𝗨𝗡 𝗔𝗠𝗢𝗥 𝗡𝗢 𝗕𝗨𝗦𝗖𝗔𝗗𝗢 | Shirbert [✓]

30: Malas Mañanas

Podía ser una bella y reluciente mañana, pero para Anne, era una de las peores mañanas que haya tenido en toda su vida terrenal

Efectivamente, tenía resaca

Se levantó con un muy fuerte dolor de cabeza y un chillido en su oído que todavía no podía descifrar de dónde provenía

Se sentó en su cama para agarrarse la cabeza y soltar un gruñido, odiaba sentirse así y las cortinas abiertas dejando los rayos de luz entrar justo disparados en sus ojos no ayudaba en absolutamente nada

-- ANNE! Es hora de levantarse! -- gritó Marilla una vez llegó al cuarto de la pelirroja, si antes estaba de mal humor por su resaca, ahora lo estaba más por los innecesarios gritos de su tía

-- Marilla por favor no grites -- le advirtió calmada -- tengo resaca, tienes algo para que se me pase?

> La mayor soltó un suspiro frustrada -- Jerry está igual que tú, veré que les puedo dar -- le dijo para luego salir

Lo único que podía hacer Anne era respirar, trató de levantarse pero al instante un mareo la interrumpió y cayó rendida a su cama

Recordaba algo de anoche? Para nada, lo único que recordaba fue que estaba con Gilbert en el salón de la fiesta y que él le trajo unos tragos

Juntando datos lo más rápido que pudo su cabeza en ese momento, llegó a la conclusión: Tenía alcohol y tomé de más

Pero, y Gilbert?

...

-- Arriba Blythe! No seas perezoso y levántate -- gritó Bash tocando fuertemente la puerta del cuarto del pelinegro

Otro soldado caído

Su resistencia al alcohol esta vez falló fuertemente y su cerebro no funcionó del todo bien al hacer tal locura de emborracharse en su propia fiesta de graduación

Tanto él como todos sus amigos estaban igual, con resaca y sin nisiquiera tener fuerzas para levantarse de su cama

Su familia? Se habían ido antes dejando a los adolescentes solos ya que querían disfrutar su noche, pero esa idea no fue del todo buena

Ni siquiera había alguno que no haya tomado? Ni uno solo

-- Deja de gritar, tengo resaca, le puedes decir a Mary que me de algún medicamento por favor? -- dijo con calma y sin prisas abriendo la puerta de su habitación, dejando ver a Bash un chico de 17 años con ojos rojos, débil y sin ganas de vivir a simple vista

En ese momento el moreno hubiese aprovechado en hacerle alguna broma a su "hermano", pero al verlo en tal estado, se aseguró de recordarla para hacérsela cuando esté un poco mejor

El pelinegro tomó las pocas fuerzas que tenía para poder vestirse y bajar lo más decaído posible, cualquiera que lo vea diría que es un zombie

-- Pareces un zombie -- bromeó Bash tratando de sacar una sonrisa al pelinegro con su "chiste" malo como siempre solía hacer, pero no funcionó -- Ey, que te sucede? -- preguntó para después sentir un leve golpe detrás de la nuca, su esposa le había pegado con el primer trapo que encontró

-- Ya te dijo que tiene resaca tonto -- lo regañó la morena -- tragate esta pastilla y aquí tienes un té para calmar un poco el dolor de cabeza -- le ordenó a Gilbert mientras ahora le daba de comer a su hija que parecía reirse del pelinegro lograndole sacar una sonrisa debil