¿𝗧𝗥𝗜𝗟𝗟𝗜𝗭𝗢𝗦? ¡𝗧𝗥𝗜𝗟𝗟𝗜𝗭𝗢𝗦! | 𝗒𝗎𝗀𝗄𝗈𝗈𝗄

[Pasitos-Tío Hobi]

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HoSeok se encontraba solo en la casa de su menor con trillizos, el castaño le había pedido cuidar a los trillizos de emergencia; dado que tuvo algún problema con una sesión de fotos que se había aselantado de improvisto. Era una suerte que le llamara cuando salía del trabajo. TaeHyung seguía dando clases en la Universidad, y él recién salía de la escuela de danza que administraba. Mientras su pequeña hija seguía en la guardería.

Con paso ligero fue hasta la sala de estar, vio el corral de forma exagonal color rojo con negro y a tres cuerpecitos durmientes dentro de él.

Se sentó en el sillón de color negro, sintiendo lo acolchado y suave que era. Observó a sus "sobrinos" dormir cómoda y pacíficamente, pensandose seriamente el tener otro hijo con TaeHyung, extrañaba tener a un bebé entre sus brazos, incluso los llantos por la noche.

Sus pensamientos se interrumpieron al escuchar quejiditos provenir del corral, se paró del sofá y se acercó a ver al recién levantado.

-Ya despertaste ¿eh, YeInie?- le dijo al bebé que abría sus ojitos. Al verle, el niño le dio una sonrisita pequeñita con dientitos asomándose, causando que también sonriera- Veo que no eres el único despierto- se refirió a SungYoon que tenía los ojitos bien abiertos y curiosos por todo, mirando a todos lados con su boquita abierta.

Al entrar en la sala había visto un tapete para bebés de diferentes colores y esponjoso, con cuidado puso sobre el mismo al bebé en sus brazos y fue por el otro. JiSung seguía dormido en su mundo de algodón.

Teniendo a ambos bebés en el tapete, se puso a jugar con ellos, viéndolos sentaditos jugueteando con un osito de peluche, se preguntó si ya caminaban. Para su edad ya deberían hacerlo, JungKook les había contado que los trillizos ya gateaban y usaban andadera. Una idea le llegó de repente, y quizás una sorpresa para sus dongsaengs.

-Vamos, criaturas. Les voy a enseñar a caminar hoy- llamó la atención de ambos bebés. Estos le miraron con sus boquitas babositas, curiosos por lo que harían con el Tío Hobi.

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Cuidando de no tirar a los bebés, jaló el tapete hasta dejarlo pegado al borde del sofá más cercano, los dos niños rieron por el movimiento rápido de sus cuerpecitos sobre el tapete. El pelinegro se sentó en sus rodillas a una distancia prudente de los niños, pensó en que usar de incentivo, ocurriendosele usar el oso que abrazaban entre los dos.

Con suavidad lo alejó de sus "sobrinos", sonrió al ver cómo intentaban alcanzarlo con sus bracitos- Si lo quieren, van a tener que venir por él- no sabía si le entendieron, pero haría lo posible para que así fuera.

-Ven, YeIn. ¿Quieres el osito, pequeño?- intentó primero con el trillizo del medio, ya que era quién estaba más interesado en el oso.

-Ven a por él- le seguía animando. El nene se puso en cuatro y empezó a gatear, HoSeok al verlo se alejó un poco más, el niño paró al ver eso y volvió a sentarse sobre sus pompitas.

-Tienes que caminar, pequeño- con el oso hizo cómo si este caminara, moviendo sus patitas sobre el suelo. Al parecer el nene captó parte del mensaje, ya que intentó ponerse de pie por si solo, fallando al querer hacerlo de una.

Con un pucherito miró a su lado, tenía de apoyo el sofá y aprovechó eso. Se puso sobre sus rodillitas y aferró sus manitas al sofá, de apoco se fue levantando hasta quedar de pie. HoSeok se sintió orgulloso de su trabajo.

-¡Eso es! ¡Ven por el oso, Innie!- alentó al pequeño, YeIn pasó su piecito izquierdo, cubierto por un calcetín con el diseño de Thor, al frente y después el derecho, para caer sentado. Iba a acercarse para consolarlo, pero le vio intentar ponerse de pie otra vez.