30.
ANNE
—¿Te has encontrado con Colt?— niego con la cabeza
—Creo que no a ido a la universidad— pone los ojos en blanco y me mira mal antes de dar un paso entrando al ascensor, al hacerlo Rachel presionó el piso siete he inmediatamente las puertas iniciaron a cerrarse
—Sabes que no puedes evitarlo para siemp...
—¡Esperen! ¡espere por favor! ¡esperen!— di un brinco en mi lugar, al menos valió la pena porque la pelirroja logró que las puertas volviesen a abrirse
Dos chicas seguramente de nuestra edad entraron con una sonrisa de agradecimiento. Una rubia y la otra castaña tono miel. La rubia tenía ojos negros, ni siquiera pude distinguir sus pupilas, mientras que la castaña, en sus ojos dominaba la mezcla del café con el verde, su tez blanca evidenciaba por lo rojo de sus mejillas que habían trotado para alcanzar el ascensor, ambas un poco más altas que Rachel y obviamente que yo, curvilíneas y muy bonitas
—Lo siento— tomó una bocanada de aire —, gracias por detener el ascensor— sonrió la rubia
—Sí gracias, por lo general las personas no son tan amables aquí— siguió la castaña
—No hay problema— responde Rache desviando su vista a ellas
—Soy Elle— extiende su mano a nosotras sin borrar su sonrisa, por cortesía y un poco de incomodidad acepto estrecharla y asiento
—Anne— murmuro suave. La mención de mi nombre pareció que alegró su día, sus ojos negros brillaron con felicidad al separarse para tomar la mano de mi amiga
—Rachel— la rubia asintió esta vez sonriendo levemente de lado
—Soy Lauren— la castaña me repasó con las cejas hundidas tratando de aparentar una sonrisa
El momento se llenó de incomodidad, por lo menos por mi parte y nadie dijo nada hasta que el ascensor abrió sus puertas en nuestro piso
—¿Viven en el piso siete?— preguntó con curiosidad Elle
—Sí. Nos mudamos hace tres días— respondí saliendo del pequeño espacio. El pasillo era bastante amplio; recuerdo que el domingo cuando lo vi me hizo querer declinar la oferta y regresar a casa. El edificio no era nada barato, lo sabía y eso en parte no me permitía vivir tranquila.
En este piso solo habían cuatro puertas, por dentro incluso era aún más notorio cuán costoso era, estaba realmente a nada de salir corriendo, era demasiado para mí hasta que Rachel explotó de sus cabales y me encerró hasta que por la mañana tuvo que soltarme, no podía perder clases aunque en unos meses dejaría la carrera pausada no sé por cuanto tiempo; realmente lo único que sabía con seguridad era que quería permanecer con mi bebé por mucho tiempo. Al final seguro terminaría la carrera por clases virtuales
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Quédate Conmigo© (Cuando Ella Era 1)✔
Teen Fiction[T-E-R-M-I-N-A-D-A] ✔.Ella era mía ✔.Una historia cliché destinada a romper las reglas con su final Algunas veces no importa el destino, algunas veces tú decides tu propio camino... Con la ayuda equivocada Aquí no esperes a encontrar a la chica arra...