Cαɳԃყ 》Ｓｅｏｎｇｓａｎｇ

Capítulo 16

El fin de semana en casa de su novio fueron increíbles, vieron películas mientras comían palomitas de maíz, jugaron juegos de mesas y pidieron pizzas a domicilio para cenar. Pero lastimosamente, el día lunes llegó, día en el que una nueva semana comienza llena de labor.

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-¿Cómo la pasaste el fin de semana?- Mingi le preguntaba a Yeosang miestras se encontraban en los vestidores.

-Super bien ¿Y tú?- una sonrisa se asomó cuando pequeños fragmentos de recuerdos se manifestaron en su cabeza. 

-Ayudé a mi padre en una construcción, mis músculos duelen.- mueve su hombro adolorido.

-Puedo hacer algunas cosas por ti, de todas formas casi siempre olvidas hacer tus tareas.- riñe el rubio de forma sarcástica.

-Podré olvidarme de muchas cosas, pero jamás de ti.- dio un paso mas cerca de él.

-Toma distancia, tengo pareja, lo sabes.- lo alejó empujando su torso.

-Solo bromeo ¿Las cosas entre ustedes van bien?-

-Más de lo que imaginaba, aunque... cuando nos estábamos besando y me subí a su regazo comenzó a actuar raro.-

-¿Eran besos simples o besos profundos?-

-P-profundos creo...- rasca la parte trasera de su cabeza apenado.

-¡No me digas que se le paró!-

-Shhh cállate, nos van a escuchar.-

-Eso no tiene nada de malo, todos somos homos aquí. Ahora dime ¿lo hicieron?-

-¿Hacer qué cosa?-

-Tener relaciones, eso.-

-Apenas llevaremos tres semanas, no hay que apresurarse.-

-Pero él ya se siente incómodo hasta cuando se besan, puede que llegue un punto en el que no quiera besarte más porque se excita cada vez que lo hace. ¿No quieres que eso pase verdad?-

-No pero...-

-Tienes que buscar una forma de aliviarlo, no solo con el sexo.-

Los clientes comenzaron a llegar, interrumpiendo su conversación y dejarle con la duda en . Yeosang es todo un novato ante este tipo de cosas, apenas estaba en una relación y no quería arruinarla por algo así, todo iba bien a su gusto, pero verlo incómodo a la hora de besarle no le agrada.

Luego del trabajo, visitó a su abuela en el acilo, lo hace con regularidad unas tres o cuatro veces por semana. Llevó consigo sus dulces y comida favorita, mas una que otras prendas nuevas que compró cuando salió de compras.

Al llegar, se emocionó demasiado, abrazando a su nieto con fuerza, disfrutando de aquel acogedor gesto, sintiendo el calor de una madre que nunca tuvo. En efecto, unas lágrimas traviesas se asomaron en sus ojos, que retiró rápidamente.

-Esta ropa es muy bonita, gracias.- decía mientras sacaba las demás cosas.

-Todo lo que uses te queda precioso.- sonríen cálidamente.- ¿Te gusta el lugar? ¿te sientes cómoda aquí?-

-Es muy acogedor, me gusta salir al jardín cuando hace un buen día.-

-Qué bien, me alegro que te guste estar aquí, aunque en casa se siente vacío sin ti.- toma sus manos acariciando el dorso de esta.

-¿Por qué no te mudas con un amigo? dijiste que tenías muy buenos amigos, también puedes ahorrar dinero.-

-Lo pensaré, por ahora quiero estar así por un tiempo, no quiero estorbarle a nadie.-

-¿Quién no querría a un chico tan lindo como tú?- automáticamente su mente pensó en Seonghwa, siente tan querido por esa persona que no puede dejar de pensarlo ni una sola vez.

Sus cariños y aprecio hacia él eran de otro mundo, ser amado por alguien que no sea solamente su abuela. Por el momento, no le contara nada sobre su relación, por miedo a que no lo acepte por ser gay. Espero que algún día pueda decírselo con tanta confianza.

Regresando a su casa totalmente agotado, ya que estuvieron hablando y jugando toda la tarde.

Cuando quiso abrir la puerta, se dio con que ya estaba abierta. Asustado entró silencioso, usando su mochila como arma de defensa.

Un Seonghwa apareció ante sus ojos.

-¡¡¡Oye!!! ¡me asustaste!- le golpea con la mochila pero sin generar fuerza.

-Jajajaja lo siento... quería darte una sorpresa.-

-Debiste avisarme o algo... soy muy sensible a este tipo de cosas.-

-No lo sabia, perdóname.- abraza a su novio quien casi está al borde del llanto.- compré tu comida favorita.-

-¿En serio? ¿es pollo frito picante verdad?-

-Por supuesto.- su humor cambió drásticamente, casi estaba saltando de la alegría.- Primero tienes que darme mi pago.- con ambos dedos hace unos ligeros golpecitos en sus labios.

Yeo al instante reacciona y se pone de puntillas para alcanzar a su boca y besarla. Lo hizo rápidamente y se fue hacia donde estaba la bolsa de pollo frito.

Seonghwa era tan feliz con verlo disfrutar de todo hasta la mas mínima cosa que se le presente ante sus ojos.

Ambos se sentaron a comer, pero Yeo fue quien comió en más cantidad, era de esperarse, es su comida favorita.

-Esto muy lleno...- frota su barriga mientras tira su cuerpo hacia atrás.

-No debiste comer demasiado, podrías haber explotado.-

-Pero siempre tengo reserva para tus besos.- se aproxima de repente hacia él para besarle.

Seonghwa corresponde y lo recuesta sobre su estrecha cama. Sigue besándole con más intensidad, pero tuvo que detenerse cuándo su zona baja comenzaba a despertarse. Cada vez era más sensible, a pesar de que pasara todas sus noches masturbándose como un niño adolescente con sus hormonas a flor de piel.

El rubio aún debajo suyo, levanta una pierna, haciendo que su rodilla roce con su entrepierna ya dura.

-Yeosang yo...-

-¿Quieres hacerlo?-

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¿Me perdonan? Porque esta algo corto, por dejarlos con la intriga y por no subir capítulo por varios días...

Los quiero mucho ¿sabían?  ❤