Desconocido:
Llegué al salón de Seattle. Eran las 12:35 am y no había rastro de Nathalie por ninguna parte, gente por doquier hablaba entretenidamente, unos me saludaban, otros no. A lo lejos en la barra pude ver tres siluetas, una yacía en el suelo.
Un hombre le gritaba y la otra mujer la agarraba fuertemente entregandosela al hombre, segundos después, el hombre se llevaba a la chica escaleras arriba.
Nat, esa era Nathalie.
Llamé a unos de mis hombres para que estuvieran al tanto cuando pudiera salir con Nat. No era una tarea fácil pero prefería hacerlo solo, parte del problema era mi culpa, aunque nadie lo entendiera.
Me acerqué a las escaleras un poco, para ver si aún estaban allí. En definitiva, Ese hombre le estaba gritando a Nat y la subía a la fuerza por las escaleras.
Nat solo balbuceaba, parecía drogada, claro, así era mucho más fácil para ellos manejarla.Esperé unos 5 minutos hasta que escuche como una puerta se cerraba y ya no había más ruido.
Me aseguré que la chica que estaba antes con ellos no estuviera merodeando por aquí y se haya dando cuenta de mi presencia.
Subí las escaleras y me acerqué a la puerta donde se escuchaba la voz de Nathalie. Me acerqué lo más que pude para escuchar cualquier cosa que me sirva de evidencia. Encendí la grabadora para que cualquier sonido quedase grabado.Se escuchaban insultos, súplicas, preguntas, y más insultos, hasta llegue a escuchar como escupían. Espero y no haya sido hacía Nat, porque juro que no me detendré cuando tenga mis puños en su maldito rostro.
Preparé mi arma y gire la perilla, lentamente abrí la puerta hasta poder tenerlo en la vista
- ¿Por que no te quieres divertir conmigo? ¿Me dirás qué no se satisfacer tus necesidades? - Salió con un tono de burla, de ese Hombre.
- Dejame en paz - escuche sollozar
Entre a la habitación oscura y deje la puerta entreabierta para que cuando Nat tuviera la oportunidad, saliera.
- ¿Que tal si yo me divierto contigo? Sería divertido jugar a que yo con mi pistola, te pego un tiro en mitad de tu asquerosa cabeza de mierda ¿Te parece?
Nick lentamente voltea, y me mira. No había mi una pizca de asombro, pareciera que estuviera preparado para esto.
- Oh, ¡Hola querido amigo! Creo que estas un poco loco ¿No? Como para entrar a una habitación donde hay una pareja a punto de follar ¿No lo crees? Tampoco creo que mi mujer quiera un trio. Y menos cuando me estás apuntando con un arma, ¿Es de juguete? ¿Quieres hacer el papel de policía malo y ponerme tus esposas?.
Tristemente te diría que no soy de ese bando, amo follar mujeres, no se tu. - Termina su discurso para soltar una larga carcajada.Le sigo la carcajada, hasta que le quito el seguro al arma y su semblante cambia a uno totalmente serio, pero la cambia de una vez por una sonrisa torcida.
- No pienso jugar contigo al policía y a la presa. Sólo quiero, que te alejes de Nathalie y no te atrevas a ponerle un dedo encima ¡Es muy fácil! ¿No lo crees? Todos saldremos de esta felices. Oh, al menos que si quiera un balazo en toda la mitad de tu cabeza, ¿Quieres? - Le sonrió un poco.
Su sonrisa siniestra sigue en su rostro. Miro de reojo a Nat, quien está asustada y confundida ¿Aún no me reconoce? Creo que no, pero solo me importa poder salvarla de este hombre asqueroso.
- Pues, creo que también puedo jugar contigo, ¿Quien crees que ganaría Nat? Si yo también le sacó mi pequeña arma, preparada para soltar y disparo y que peque directo en tu pecho ¿Ah? - Dice sin despegar su mirada de la mía.
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El Hilo Rojo.
RomanceY sin importar que tan lejos estuvimos, sin importar cuánto se enredo ni cuanto se estiró, el hilo rojo siempre nos termino uniendo. 🍁