Naranja y Azul

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- ¡Hinata boke! ¡debes golpear más fuerte para que no lo detengan! - le grité a la tonta que acepte ayudar, no sé en qué momento considere que esto era buena idea

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- ¡Hinata boke! ¡debes golpear más fuerte para que no lo detengan! - le grité a la tonta que acepte ayudar, no sé en qué momento considere que esto era buena idea.

- ¡bakageyama-kun! ¿si recuerdas que soy una chica? no tengo tanta fuerza bruta como los de tu equipo - me contestó la pequeña chica haciendo un puchero muy tierno, simplemente no pude evitar avergonzarme, creo que ya recordé porque acepte ayudarle..

- ¡oigan ustedes! ya son más de las 8 PM ¡vayan a sus casas! - nos regaño el celador de la escuela, rompiendo totalmente con el ambiente, a lo que Hinata me miró de forma suplicante, esperando que yo le respondiera una negativa a aquel señor que nos seguía mirando a la espera de nuestra salida del gimnasio, seguramente para cerrarlo he irse a casa.

- el tiene razón, ya es muy tarde - apenas esas palabras salieron de mi boca, note el evidente bajón emocional de mi contraria, algo en lo más profundo de mi, que desconozco totalmente, simplemente se resistió a la idea de provocar esas emociones en ella, su sonrisa era mejor que esa expresión, su brillo, aunque segador, es hermoso, ella es hermosa - podemos seguir practicando mañana, solo debemos pedirle permiso a nuestros capitanes - intenté animarle, pero aparentemente no era necesario, es tan manipuladora como siempre, solo tuve que decir eso y la chica volvió a sonreír de la forma tan radiante como siempre suele hacerlo y sin previo aviso, de un salto logro depositar un beso casto en mi mejilla derecha, sus labios eran suaves, aunque el tiempo que duró aquel beso fue escaso, para mí fue eterno.

- ¡eres el mejor Kageyama! ¡vamos a recoger para irnos! - volvió a gritar enérgicamente, puede ser extraño pero ahora siento ganas de borrarle esa sonrisa.. es tan irritante cuando se pone a gritar así, pero esa idea abandona mi mente tan rápido como llegó, el solo hecho de imaginarla llorando me hace enfurecer.

quizás mi abuelo si tenía razón y ella es la persona de la que el hablaba, ella es la única que me sigue, gracias a ella ya no estoy tan solo como antes.. sin darme cuenta paso, un bello y despampanante color llamativo decoro la hermosa cabellera de Hinata.

"de ese color era su cabello.. es hermoso"

 es hermoso"

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Almas Gemelas (Kagehina-HinataFem)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora