Salvación

#21 Casa abandonada

Escucho la puerta del apartamento cerrarse, Jack se acaba de ir. Cada vez que el se aleja, aunque sepa que va a volver, siento que me arrancan una parte de mi. Es increíble, pero es verdad. Es esa sensación de que se aleja mi única salvación, mi única oportunidad de avanzar. Es la sensación de que lo que más quiero se aleja de mi, aunque sea por un segundo. 

No quiero pensarlo así, sería una opinión superficial ya que a Jack no lo conozco mucho como para decir que, ¿me estoy enamorando de el?. Es decir, Jack vino a ayudarme con mis problemas, a apoyarme y aconsejarme. Jack me abrazó cuando yo lloraba en aquel restaurante, me contuvo entre lágrimas mientras recibía aquella llamada de Fernando. Jack me dio los mejores consejos que pude haber oído en mi vida entera para seguir, para no rendirme, para ser fuerte. Jack se abrió conmigo, me contó cosas que nunca hubiera imaginado que podrían salir de su boca. El ayudó a despejar mi mente entre cosquillas y besos, en el peor momento. Le pedí que se quedara conmigo cuando Fernando vuelva con noticias y lo hizo. Hoy llego al apartamento mientras yo dormía para saber como había pasado la noche, luego me dijo que estaba orgulloso de mi y me hizo sentir realmente bien conmigo misma. Jack ha hecho muchas cosas significantes en este corto tiempo por mi, que nadie nunca lo habría hecho. Para mi Jack es uno de los chicos más hermosos que vi en mi vida también. ¿Realmente me estaré enamorando de el? yo creo que si.

Ahora que Jack se fue, iré a tomar una buena ducha tranquila. Ya quiero que sea la hora para mi nueva primera cita, pero primero debo tomar una ducha y arreglarme. No sé si esta vez me pondré maquillaje, es decir, Jack me acaba de ver arruinada y no le importó. Tal vez sólo me pondré algo que cubra mis ojeras.

Me acerco a mi ropero y abro sus puertas, no sé qué ponerme, de nuevo. Esto de no tener ropa para eventos, hace que sea muy complicado, tal vez deba volver al centro comercial para comprar algo de ropa nueva. Ahora no tengo tiempo de hacerlo, tal vez iré mañana si es que voy a seguir saliendo con Jack, ya que es el único con el que tendré eventos. 

Esta vez simplemente iremos al parque, me pondré unos jeans celestes y una remera blanca. Creo que estará bien ¿no?. El jean simplemente está doblado en la punta, el resto es liso. Debería acompañar este atuendo con unos zapatos planos, tengo un par de color azul que me compró Fernando hace unos meses. Me gusta como se ven con este atuendo, al menos en mi mente.

Tomo la remera, los jeans y mi ropa interior del ropero, y me dirijo hasta el baño. Al entrar, cierro la puerta detrás de mi y dejo la ropa sobre la mesada del baño. Cada vez que veo mi reflejo en el espejo, me pregunto cómo Jack pudo haberme visto así de arruinada.

Mi ducha es de unos 20 minutos aproximadamente. Lavo mi cabello lo mejor que puedo, para que luzca lo mejor posible, ya que mi cara no será lo que lucirá en esta cita. Tomo una toalla limpia y seco todo mi cuerpo mojado, mientras pienso cómo sera esta cita. Ya no estoy tan nerviosa como en mi intento de primera cita anterior, sólo tengo curiosidad de qué haremos en un parque.

Cuando termino de secar mi cuerpo con la toalla, tomo la ropa de la mesada y me la pongo. Me gusta como me queda, de verdad. Pero tal vez sí deba acompañar con algo de maquillaje, después de todo, ayudará a arreglar este intento de rostro.

Tomo el pequeño estuche de maquillaje, que solíamos compartirlo con mamá y saco un delineador negro, junto con un pequeño frasco de cubre ojeras. Al minuto ya estoy trazando una pequeña línea por encima de mis pestañas y luego cubro mis ojeras. Esta vez la línea es más delgada, no quiero parecer exagerada, sólo vamos a un parque. 

Salgo del baño y voy hasta mi habitación para ponerme los zapatos color azul. Me siento en el borde de mi cama mientras hago una moña con los cordones de los zapatos. Mi cabello sigue mojado y esta enredado. Cuando termino de atar los zapatos, me levanto del borde de mi cama y tomo un peine para arreglar mi cabello.

Ahora si, estoy lista, de nuevo. Me pongo de pie frente al gran espejo de mi habitación y me observo a mi misma. Me veo bien, creo. La ropa es muy simple, pero en mi, se ve mejor. La remera hace resaltar mis curvas, lo que no me gusta mucho, pero me queda bien. 

"Ashley! Jack está abajo!" Escucho la voz de Fernando. ¿Qué? ¿Cómo que Jack está abajo? 

"Ya voy!" Respondo. ¿Ya son las 16:00? ¿qué?, el tiempo pasó muy rápido.

Tomo mis llaves y mi celular, salgo de mi habitación y me encuentro con Fernando en la habitación de entrada. 

"Se puede saber a donde vas Ashley" Fernando me mira.

"Voy al parque... con Jack" Mi voz es temblorosa.

"Esta bien, era una broma" Fernando se ríe por mi reacción y yo salgo por la puerta.

Cuando llego a planta baja, veo a Jack por el vidrio del edificio. El está vestido con unos jeans negros y una musculosa blanca que exhibe todos sus músculos. Puedo notar también su hermoso atardecer tatuado en su ante brazo.

"Hola Ashley" Jack dice cuando salgo por la puerta.

"Hola Jack" Me abraza, se siente tan bien.

"¿Lista para nuestra cita?" Jack pregunta sabiendo la respuesta.

"Lista" Sonrío.

"Te ves muy bien" Me dice.

"Tú también Jack" Alago, tratando de no desviar demasiado la mirada a los brazos desnudos de Jack.

"Ven, sígueme" ¿qué?

"¿No iríamos al parque? El parque queda por el otro lado!" Jack cincha de mi brazo, indicando el camino.

"Estamos cerca!" Jack camina cada vez más rápido.

No tengo idea a donde me esta llevando.

"Llegamos" Jack dice cuando llegamos a una ¿casa abandonada? ¿en serio?.

"¿Qué?" Esto debe ser una broma.

"Aquí será nuestra cita" Jack me mira.

"¿En una casa abandonada? ¿De verdad?" Mi tono es duro.

"Tú cállate, vamos a entrar" Jack camina hasta la puerta de la casa, no entiendo nada.

"Jack...¿esto es una broma?" Me acerco a el.

"Para nada" Jack abre la puerta y entramos.