Cap. 3 "Quiero acabar con esta sociedad"

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-------------Sucesos de la noche anterior--------------

¿Cuántas cosas hay que pasar en la vida para volverte una persona de bien? O al contrario ¿Alguien totalmente retorcido? Basta con tener puntos de vista diferentes, vivencias diferentes, ¿Qué es lo que nos hace villanos? Podría ser aburrimiento, malos tratos en la sociedad.

Solo porque la mayoría cree que lo que hacemos está mal, entonces nosotros somos los malos. ¿Qué puede hacer alguien débil como yo, para cambiar la manera de pensar de todos? ¿Alguien que siempre ha callado sus penas? Una persona que jamás será escuchada por nadie…

Solo se me ocurre una manera, revivir la pesadilla de todos, y subyugarlos, hacerles recordar, y sentir, lo que me hicieron a mi muchas veces, esa es mi ventaja de ser inmortal, ahora que lo sé ¿Quién podrá detenerme?

Una chica de sonrisa retorcida, de largos cabellos negros lacios, se encontraba en una pequeña embarcación, en medio del mar, era de noche, la luna iluminaba su piel, haciéndola ver aún más blanca de lo que ya era, sus ojos eran oscuros como las profundidades del mismísimo infierno. Su expresión vacía y despreocupada, miraba hacia el infinito, fijada en el horizonte que se perdía a lo lejos.

—¿Cómo me encontraste? Y ¿Por qué me has ayudado? —una voz suave, cantarina, de una persona mucho mayor que ella.

—Muchos me califican de genio, no creo que haya problemas para que yo pudiera encontrarle. Le tengo gran admiración y… Quería pedirle un favor.

No lo tuteaba, de hecho, su manera de dirigirse al individuo era una de profundo respeto. El mayor no la conocía, no tenía idea de quien se trataba, ni siquiera sabía si estaba en su sano juicio, pero… Le agradaba su temeraria aptitud.

—Ya veo —el mayor dejo escapar una sonora carcajada—. Entonces ¿Qué es eso en lo que soy bueno?

—Quiero destruir… Esta sociedad —ella miro sobre su hombro a la cara del hombre—. Quiero que las injusticias dejen de ser calladas, quiero que se detengan los que abusan del poder, quiero crear mi propio campo de juego, Satou-san…

—¿Un juego? —el mayor lo pensó unos instantes, antes de mostrar una leve sonrisa torcida—. Podemos inventar un juego, pero tu seguirás mis reglas.

—Por mi está bien, siempre he admirado su manera de actuar, desde que lo vi en la televisión —ella suspiro profundamente— me pareció alguien increíble.

—Ojalá mi nieta fuera más como tu…

—¿Shirayuki-san? Se poco de ella, pero lo que se, realmente me parece incomprensible.

—Es asi, creo que no heredo mis genes del todo —bromeo— ¿Sabes a lo que te refieres con acabar con la sociedad?

—Lo tengo claro desde hace mucho, mi objetivo es inquebrantable.

—Bien, jugare este juego mientras sea divertido, pero en lo que sienta que no lo es… Me iré, estoy un poco cansado de esto.

—No me dirá que ¿No quiere hacerlo?

—Ayudar a una niña en una pataleta infantil, que probablemente se arrepienta y termine yo como el malo una vez más… —este se levantó—. No hay nada que me parezca más interesante ahora mismo. Pero, no creas que soy tu títere.

—¡Por supuesto! Gracias por aceptarlo… Es un honor para mí estar a su lado.

Las personas que iban en el automóvil se sintieron incomodas, con ganas de pedirle a la mayor que se detuviera, y bajar hasta alejarse lo más posible de los problemas, pero ninguno de los presentes por más que quisieran podían permitirse dejarlo asi.

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⏰ Última actualización: Nov 13, 2020 ⏰

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