Elements Attacks || YeonBin

[11] BeomGyu no es peligroso

TaeHyun en esos tres días que llevaba ahí secuestrado se había dado cuenta que BeomGyu no era malo ni peligroso.

—No me gusta la berenjena —dijo apenas miró como el chico cortaba en rodajas dicho alimento. Seguía ahí en la silla atado y tenía acceso visual a lo que funcionaba como sala de estar y cocina, sus manos ya estaban entumecidas, sus columna dolía, cuando lo desataran iba a estar demasiado adolorido. 

BeomGyu rodó los ojos dejando de picar la berenjena, tomó el plato de ensalada, con simple lechuga, vinagre, sal y tomate, eso había sido el almuerzo y cena de TaeHyun esos días, se sentía a dieta prácticamente y aunque aveces no quisiera tenía que comerlo, era mejor eso a nada pues muy bien, BeomGyu le podía hacer una puñeta y no darle de comer ni de beber.

Aún no entendía la razón de su secuestro y no dejaría de preguntar cada que tuviera oportunidad. Y esa oportunidad era cuando BeomGyu le daba de comer, había pedido hacerlo él solo pero por obvias razones, el muchacho no aceptó así que ahí estaba abriendo la boca para recibir la primera cucharada de ensalada.

—¿Por qué me tienen aquí? No tengo nada que les interese —dijo al dejar de masticar.

BeomGyu suspiró.

—Yo no lo sé —dijo por primera vez— Yo solo cumplo órdenes —pinchó una rodaja de tomate y la llevó a la boca del oficial buscando que no hiciera más preguntas.

Aunque no funcionó.

—¿Quieren saber donde queda la APRSE? —preguntó al dejar de masticar, BeomGyu lo miró fijamente, TaeHyun sabía leer a las personas y a pesar de que BeomGyu no era un ser humano, si no un hada prácticamente, veía sorpresa en su mirada— Tengo entendido que muy pocos saben en donde queda, y si quieren llegar, ¿a qué van a ir? Son unos criminales.

—No somos criminales, solamente protegemos a los animales y demás —se defendió con el ceño fruncido.

—Pero igualmente serán reprendidos por la APRSE —esa era, hasta ahora, la conversación más larga que habían tenido.

—Queremos buscar a alguien —soltó dándole a entender a TaeHyun que ese "Yo no lo sé" y "Solo sigo órdenes" había sido mentira, un intento para desviarle el tema.

TaeHyun masticó la siguiente cucharada y pensó bien lo que diría, lo que le convenía y lo que no.

Él podía llevarlos allí, para encontrar a quien sea pero de inmediato serían reprendidos, es decir, encarcelados por cierto tiempo al ser el chico un "criminal" o "alterador de la paz" y posiblemente su cómplice también lo era, aunque no le interesaba mucho que los encarcelaran o no, él quería sus manos sueltas.

—Yo los puedo llevar, si no intentan nada malo en contra la agencia o los trabajadores de allí —dijo mirando fijamente al castaño— Eso si, no será mi culpa que los encarcelen o algo parecido —aclaró.

BeomGyu lo analizó por unos segundos y se levantó, dejando el plato de ensalada a un lado.

TaeHyun quedó solo en menos de unos minutos, ¿había cometido un error al decir eso? ¿Ya no le darían comida?

Tenía algo de miedo, no lo iba a negar ni a disfrazar con una cara relajada, tenía miedo.

Para cuando BeomGyu volvió el estómago de TaeHyun estaba dando un concierto del hambre que tenía, solo había ingerido unas cuantas cucharadas de ensalada así que pidió apenas miró al castaño que le diera la comida.

—Come tu mismo —dijo desatando las cuerdas que le mantenían a la silla, TaeHyun alzó sus cejas.

Cuando sus piernas estuvieron liberadas soltó un jadeo de satisfacción, estaban entumecidas.