Ocho

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Hoy era un día como cualquiera. Donde era más cansancio que persona, la universidad me estaba quitando más de lo que me daba. Bien, quizás exagero. 

–Min Yoongi. 

Escucho mi nombre, era una voz femenina y pronto tengo a una mujer mayor enfrente, su semblante emocionado es extraño para mí. 

–Tengo noticias para ti, por favor, acompáñeme a mi oficina.

–De acuerdo.

Pronto estoy en la oficina de la directora de carrera. 

Que no me diga que me quitan la beca, no ahora,no, no, no. 

Hola diosito, soy yo de nuevo. 

–Recibí una interesante llamada hoy, de uno de los directores de la carrera de música, de la universidad nacional de bellas artes, de Japón. 

¿Esto es lo que creo que es? Imposible. No te ilusiones antes de tiempo. 

–Preguntando por Min Yoongi, el talentoso pianista, alumno de aquí. O sea, tú. 

De pronto mi pulso se sentía muy pesado en mi pecho, inhalé audiblemente. 

¿Es esto real? ¿Realmente no se trata de un sueño? 

Disimuladamente y debajo de la mesa me pinché el brazo, el dolor estaba ahí. 

Mi pulso lo sentía hasta en los oídos, mi mente estaba completamente en blanco. 

–Les he hablado muy bien de ti, ya saben que eres un alumno becado y excelente. Dicen que habían visto varios de tus videos de concierto y están interesados en venir a verte en vivo. Min Yoongi creo que vienen con la intención de ofrecerte una beca, para la universidad en Tokio. 

–No puede ser–cubrí parcialmente mi rostro sin cubrir mis ojos. 

¿Cómo puede ser esto posible? 

Sólo se trata de mí ¿Por qué vendrían desde una universidad tan prestigiosa? 

–Vendrán para los conciertos de examen del semestre, me tomé el atrevimiento de invitarlos ya para esa semana, espero que estes más que listo para ser escuchado por aquella gente tan importante. 

–En menos de dos semanas–tragué duro, mi boca parecía secarse. 

–Debes estar tranquilo. Confío en que harás una presentación excelente. Incluso tu profesor del área tiene mucho que decir sobre ti, todos te tienen fe. 

–Directora Choi, muchas gracias, por recomendarme y hablar tan bien de mi persona. Su universidad me hizo quien soy ahora, tiene parte del crédito. 

La mujer sólo negó con una sonrisa. 

–Está en cada uno crecer y aprovechar todo su potencial. Felicidades Min Yoongi, tengo la certeza de que ganarás esa beca y representaras a corea como el mejor. 

Me levanté del asiento e hice una reverencia completa. Eran tantas cosas y una noticia tan grande que ni siquiera me sentía presente en mi propio cuerpo. 

–Un chico cualquiera de Daegu, con un piano viejo en la esquina de su casa, quien vino completamente sólo a enfrentar la gran ciudad de Seúl–susurré al viento. 

Aquí en el segundo piso del edificio, siendo un estudiante de la carrera que amo, creí que mis grandes metas estaban en su punto final con la culminación de mis estudios. 

¿Cómo es que todo cambia de un momento para otro? Hoy prometía ser un día más y un día menos al mismo tiempo. Sólo eso. 

Mis apresurados pasos me llevaron a la sala de ese elegante piano. Siempre imponente, inmutable, cantando historias de todo el mundo todos los días. Intenté que mis lágrimas no cayeran sobre sus blancas teclas, sería ofensivo para tan preciado instrumento. 

Si algún día [TaeGi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora