Nos sentamos en el coche como el primer día de nuestras primeras vacaciones; Jesús delante y Calum, Dani y yo detrás. Estos dos me abrazan, saben como lo estoy pasando y también saben que no me he correspondido a los golpes por mi situación física.
Veo que Jesús nos mira por el retrovisor, aunque se que en verdad me mira a mi.
-Alice.-me llama-¿Podemos hablar ahora luego?
-Claro.
Sonrío levemente y giro mi cabeza hacia la carretera, veo pasar cada árbol, cada señal, cada cosa que hay se va quedando atrás y conforme avanzamos veo más edificios.
Abrimos la puerta y bajamos, hemos llegado. Jesús me mira y los dos juntos subimos a su habitación, entramos y cierra la puerta. Me siento en la cama y empiezo a hablar.
-¿Que querías?
