado o mostró intenciones de dejarlo.

-¡MinHo mira! - Jisung le dijo mirando en una vitrina que vendían plantas y semillas cuando ya estaban en el centro del pueblito- Entremos.

Ellos tomaron algunas cosas, pocas, pues MinHo estaba corto de dinero.

Por lo general él vivía de su parte correspondiente en un secuestro pero puesto que a JiSung no lo buscaba nadie ni nadie pagaría un peso por él tendría que pensar algo.

¿Cómo iba a cambiar su vida ahora? No podía seguir siendo un delincuente.

Además estaba juntando el dinero para pagar el rescate de Jisung, de ahí luego él obtendría su parte de vuelta con la que estaría bien un tiempo y le podría devolver a HyunJin lo que le prestó.

¿Pero entonces?

¿De dónde sacaría un empleo? ¿JiSung podría trabajar? ¿Nadie lo reconocería? ¿Cómo iban a vivir?

Esas preguntas lo atormentaban todas las noches.

-¿Estás bien? - Jisung lo miró con preocupación en sus preciosos ojos.

Era tan hermoso.

-Estoy bien, solo me quedé pegado por un segundo.

-Eres un loco- JiSung se agarró de su brazo para ir finalmente a un pequeño supermercado- Vamos ya.

Entraron al lugar, de a poco este sitio se había agrandado así que se separaron terminando él en el área de electrodomésticos curioseando mientras JiSung buscaba otras cosas.

Cuando llegó a la parte de los televisores algo llamó su atención.

Era una entrevista que ponía "Caso Han Jr." "El único muchacho que no ha vuelto a casa".

Su corazón se batió, había imágenes del padre de JiSung muy triste dando entrevistas y diciendo que nunca recibió una petición por parte de los secuestradores o él hubiera pagado lo que sea por su hijo. Que estaba muerto de preocupación y esperaba por noticias de Jisung.

¡Eso era una mentira!

Reiteradas veces MinHo le informó de Jisung, antes de estar juntos claro.

El hombre no tenía nada en su corazón, él no extrañaba a JiSung, estaba haciendo puro marketing.

MinHo iba a dar media vuelta cuando en la pantalla apareció un muchacho, tenía el pelo rubio y la voz profunda al hablar.

Él lloraba, lloraba en serio, podías oír la desesperación en su voz.

-"Quién seas, por favor, pegaremos, solo no lastimes a JiSung, no le hagas nada" - El muchacho apretaba el micrófono en sus manos- "Devuelve a mi mejor amigo, dinos el precio, lo haremos, vamos a pagar"

MinHo quedó sin voz, sin alma.

Este muchacho era el supuesto prometido de Jisung, no debía saber nada de las mentiras de Han padre, y parecía estar sufriendo mucho. Ellos querían a JiSung de vuelta, lo amaban, lo extrañaban.

Ellos esperaban a JiSung con ansias, con cariño, con una gran cama, comida deliciosa, medicina por si estaba enfermo, la posibilidad de estudiar más cosas, todo lo que MinHo nunca le podría ofrecer.

Se preguntaba si JiSung tenía algún odio hacia él por quitarle todo eso, de ser así lo tenía bien merecido y podría sufrir las consecuencias.

JiSung conocía su historia, su apellido, un poco la ubicación donde estaban, a sus amigos, su trabajo, su rostro.

Eso es todo.

Y con una decisión tomada en menos de un minuto MinHo deseaba que, aunque fuera con rabia y para llevarlo a cárcel, Jisung lo recuerde.

-Tengo todo lo de la lista ¿Ya encontraste lo tuyo? - Jisung llegó a su lado y miró la pantalla pero ahora solo pasaban el clima- ¿MinHo?

-¿Ah? Si, si, no... Me faltan algunas cosas- Sonrió y besó a JiSung en la mejilla- Me quedé tonteando por ahí.

-Siempre haciendo cosas tan extrañas mi MinHo... Entonces vamos por lo tuyo.

MinHo tomó cosas que no había planeado, un vino, algunas botanas, chocolate, una soga, una cinta y una bolsa de tela.

Pagaron y fueron a casa donde pasaron todo el resto del día jugando juegos, ordenando las compras, cuidando sus plantas, haciendo la cena y a dormir.

Esa noche MinHo se abrazó fuerte de JiSung.

-Descansa princesita.

-Descansa señor secuestrador- Recibió un beso en el cabello por parte del menor.

No quería dormir, está sería probablemente la última vez que tendría a JiSung en sus brazos de forma tan calmada y pacífica.

(Des)Conocidos Y (Des)Esperados {MinSung}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora