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—Siento que me ocultas algo, no lo sé, siempre que quiero salir contigo o hacer una salida especial, siento que te distancias totalmente—Wonho tomo las manos de su novio y las acarició.

—No es nada cariño, solo me siento estresado por los exámenes—Miró sus manos siendo acariciadas por las manos del contrario, sintiéndose culpable por todo.

—Creeré en tu palabra, si realmente pasa algo, por favor dímelo antes de que sea tarde—Dijo mientras acariciada su rostro, su mirada era tan dulce y confortadora, sentía que iba a romper en llanto.—Wonnie, ¿Por qué lloras?—lentamente levantó el rostro el rostro de Hyungwon, soltando la mano que anteriormente estaba acariciando y con aquella, fue retirando levemente las lágrimas que iban bajando por aquel demacrado rostro.

—te he extrañado demasiado... también creo que es por el estrés de los exámenes y trabajos de la Universidad—suspiró, dejándolo salir todo, sonrió, y lo abrazó con fuerza.

—Está bien—correspondió a su abrazo—Hyungwon, mira—lo llamó

—¿si?— dejó de abrazarlo y se separó del abrazo, miró en donde Wonho estaba apuntando, aquel cielo oscuro, un tanto lila, era la primera vez que observa lo cuán hermoso era el cielo.

—Bueno, me siento mal por no haber hecho una buena cita, pero ya sabes como estamos con las tareas—dijo en un tono que pudo oír, pensó que tal vez Wonho le esté dando pena, y era verdad, últimamente no tenían tiempo para casi nada, ni para alimentarse, no lo culpaba, él era quien tenía la culpa, nunca se dignó en escribirle o llamarlo, siempre esperó que Hoseok hiciese todo.

—Aquella estrella, la más brillante, será nuestra, mírala siempre que me extrañes, siempre que te sientas solo, yo también haré lo mismo, pensaré en ti cada que vea esa estrella, recordaré cada momento contigo, recordaré tu sonrisa, tu mirada y tu forma de ser tan única, también harás lo mismo, júralo Hyungwon, por la garrita—extendió su dedo meñique, para que Hyungwon lo tomará también.

Ambos juraron bajo la luz de aquella luna tan resplandeciente, una promesa tan transparente.

•••
10 de Enero del 2020; Seúl-Corea del Sur

Era un día como cualquier otro para Hyungwon, las cosas habían sucedido demasiado normal, a excepción de que no había visto a su novio, desde que se vieron en aquel parque no lo había visto, aunque no estaba del todo preocupado ya que de vez en cuando le enviaba un mensaje de texto deseándole los buenos días, o diciéndole lo mucho que lo amaba, no se quejaba, pero era extraño que no lo visitará  a su casa, también se le hacía extraño que aquel desconocido que tanto le escribía, no lo anduviera acosando por mensajes, y por enésima vez, entendió que tal vez ya se cansó o simplemente fue una broma.
Se encogió de hombros mientras apuraba su paso para llegar a su casa, estaba por llover así que tenía que caminar un poco más rápido para no mojarse.

Cuando ya estaba a unos simples pasos de la entrada de su casa, vio un paquete en en la entradilla de aquella.

( • • • )

-Estaremos investigando señor Chae, no se preocupe- dijo el policía, mientras se alejaba de este para proceder a seguir investigando sobre el crimen.

Hyungwon no lo podía creer, todo aquello que lo hacía feliz, ya no estaba, simplemente atinó a asentir, y tratar de procesar todo lo que pasó en tan solo minutos.

Mientras tanto Minhyuk observaba desde lejos, sin importarle que su amado estuviera transtornado.

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