School | Intenabo & volkacio

Capítulo Cinco

Gustabo y Horacio ya eran de los chicos más atractivos de la universidad, Horacio comenzó a tener muchos pretendientes, igual que Gustabo pero a diferencia de Horacio, Gustabo los ignoraba y cada vez que podía los humillaba.

La obsesión de Conway hacia Gustabo no acabó, es mas.. Cada vez era aún mayor, no le despegaba la vista en ningún momento, cada vez que alguien se le declaraba a su Gustabin.
Conway golpeaba al chico hasta dejarle en claro que Gustabo era suyo, algo que Gustabo no sabía.

En cuanto a Horacio y Volkov estos se daban miradas "discretas", Horacio seguía coqueteandole al ruso, pero este solo lo ignoraba..

...

Horacio se encontraba en su club de Artes, al igual que Volkov, Horacio había entrado al mismo que Volkov sólo para estar juntos y aunque el ruso fingía molestia, realmente no le molestaba la presencia del otro.

— Volkov, Volkov, Volkov, Volkov — Horacio repetía su nombre hasta que el ruso se djgnara a por fin prestarle un poco de atención.

— ¿Que pasa Horacio? — Mencionó con el ceño fruncido, sobando su cien para poder aguantarlo.

— ¿Por que no me prestas atención? — Formó un puchero, Volkov rodeo los ojos con una sonrisa falsa

— ¿Le estoy hablando ahora o no Horacio? — Mencionó irritado

— Mhg.. ¿Por qué eres tan seco? ¿Todos los rusos son así? — Mencionó frunciendo el ceño, cansado de rogarle.

Volkov no contestó, simplemente lo miró de reojo, ignorandolo lo que restaba de tiempo.

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Horacio jugaba con sus lápices, realmente odiaba dibujar y sólo había entrado por Volkov, quien por cierto lo ignoraba.. Un chico se paro al lado suyo, Horacio miró hacia arriba.

— Que pedo joto, pues nomas vengo a decirte que, hay pues mira ten nomas' — Frunció el ceño nervioso el mexicano y le dio una carta.

Horacio miró confundido y tomó la carta, era una confesión, este sonrió no le correspondería pero a él no le gustaba romper corazones tan fríamente como su hermano.

— Es muy linda.. Pero me gusta alguien más en este momento.. Lo siento — Guardo la carta mirando a Emilio con una cara de disculpa.

— ¿Y a mi que pedo? Te puedo conquistar chiquito — Horacio Sonrió ante tal apodo gracioso

— Claro, claro — Comenzó a reír — Soy Horacio el aparato — Se presento con una sonrisa.

— Emilio Escobilla.. Pero para ti, el amor de tu pinche vida — Horacio sonrió nuevamente, los mexicanos eran increíbles sin duda.

Volkov miraba a ambos de reojo, de alguna forma le molestaba verlos juntos y aún más que se rieran juntos. Parecían una pareja y eso le molestaba más. Después de todo, le gustaba que la atención de Horacio fuera solo para el.

— Бесполезно (inútiles) — Susurro

...

Toda la clase Horacio se la paso hablando con su nuevo "amigo"
Con un Volkov lleno de celos y mirando a ambos con ojos de fuego. Pero Horacio era demasiado distraído como para darse cuenta.. Una lastima..