𝐘𝐎𝐔'𝐑𝐄 𝐏𝐄𝐑𝐅𝐄𝐂𝐓 │❝Eres perfecta.❞
Forest Potter, hija de James Potter y Lily Potter, una azabache con unos hermosos ojos avellana y que altera a la población femenina tanto, como la masculina. No se cansará hasta lograr su cometido, enamo...
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¿Hoy no?
. . .
Los tres chicos volvieron para mirar el viejo árbol, que todavía agitaba sus ramas pavorosamente.
—Vamos.—dijo Harry, cansado.—Lo mejor que podemos hacer es ir al colegio.
No era la llegada triunfal que habían imaginado. Con el cuerpo agarrotado, frío y magullado, cada uno cogió su baúl por la anilla del extremo, y los arrastraron por la ladera cubierta de césped, hacia arriba, donde les esperaban las inmensas puertas de roble de la entrada principal.
—Me parece que ya ha comenzado el banquete.—dijo Ron, dejando su baúl al principio de los escalones y acercándose sigilosamente para echar un vistazo a través de una ventana iluminada—¡Eh, Harry, Forest vengan a ver esto... es la Selección!
Forest y Harry se acercaron a toda prisa, y juntos contemplaron el Gran Comedor.
Sobre cuatro mesas abarrotadas de gente, se mantenían en el aire innumerables velas, haciendo brillar los platos y las copas. Encima de las cabezas, el techo encantado que siempre reflejaba el cielo exterior estaba cuajado de estrellas.
A través de la confusión de los sombreros negros y puntiagudos de Hogwarts, vieron una larga hilera de alumnos de primer curso que, con caras asustadas, iban entrando en el comedor. Ginny estaba entre ellos; era fácil de distinguir por el color intenso de su pelo, que revelaba su pertenencia a la familia Weasley. Mientras tanto, la profesora McGonagall, una bruja con gafas y con el pelo recogido en un apretado moño, ponía el famoso Sombrero Seleccionador de Hogwarts sobre un taburete, delante de los recién llegados.
Cada año, este sombrero viejo, remendado, raído y sucio, distribuía a los nuevos estudiantes en cada una de las cuatro casas de Hogwarts: Gryffindor, Hufflepuff, Ravenclaw y Slytherin. Los mellizos Potter se acordaban bien de cuando se lo habían puesto, un año antes, y habían esperado muy quieto la decisión que el sombrero pronunció en voz alta en su oído. Forest durante unos largos segundo, había temido quedar al igual que su hermano en Slytherin, la casa donde según habían estado magos y brujas tenebrosos, pero acabaron en Gryffindor junto a Ron y Hermione ,y el resto de los Weasley. En el último trimestre, Forest, Harry y Ron habían contribuido a que Gryffindor ganara el campeonato de las casas, venciendo a Slytherin por primera vez en siete años.
Forest se percato, además de Ginny quien llevaba el sombrero seleccionador, a una niña de cabello rubio, largo hasta la cintura, cejas muy claras y grandes ojos azules. Le pareció haber visto a la niña más hermosa del mundo.
Habían llamado a un chico muy pequeño, de pelo castaño, para que se pusiera el sombrero. Harry desvió la mirada hacia el profesor Dumbledore, el director, que se hallaba contemplando la Selección desde la mesa de los profesores, con su larga barba plateada y sus gafas de media luna brillando ala luz de las velas. Varios asientos más allá, Forest desvió sus ojos de la hermosa rubia y vio a Gilderoy Lockhart, vestido con una túnica color aguamarina. Y al final estaba Hagrid, grande y peludo, apurando su copa.
