Maia

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"La complicidad es tanta
Que nuestras vibraciones se complementan
Lo que tienes, me hace falta
Y lo que tengo te hace ser más completa"🎶

Siempre me ha gustado esa estrofa, era la canción que sonaba la primera vez que tuve sexo con Leo, en el asiento trasero del Mustang, ha sido su tono de llamada desde entonces; sin embargo hoy todo mi cuerpo se tensa ante la melodía de la canción.
Los oscuros ojos de Lucca están atentos a mi, esperando mi reacción, no pienso responderle a Leo, no es que le deba lealtad o respeto a Lucca, pero no me siento cómoda respondiendo en este momento, por Dios! Estoy desnuda en el cuarto de Lucca, y yo, no he tenido "esa conversación" aún con Leo.

El celular deja de sonar, dando por finalizada la llamada, mi cuerpo se relaja solo un poco, antes de escuchar a Lucca
- No piensas responderle a tu noviecito?

Lo ha dicho con sorna, casi con desprecio, mi cara debe ser un poema en estos momentos, no se a donde se ha ido el Lucca de hace solo 5 minutos.

- Tienes miedo de decirle que has dormido en mi cama Preciosa?
Y bingo ahí está el Lucca que es  totalmente un idiota, siento como la furia va creciendo en mi; Dios, por qué la Felicidad me ha durado tan poco?

- Lo que yo tenga o no con Leo, no es tu problema Lucca -estoy molesta, mucho, mis manos estan en puños, las uñas clavandose en mis palmas- asi que tus opiniones te las puedes guardar o meter dónde mejor te plazca, recuerda que no somos NADA, NADA Lucca D'Anggelo, no tengo porque darte explicaciones.

Se ha quedado con la boca abierta, puede que le haya gritado, pero se lo merece. Salgo dando un portazo y lo escucho maldecir antes de caminar tras de mi; entro en la habitación que se me ha asignado y camino hacia la maleta necesito vestirme, me pongo lo primero que consigo por encima, que resulta ser una camisola de algodón que a veces uso para dormir, no es que sea mucha tela pero es mejor que estar desnuda, estoy metiendo todo dentro de la maleta cuando Lucca entra, sus ojos oscuros me analizan, parece un corderito que ha perdido a su mamá, escucho su voz ronca al hablarme
- Que haces Maia?
- Recojiendo mis cosas, no ves D'Anggelo
- A dónde crees que vas?
Su voz ha bajado varios tonos, pero no deja de ser un reclamo.
- A buscar a mi "noviecito" Lucca.

Mierda! Su cara se ha transformado, ya no es furia lo que adorna sus facciones, es dolor, hay algo muy profundo tiñendo sus bonitos ojos negros
- No lo hagas por favor

Esto lo ha dicho casi en un susurro, mi cuerpo ha frenado ante esto último y lo observo, no puedo asimilar lo que estoy viendo, Lucca luce derrotado
- Por qué? -Me atrevo a preguntar
En dos zancadas ha llegado hasta mi, con una de sus manos acaricia una de mis mejillas, la otra está enredándose en mi melena.

- Discúlpame, se que he sido un idiota y no me refiero a solo hoy, pero este idiota entro en pánico cuando lo has nombrado a Él, se que ha sido parte de tu vida los últimos años, supongo que alguien realmente importante para ti - está siendo sincero con lo que dice, y no se por que mi cuerpo se ha relajado completamente ante su tacto- ponte en mis zapatos 5 minutos si? Acabo de tener la mejor noche de mi vida con la mujer que me gusta, que me mueve el piso- Oh Dios! Me derrito- y de repente su celular suena y es él, quien creo es su novio llamando. Mierda Maia es mucho para mi!

Su ceño está fruncido ante lo que ha dicho, está molesto lo sé, así que respiro profundo y tomo aire antes de soltarle la verdad
- Leo no es mi novio Lucca, -su cuerpo se ha relajado ante esto- somos amigos con derecho nada más
Y su cara se ha vuelto a transformar, me suelta, está furioso
- Joder Maia, con que clase de idiota te has juntado?
- Dios porque tienes que ser tan frustrante Lucca?,- me siento en la cama y tomo mi cara entre las manos antes de continuar

-Leo y yo nunca hemos sido nada más que eso, más por mi desicion que por la suya - esto último es verdad , aunque el último año, intenté que las cosas cambiarán un poco, en algún punto me plantie darle una oportunidad a Leo, comenzar algo serio con él, pero parece el ya no pensaba como yo , así que no insistí.
- Por qué?
- Por qué que Lucca?
- Por qué no quisiste nada más con el?
Trago grueso antes de fijar mi mirada en el
- Porque todo este tiempo he sentido cosas por otra persona
- Quien Maia? Quien es la otra persona?
- Tú
Una sola palabra, tan simple y tan poderosa a la vez, en cuestión de segundos Lucca está frente a mi, besándome despacio, con devoción, se toma su tiempo para saborearme, para probarme, me gusta tanto este Lucca, sus manos han ido a mis muslos para levantarme, mis piernas se enrollan en su cintura y me carga, de regreso a su cuarto, a su baño, me deposita en el piso, libera mis labios solo para sacarme la camisola que me he puesto.

-Eres preciosa Maia, y eres mía, desde el momento en que posaste tus lindos ojos pardos en mi, supe que estaba perdido. No entiendo está clase de relación que  tienes con Él, pero no me interesa. - piensa antes de continuar- no te lo voy a exigir, porque me ha quedado claro que no puedo, pero me gustaría mucho que le pongas fin a lo que sea que TENÍAS con el?. No me gusta compartir preciosa y no pienso compartirte, eres mía, solo mía.

La intensidad de sus palabras me golpea, mientras me besa, estoy completamente derretida, no soy capaz de razonar lo que me pide, Dios mío dónde estaba este Lucca? Que no se vaya nunca por favor.

Despacio me mete bajo la ducha, el agua caliente sobre mi piel sensible es como un elixir, Lucca no ha dejado de besarme, y no pienso quejarme, me dejó hacer, como una muñeca, que haga conmigo lo que quiera, total, ha dicho en voz alta lo que yo no he podido expresar, soy de él, soy de Lucca.

Cuando salgo de la ducha, cansada y extasiada, me envuelve en una toalla más grande que yo, casi como un tequeño, no puedo evitar reirme ante el gesto y Lucca se ríe conmigo, reparte besos cortos en mi cara

- Me gustas mucho preciosa
Mis ojos se encienden como arbolito de navidad
- Y tu a mi bonito
- Vamos, hay que vestirse, tenemos cosas por hacer.
En el cuarto recuerdo que mis cosas no están ahí, así que me suelto del agarre de Lucca con intensión de salir
- A dónde vas Maia?
- A escaparme D'Anggelo
Su ceño se frunce en señal de molestia, Dios mío este hombre cambia de humor como cambia de ropa interior.
- Al otro cuarto Lucca a vestirme, mi ropa está allá recuerdas?

Se relaja ante esto último, y me da un beso antes de salir. Creo que tengo muchas cosas que pensar, que voy a hacer con Leo?, tengo que hablar con el. Al entrar al cuarto Cultura Profética está sonando nuevamente, vamos Maia toma el teléfono, no seas cobarde...