Uno para Dos (Reescribiendo)

Besos en mi cuarto

Narra Alexandra.

Domingo...

Como cada fin de semana salgo a correr al parque.

Veo los arboles al pasar, los niños y niñas jugando y divirtiéndose en el área de los columpios con sus padres u otros familiares.

Veía otras personas correr y me desconcentré cuando escuché un sonido que provenía desde mi teléfono.
James: puedo correr contigo?
Alexandra: ¿como sabes que estoy corriendo? ¿Me estas siguiendo?
James: No Jaja
Alexandra: bueno dime donde estas
James: tu sigue corriendo.

Miré hacia delante pero no pudo ver mucho porque me choque con una persona y ambos caímos al suelo.

-Lo siento mucho, ¿estas bien?- pregunté levantándome.

-Si, tranquila.- dijo, aquella voz me pareció impresionante, era la voz de un actor o eso me parecía. Sus ojos eran totalmente azules y su pelo negro hacía que  sus ojos resaltaran mas- Soy Cameron, y creo que no deberías mirar el teléfono mientras corres Jaja, lo se por experiencia, porque yo también estaba con el mio en la mano.

Le ofrecí la mano y le ayudé a levantarse del suelo.

-Yo soy Alexandra-dije sonriendo a aquel chico tan guapo.

Ví a James acercarse a nosotros.

-Eres experta en caerte encima de las personas.-dijo seriamente.

- jajaja no es para tanto-dije - Bueno haber James este es Cameron, Cameron este es James.

-Hola.- saludó James

-Hola-dijo Cameron sonriendo.- ¿donde estudian chicos?

-En el Sweet High- se me adelantó  James- ¿y tu?

-Yo no estudio, no es mi rollo- sonrió Cameron.

James y yo nos despedimos de Cameron aunque antes le di mi numero de teléfono.

Y seguimos corriendo.  Pero como soy tan torpe volví a tropezar y me torcí el tobillo.

-Ay!- me quejé al intentar levantarme.

-Espera, yo te ayudo.-dijo James que se agacho y me cogió en sus brazos.

Estábamos llegando a la puerta del edificio cuando nos encontramos a Rebeca.

-¿Crees que esta es forma de andar por la calle?- pregunto echa una fiera cuando nos vio.

-Callate y abre la puta puerta- dijo James

Estoy segura de que a Rebeca le dio tanto miedo como a mi y simplemente se dedicó a abrirnos la puerta. James subió la escalera conmigo en brazos y tocó el timbre de mi casa.

-¿Que te ha pasado tonta?- pregunto Andrea al abrir la puerta.

-¿Podrías apartarte por favor?-preguntó James amablemente. Andrea se apartó de la puerta.

-Mi habitación esta al fondo a la derecha pero puedo ir sola- dije avergonzada, ya había echo bastante y además no quería que viera mi habitación .

-Tranquila, yo te llevo.- dijo el. Me dejo en mi cama y se sentó a mi lado.- ¿necesitas algo mas?- me pregunto.

-No tranquilo.- dije

No me había dado cuenta de la cercanía de nuestros rostros hasta ahora  y al parecer el también se había dado cuenta.

Nuestros labios se juntaron, un beso lento pero apasionado.

-Alexandra- dijo mi hermana.

Nos separamos antes de que ella entrara en la habitación.

- D-Dime - dije a mi hermana.

-Quería decirte que antes llamó papá, quería hablar contigo-dijo Andrea

¿Papá?¿Que querrá?

-En un rato lo llamaré- dije

-De acuerdo. Traeré hielo para tu tobillo- dijo Andrea con una sonrisa que no me gustó mucho.

Andrea fue a buscar hielo y volvió enseguida,  fingió tropezar con algo para tirar la bolsa de hielo a mi tobillo.

-Lo siento mucho- dijo, (no lo sentía en absoluto).

Salio de la habitación.

-Bueno va siendo hora de que me vaya- dijo James levantándose de la cama.

-Espera- dije cogiendo su mano y acercándolo a mi.

Yo estaba recostada de la pared  y el tuvo que poner una mano a cada lado de mi de mi cabeza, sujetándose en la pared para no caerse.

Su labios volvieron a los mios  rápidamente. Andrea entro sin avisar y sus labios se separaron de los mios.

-Mamá acaba de llegar. -dijo mi hermana saliendo de mi cuarto.

-   T-Tengo que irme, adiós - dijo James.

Me beso en los labios una ultima vez y salio de mi habitación.