༺Rᴇɴᴛᴇᴅ Bᴏʏғʀɪᴇɴᴅ ༻ °Jᴇᴏɴ Jᴜɴɢ Kᴏᴏᴋ °✓

Uɴᴏ

Mi familia siempre ha mantenido distancia entre sus miembros, pero sobre todo de mí, mas, cuando hay algún evento importante, como alguna boda o algún cumpleaños, todos se reúnen como si se llevaran de lo mejor, cuando la realidad es
otra.

Mi madre es la más lejana a mí...Tanto así, que no sabe ni qué edad tengo. Sólo le interesaba los bienes que le aportaba como trabajadora de una de sus empresas, y se empeñaba en que le diera un nieto, ya que todas mis hermanas tenían hijos, y yo "me había quedado atrás".

De ahí que siempre haya querido conseguirme un novio que, estoy completamente segura, sería: o un hombre de cincuenta años, casi sesenta, o un joven ricachón, de esos que son vanidosos, machistas, y avariciosos.

¡Joder!¡Que sólo tenía veinticinco años en aquel entonces!

En mi familia, las mujeres tenemos, bueno...ellas, tienen la costumbre de casarse y parir antes de los veinticuatro.

Mi familia es China, no obstante, yo nací en Inglaterra (por eso mi nombre internacional es Lucy, y el natural, de nacimiento, es ShuHua), y pienso que seguir esa costumbre, que además, no es de mi país natal, es una tontería.

No pensaba ni casarme, ni parir, por el momento.

Ya lo dije. Tenía veinticinco años y no estaba de acuerdo con las tradiciones familiares.

De hecho, no sabía cómo mis padres se habían casado. Mi padre es inglés (de ahí que naciera en Inglaterra y me otrogaran el nombre de Lucy. Él siempre me llama así y, siendo sincera, es mil veces mejor que ShuHua) y mi madre china. Tengo entendido que se conocieron en uno de los viajes de mi madre por Inglaterra (para ampliar su negocio de comercio de telas) y ahí surgió el amor, se casaron a los tres meses, y a los cinco llegué yo.

Loco ¿no?

Después de eso, cuando cumplí el año, se separaron (porque mi padre no soportó la personalidad de mi madre) y desde entonces vivía en China junto a mi familia materna, recibiendo las visitas de mi padre y uno que otro viaje que lograba dar a Inglaterra para visitar a mi familia paterna que no eran más que dos abuelos a los que tampoco les agradaba mucho, ni ellos a mí, la verdad.

Todo esto nos lleva a aquel día donde mi madre me había puesto entre la espada y la pared, exigiéndome una pareja que claramente no tenía pero, si no la llevaba, iba a ser caótico.

Aunque fuera mayor de edad, ella era capaz de comprometerme con cualquier extraño millonario que fuera su socio...porque sí.

-¿En que tanto piensas, Lu?-me decía mi amiga, Ann. Ella es extranjera; su piel morena la delata, además de su nombre, claro.

-Mi madre...Ya sabes, lo que te conté esta mañana-dije con fastidio.

En cuanto recibí la llamada de mi madre, llamé a mis dos mejores amigas; Ann Da Silva, y Song YuQi.

Ann nació en Brasil y estaba becada en la misma universidad mía y de YuQi, quien sí es nacida en China.

-¡Oh! Eso...la verdad es que no sé cómo ayudarte-me dijo, desanimada.

-¡Pero yo sí!-exclamó YuQi, acercándose a nuestra mesa.

Las tres habíamos quedado en la cafetería a la que siempre íbamos que, aunque no era mi favorita, me gustaba el servicio y la comida que ofrecían.

Ann y yo habíamos llegado primero ya que YuQi siempre, pero siempre, llega tarde a cualquier lugar. Es muy poco común que llegue temprano a algún sitio.

-¡Por favor!¡Dime cómo salir de éste apuro!-le rogué juntando ambas manos al frente.

-Renta un novio-dijo con normalidad una vez se hubo sentado, quedando entre la brasileña y yo.

-¿Qué?-fuimos precisamente nosotras dos las que exclamamos aquello. Por suerte no había mucha gente en la cafetería. De lo contrario, ya habríamos llamado la atención.

-Toma-YuQi me extendió una tarjeta y al recibirla y leera, fruncí mi ceño.

¿Necesita usted asistir a algún evento? ¿Quiere llevar una pareja pero no tiene?
Entonces ésta es su oportunidad de conseguir un novio, o novia, rentado.
Llame al número que le dejamos abajo, y obtendrá mucha más información.

-¿Novio rentado?-miré incrédula a mis amigas.

-No es la primera vez que veo eso. De hecho, yo misma lo utilicé una vez para ir a un evento y restregarle en la cara a las chicas de la universidad lo lindo que estaba el chico que había rentado-dijo YuQi sonriendo.

-¡Oh! Fue el chico este...Mark ¿no?-ante la duda de Ann, YuQi asintió con una orgullosa sonrisa.

-Quedamos en vernos luego de la renta, pero ni siquiera nos hablamos ya. Saben como soy. Necesito a alguien en mi vida que me haga sentir en el cielo-mordió sus labios, dejando sus ojos en un punto fijo. Estaba en un viaje por su propio mundo-, que me haga sentir como si estuviera viviendo el último día de mi vida ¡La adrenalina es todo lo que necesito!

Sí, YuQi siempre ha sido la más liberal de las tres. Es por eso que a mi madre nunca le agradó.

-Supongo que tendrás más experiencia que yo en esto-le dije, siendo contagiada por la sonrisa que me brindó.

-En cuanto a sexo, no sé, porque en eso nos ganas a ambas...y eso que eres china-se burló YuQi y yo rodé los ojos.

Sí, tal vez ella sea la más liberal, pero yo siempre he sido la más lujuriosa.

Ann tenía el puesto de la voz de la consciencia de las tres.

De no ser por ella, muchas locuras hubíesemos hecho YuQi y yo.

-Porque sea china, no significa que tenga o quiera que llegar virgen al matrimonio-hablé con una mueca de asco plasmada en el rostro y ellas rieron-. Además, nací en Inglaterra...y en lo personal, pienso que mi familia y yo no tenemos nada que ver...Pero no me refería a eso, y lo sabes-enarqué una ceja señalando a YuQi.

-Sólo bromeaba...-alzó ambas manos en son de paz, y prosiguió a hablar-. Lo que quieres es que sea tu guía en esto, ya que tengo la experiencia de haber rentado un novio una vez ¿no?-asentí-. Bueno, es más sencillo de lo que crees. Cuando llamas a ese número, te dan la dirección de un sitio web, donde te saldrán varias personas. Tienes la opción de poner las características que buscas en un chico, y en base a eso, te saldrán los candidatos, y después, tú elijes el que más te guste ¡Ah! Y tienes que hablar con él, para que se planifiquen y eso, además de que tienes que cumplir ciertas reglas.

-¿Okey?-murmuré por lo bajo. Estaba dudando un poco.

-¿Pero qué esperas?-di un respingo ante la exclamación de Ann-¡Arriba!¡Ve a rentar a ese novio, ahora!

-¡Eso!-la apoyó YuQi-. Si la boda de tu prima es mañana, y ambos deben coordinarse entre sí, deberías aprovechar que son las once de la mañana-habló mientras miraba su reloj.

-Está bien, está bien. Ya voy-me rendí, levantándome de mi asiento-. Adiós. Mañana les digo cómo me fue.