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«¿¡Qué está pasando!?»  Se preguntaba Ash.

Ante la confusión inicial casi tropieza con sus piernas, pero actuó lo suficientemente rápido como para mantener el equilibrio y hacer que esta situación no se volviese más extraña de lo que ya estaba. Aún así, ese pequeño triunfo no quitaba el hecho de que el azabache no sabía qué hacer ni como reaccionar, por lo que decide dejarse llevar por los dulces labios de la coordinadora, quien ahora lo abrazaba mientras el ósculo continuaba.

¿Qué pasó en esa charla? ¿Será que lo quiere a él? ¿Drew ya no es el que le saca suspiros? ¿Podría ser posible algo más entre los dos a futuro? Felicidad, lo que Ash quiere es creer en la dicha que está experimentando en esos momentos, tan hermosos instantes, pero...

Recuerda el encuentro entre el peliverde y May, quien le dedicó una mirada ya no tan llena de amor como antes, pero aún con la esencia de los mismo dirigidos al coordinador, no hacia él.

No puede cambiar tan rápido de parecer. Finalmente, es el mismo entrenador quien decide por terminar el beso.

Apenas May abre nuevamente los ojos su cara se llena de terror mientras mira a Ash. Lo suelta y mueve sus manos una y otra vez, a tal punto de que uno de sus guantes se despriende de su mano.

— Lo siento. — dice rápidamente ella, apartándose más y mirándolo a los ojos — No sé por qué... yo no pensé bien las cosas. Esto es un error.

El mundo se le cae encima.

Esto es un error.

Ash se toca la comisura de los labios aún manteniendo la sensación de los de ella posados en los suyos. Fue una sensación divina, cándida. Quiere probarlo de nuevo. Sin embargo, los ojos de pánico de su amiga lo alertan volviendo a su realidad, que de por sí ya había aceptado.

Una realidad donde May no lo ve de la misma forma que él a ella.

— Que estúpida soy, no quiero perder tu amistad, Ash.

— No la perderás. — ella ladea la cabeza y ahora lo mira con duda. Él suspira. — Sí me gustas May... pero no te estoy pidiendo que iniciemos una relación — la chica se quedó quieta, procesando las palabras que acababa de escuchar. —No creo que sea buena idea cuando sé que no estás enamorada de mí, no realmente. Este viaje es para que te despejes y te sientas mejor, enfoquémonos en eso.

May no puede evitar sentirse rara. Aún si sus palabras difieran de lo que piensa, el beso improvisado con Ash la hizo sentir algo. Algo que solo hace que su cabeza le duela, pues no siente que esté haciendo las cosas bien. Con el corazón a mil por hora y las piernas temblorosas, la ojiazul mira a Ash con una mirada entre confusión y miedo.

— Haré mi carpa, lo siento.

Ash no pone objeciones y la deja irse, con un pequeño dolorcito en el pecho.

Ash no pone objeciones y la deja irse, con un pequeño dolorcito en el pecho

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Tan fáciles no podían ser las cosas, menos si es un fanfic mío xD

Reparar tu corazón [Advanceshipping]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora