Capítulo 4

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Aquella mañana Taehyung se levantó con un ligero dolor de cabeza.

En su reloj marcaban las ocho y media de la mañana, hora a la que debería estar en clase, pero debido a que tendría que acompañar a su madre al médico, ese día estaba en casa.

Se levantó y bajó a la cocina a preparar un buen desayuno para su madre, o al menos intentarlo, ya que sus dotes culinarios no eran demasiado buenos que se dijese.

Tras preparar el desayuno y dejarlo en la mesa, se encaminó para despertar a su madre y
avisarla de que bajase a desayunar, pero oyó voces provenientes de la habitación, bastante
familiares, indicando que era su padre quién había ido a despertar a su madre. Eso le molestó
ya que él no debería estar ahí, sabe que su padre podría llegar a ser ciertamente algo
imprudente con la situación de su madre, él no sabía nada de esta, ni como debía ayudarla ni nada, pero simplemente lo dejó estar. No quería que todo acabase en una discusión con su padre y su madre se disgustase.

-Hola Taehyung, ¿ya te despertaste? - preguntó su padre.
-Si, bueno hace ya un rato, mamá tienes ya el desayuno preparado en la mesa- dijo
dirigiéndose a la última mencionada.
-Esto... había pensado en invitarla a desayunar después de la cita del médico, es decir, si son
buenas noticias habrá que celebrarlo ¿no? - Taehyung le dirigió una mirada seria a su padre y
no pudo evitar sentirse mal, siempre que su padre venía alteraba la casa, todos los planes y
todo el ritmo de la vida que llevaban, parecía como si lo hiciese a propósito.
-Tú también estás invitado a desayunar con nosotros, a pesar de que pensaba pasar cierto
tiempo a solas con ella – intervino ante la nula respuesta de su hijo- por el desayuno que
preparaste no te preocupes, se lo podemos guardar para más tarde.
-Está bien supongo, si es necesario después del médico podría volverme a casa y así os dejo
tiempo a solas- Taehyung pronunció esas palabras mientras subía las escaleras para cambiarse
de ropa y prepararse para irse.

Sus padres ya estaban esperando con el coche fuera y el peligris se encontraba cerrando la
casa para correr hacia el coche y poder irse.
Taehyung notaba que su madre estaba algo nerviosa, debido al ligero temblor de sus manos.
Hoy finalmente tras unos años de estar en cama podía moverse, hoy le dirían si podría
empezar a tener una vida normal, poder pasear, poder compartir tiempo con su familia, todo
por lo que llevaba años soñando, se haría realidad hoy. Es cierto que el estado de salud de su
madre había mejorado bastante desde que le cambiaron el medicamento, pero no deberían
adelantarse a los acontecimientos, aunque fuese casi seguro el que se recuperase.

El camino en coche fue íncomodo, es más, no se escuchaba nada, solo el ruido de la ciudad, lo cual generaba cierto agobio en el más jóven. El chico se encontraba escuchando música mientras miraba por la ventana. Aunque pensaba positivamente no podía evitar sentir cierto temor en su interior, ese camino ya lo había visto bastantes veces y cuando iba por ahí solo era para malas noticias, hasta que dejó de ir, debido a que la situación empeoró y los médicos tenían que ir a su casa.
Ya no sabía si su madre se encontraba más nerviosa que él o al revés, la incertidumbre estaba
consumiéndole. Y para mejorar el asunto era su padre quién les llevaba, sabía que no todo iba
a salir bien al cien por ciento.

Conseguía ver por fin el edificio donde les dirían la verdad, ¿saldría todo verdaderamente
bien?

Tras unos minutos de estar buscando un lugar para aparcar, se bajaron del coche y los tres
comenzaron a caminar hacia dentro del hospital, buscando donde sería la consulta a la que
debía ir su madre.
El lugar no estaba tan lleno, solo un par de personas que esperaban a ser atendidos y otras
personas que parecían estar acompañando a alguien y esperando fuera a que saliesen de la
consulta.
Tomaron asiento y esperaron a ser llamados. Para evitar que su madre siguiese nerviosa y
ayudarla a que se relajase, Taehyung decidió llevarle una de las revistas del lugar, que contenía
ciertos juegos de relajación. Él estuvo haciéndolos junto a ella, mientras su padre les
observaba inexpresivo desde su asiento.
Esperaron por aproximadamente diez minutos hasta que el nombre de su madre fue dicho en
voz alta desde dentro de la consulta. Ahí fue cuando los nervios del peligris se dispararon.
Caminaron hacia la consulta y entraron. Allí saludaron a la doctora que se encontraba dentro y
esta se hallaba con una sonrisa saludándoles e indicándoles que tomasen asiento
amablemente.

-Bueno, señora Kim, ¿cómo se ha encontrado estos últimos días? Según tengo aquí apuntado,
le cambiamos a una nueva medicación. -empezó la doctora.
-Bien, he estado bien- respondió su madre mientras sonreía en respuesta.- Con el cambio de
medicación he notado como mi cuerpo respondía mejor a los movimientos que realizaba y me
notaba con más energía.
-Eso es genial, si su cuerpo ha reaccionado bien significa que vamos por el buen camino. Le
realizamos hace una poco una prueba para comprobar su estado físico y es cierto que se
observa una gran mejora comparada con anteriores pruebas realizadas, lo cual debe usted
estar alegre por ello, pero si debo informarla que aunque estos valores hayan subido no todos
se encuentran por encima de la media, así que deberá estar durante una semana por lo menos
aún con medicación- le miró la doctora fijamente y su madre asintió.
-No quiero que piense que algo va mal, de verdad su salud ha mejorado muchísimo desde su
última revisión. Aún no puedo darle el alta con estos valores, así que vamos a hacer lo
siguiente, vamos a realizarle una prueba cada dos semanas y tendremos una revisión con los
resultados. Mientras vamos a ir reduciéndole la medicación, en vez de tomarse la medicación
una vez al día quiero que se la tome cuatro veces a la semana, dejando un día entre medias.
Para ver si los valores se mantienen por si solos o descienden, es la única manera que se
podría comprobar que realmente todo esta yendo bien. Así que puede hacer vida normal, nos
vemos en dos semanas- y terminó con una sonrisa agradable.

Bien, no fue tan malo al final, su madre estaba recuperándose así que debía sentirse alegre por
ello. Todos sus nervios y preocupaciones se fueron, su madre ya podría hacer vida normal.
Se despidieron de la doctora y se dirigieron hacia la sala de espera de nuevo para salir de allí.

Taehyung se despidió de sus padres para que se fuesen a desayunar y así celebrar ellos dos
solos un rato por las buenas noticias y por el cumpleaños de su madre, ambos querían ponerse
al día.

-!Ah! El chico peligris del otro día, parece que fuese el destino que nos encontremos siempre,
¿tanto te gusto que no puedes parar de buscarme? - dijo el castaño mientras se acercaba al
chico mencionado.
Taehyung se sorprendió ante ese comentario y se giró para observar quien era.

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Holi, siento haber tardado tanto en actualizar, empecé el curso y estuve muy liada con bastantes cosas. También quise esperar un poco y tener varios capítulos escritos y así es, tengo varios capítulos nuevos para esta historia uwu

Gracias por leerme y nos vemos en el siguiente capítulo, luv you~

Cuando el invierno llegue ❆ | ▸Taekook◂  [PAUSADA] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora