㒪𝐋𝐢𝐠𝐡𝐭 𝐭𝐡𝐞 𝐟𝐥𝐚𝐦𝐞 𝐨𝐟 𝐲𝐨𝐮𝐫 𝐡𝐞𝐚𝐫𝐭.

15.1K 649 295
                                    

•Categoría: Oneshot

•Advertencias: Fluff & Angst.

•Personaje: Kyojuro Rengoku.

━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━

Jamás habías sido tan felíz.

Despertar entre los cálidos brazos de Kyojuro después de una tarde cansada de entrenamiento.
Amabas delinear las facciones mas prominentes en su expresivo rostro a pesar de estar profundamente dormido, la yema de tus dedos recorrían sus enmarcadas cejas y lo delgados que eran sus labios rosados. Solías pensar en ¿cómo pudo alguien como Kyojuro, enamorarse de ti? Su sonrisa llena de calma y tranquilidad cuando las cosas no resultaban nada bien; y esas situaciones estando a su lado, eran una en un millón.

Sus ojos se abrieron con lentitud cuando sintió la ligera caricia de tus labios chocar contra la piel de su pecho desnudo.
-Buenos días, amor mío- Sonrió, el brillo dorado en sus retinas te fue suficiente para hacerte saber que él estaba bien; estaba contigo ahí. A salvo y felíz.

Jamás habías querido hablar sobre tus pesadillas con Rengoku. No en ese momento, ni en los momentos de entrenamiento cuando su única preocupación mas allá de su deber, era protegerte siendo su aprendiz. Y ahora, la mujer que derretía su corazón.
-Buenos días, Rengoku san- Mordiste tus labios, tratando de sostener el entusiasmo que deseaba escaparse de tu pecho. Aún no era el momento indicado y sus labios te tomaron de sorpresa cuando se estrecharon contra los tuyos, en un beso abrumante de emociones. Tus manos simplemente no lograban dejar de tocarlo, necesitabas hacerlo para convencerte de que aquello era real; acoplaste su rostro dócilmente cuando su lengua tímidamente abrió paso a tu boca para encontrarte. Tus senos presionaron su pecho y gran parte de las sábanas cubrían la desnudez de ambos; la finca de Rengoku con el tiempo se había convertido en el pequeño y cálido santuario en el que pasaban las noches de invierno y mañanas como esta.
¿Cómo se puede amar tanto alguién, sin sentir que mueres un poco por dentro cada vez que miras su sonrisa?.

Te enamoraste de él, cuando te recordó que los milagros existen. Te ató a él cuando besó tus labios por primera vez y te enseñó la forma en la que no habías amado así a alguién mas. Tu cabeza estuvo llena de él por semanas, y cuando las semanas se convirtieron en meses, tu corazón fue entonces que se llenó de él.
Tus labios no habían guardado silencio desde la vez en la que él los besó. La idea de que podría volver a hacerlo se estancó en tu cerebro, el cual no lograba dejar de pensar en él; incluso mucho antes de ese beso.
-¿Cariño?- Tu dulce voz llenó sus oídos y su mirada se centró en ti por lo que parecieron segundos eternos.
-¿Sucede algo, ____ chan?- No apartó su abrazo. Jamás apartaba su abrazo a menos que tu se lo hicieras saber. Él pudo haberte sostenido por siempre y no habría sido una acción suficiente para demostrar lo mucho que te amaba.
-Cuando volvamos de la misión...- Tus dedos acariciaron ingenuamente el centro de su pecho -¿Podríamos ir a ver el océano?- Tus brillantes ojos lo miraron después de terminar la oración; y pareció sorprendido por ello. Solías odiar el océano.
-Pero dijiste que no era tu lugar favorito- Sonrió con ternura.
-Pero sé que el tuyo si- Tragaste saliva, intentándo explicarte -Y quizá sí voy en esta ocasión junto a ti, eso lo vuelva especial-
-¡Hai!- Asintió con aún su genuina sonrisa dibujada en sus labios y tus mejillas se sonrojaron notablemente.

La mañana transcurrió con Kyojuro enseñándole a los chicos un par de movimientos ingeniosos para defenderse de cualquier cosa que podrían encontrarse en la misión.
-Sí sostienes con firmeza y seguridad tu arma, la blandes hacía el frente sin duda algúna, tus enemigos te temeran- Aclaró para Zenitsu, quién era el que lucía mas nervioso de los 4 niños.
-¿Y s-sí no lo hacen?-
-Siempre lo hacen, Agatsuma Zenitsu- Sonrió -Todos en un enfrentamiento temen perder la vida, incluso los seres que creen que son invencibles. Pero hay algo que debes saber que los diferencia a ellos de ti-
-¿Qué es, Rengoku san?-
-Amigos que darían la vida por ti- Señaló el pecho del joven Zenitsu. Una sonrisa confidente se formó en sus labios y cuando regresó a la rutina de cuerpo a cuerpo contra Tanjiro e Inosuke; caminaste hacía Kyojuro.
-Siempre has encontrado la forma de motivar a tus aprendices ¿no es así, cariño?- Besaste sus hombros por sobre su distinguido haori y envolvió uno de sus brazos alrededor de tu cintura.
-Sería un buen padre, ¿no lo crees, mi amor?- Su forma de mirarte estuvo llena de carisma, y tus mejillas se sonrojaron por el hecho de escuchar esas palabras viniendo de él.
-Por supuesto que si, Kyojuro san- Tu cabeza descansó en su hombro -No cabe duda que te admirarían como padre- Escuchaste su risa endulzante
-Y tu serías una gran madre- Besó tu frente tratando de imaginar un escenario junto a ti de esa manera.

❝ 𝐊𝐲𝐨𝐣𝐮𝐫𝐨 𝐑𝐞𝐧𝐠𝐨𝐤𝐮 | 𝐎𝐧𝐞𝐬𝐡𝐨𝐭𝐬 & 𝐏𝐫𝐞𝐟𝐞𝐫𝐞𝐧𝐜𝐞𝐬 ❞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora