LuzubornMonth

Día 29: "Hilo rojo del destino"

Día dedicado a Alexia3251 Gracias por tus palabras del capitulo pasado <3

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Reborn se deja caer en el asiento de su oficina, fue un día cansado entre negociaciones y autos robados, sus pies duelen un poco y siente una pequeña punzada en la cabeza. Suspiró mientras mecía levemente la silla, no recordaba que la ciudad llevará un ritmo tan rápido, a decir verdad se había acostumbrado a la tranquilidad de Karmaland...

~Pero deja de pensar en ello coño~.

Se maldijo mentalmente, desde ayer había decidido dejar de pensar en ese lugar que ahora sólo era un recuerdo, jamás volvería, nadie allí lo quería así que debía permanecer en los Santos, como el superintendente Jack Conway... Y ya nadie recordará que se llama Reborn en realidad.

Sin avisar entró el ruso a su oficina y se sentó en la silla frente al escritorio soltando el aire con cansancio.

—¿Qué quieres Otaku?—.

—Tranquilo Conway, sólo vengo a descansar... Horacio está... Muy desatado hoy— suspiró.

—¿Te está molestando?— preguntó levantando la ceja.

—No es como que me moleste, pero estoy cansado y él quiere que salgamos a patrullar— se quejó.

—Mándalo a la mierda, no entiendo por qué no lo haces— contestó con simpleza.

—No lo hago porque es mi hilo rojo—.

—¿Tú qué cojones?— cuestionó.

—¿No has escuchado sobre el hilo del destino? Se supone que todos los viejos se saben la historia— se burló.

—No te pases capullo— advirtió.

—Vale, te cuento, dicen que a las personas que deben estar juntas los une un hilo rojo llamado hilo del destino, este nunca se rompe y siempre une los caminos de la pareja una y otra vez— lo mira a los ojos —el hijo rojo se encarga de entrelazar sus destinos—.

La cara seria de Volkov cambia cuando la risa de Conway llena la oficina, se agarra la barriga un poco porque esta le empieza a doler por estar riendo durante varios minutos mientras su compañero de trabajo se mueve en su asiento con enojo.

—Vete a ver tu anime y deja de decir estupideces Otaku asqueroso— ríe.

El chico se levanta y maldiciendo en ruso sale de la oficina dando un portazo. Reborn quedando sólo en su lugar de trabajo se pone a reflexionar sobre lo que le había contado su amigo, sin querer el recuerdo del día en que llegó a Karmaland llegó a su mente.

*~Flashback~*

Miré el portal, estaba intrigado por este lo cual resultaba extraño, no era la primera vez que me  encontraba con este, ya que siempre que pasaba en mi auto veía por la ventana dicha construcción, pero algo había captado mi atención esta vez.

—Ya te dije que no está haciendo sonidos raros Conway... ¿te estás tomando tus pastillas para la vejez?— preguntó con burla.

—Cállate Momon— ordené.

Me acerqué más al portal, sabía que si se metía este me llevaría a un lugar inexplorado y eso a decir verdad sería la ostia, pero no podía dejar las cosas como estaban en la comisaria. Volkov y Horacio iban avanzando en lo que fuese que tuvieran y necesitarían a alguien que los cuidara, Gustabo había vuelto después de haber desaparecido por esas semanas prometiendo ya no irse y aunque ya no tuviéramos algún tipo de relación seguíamos siendo amigos.